El Gatito del señor Jeon.

"huir"

Aprete los cordones de mis zapatos con rapidez, le había pedido ropa a Taehyung porque la mía estaba sucia, nunca había usado pantalones tan pegados pero eran los únicos disponibles así que tenía que conformarme con ellos y agradecí que la camisa de mangas largas fuera de una tela que no irritara mi piel, mis mejillas seguían con un sonrojo profundo y dudaba que se quitara por lo que resta de la semana.

Tenía que volver con Taehyung a la casa de mis padres, me había explicado todo el inteligente plan que había hecho junto con su alfa, alfa que aún no conocía del todo, tal vez un poco de su olor había quedado en mi mente pero su rostro seguía borroso en mi cabeza.

No era que fuera masoquista,no estaba loco por volver a un lugar donde no era feliz pero sabía que debía, la ansiedad estaba comenzando a apoderarse de mi cuerpo y tenía que moverme rápido si no quería entrar en alguna crisis, mis sospechas crecieron cuando Taehyung y yo nos sentamos a desayunar en el comedor y cada persona que estuvo presente nos miraba con anhelo y respeto, ellos sabían sobre nuestro apellido, la delicadeza con las que nos trataron en esos cortos 20 minutos fue algo muy común para mi:

- Taehyung, necesito algo de aire- dije apretando las manos en mi regazo, el cachorro se movió tomando una última galleta y dándole una mordida.

- hay unos huertos muy lindos, déjame mostrártelo- los alfas que estaban frecuentemente rondandonos se tensaron en su lugar, había dos en cada entrada del gran comedor así que en totalidad eran cuatro, los miré fijamente, algo estaba mal- ¿donde esta hoseok?- la voz dulce de Taehyung preguntó a los presentes, una de las chicas que tomaba los platos recogiendolos le sonrió con amabilidad.

- ha salido un momento, pero dijo que estaría aquí antes del almuerzo- Taehyung hizo un tierno puchero.

- ese tonto alfa- se quejo levantándose yo hice lo mismo- quería que lo conocieras como era debido- nuestros pasos se sincronizaron, cruzando las puertas del lugar, Taehyung comenzó a hablar sobre algunas cosas pero mi mente estaba alerta registrando cada pequeña cosa que veía- así que, tu primero hermanito- asentí saliendo por fin, el aire fresco choco contra mi rostro, los rayos del sol sobre mi piel hicieron cosquillas.

- Taetae ¿porque confías tanto en tu alfa?- pregunte mientras mis ojos admiraban el bonito paisaje todo el jardín estaba muy bien organizado y a lo lejos se podía ver cada vez más los huertos.

- ¿como no podría confiar en él gigi?- sus ojos brillantes lucieron más claros por lo brillante que era el día- es amable, inteligente, risueño y mi Omega lo adora- el pasto se hizo cada vez más presente sobrepasando nuestros tobillos.

- jóvenes- una voz dura se escucho cerca de nosotros, di un brinco en mi lugar, tomando la mano del cachorro con una velocidad asombrosa y situándolo detrás de mí.

- ¿hyuna?- Taehyung dio un paso al frente- ¿que ocurre?- la chica de tez trigueña y aura dominante me escaneo por unos segundos, sus ojos brillaron con algo extraño, sus feromonas con olor a vainilla y un toque picoso, entraron a mi sistema confirmando que era una alfa.

- no pueden estar fuera de la casa, hoseok lo ha ordenado- dijo cual robot, no quería un no por respuesta, el Omega menor la miro confundido.

- ¿una orden?- pregunto sonriendo.

- si joven Min- me congele al instante al escuchar nuestro apellido en su boca, mi rostro se torno pálido mientras la tensión creció en esos pequeños segundos, taetae se removió nervioso.

- ¿co-como sab..- tartamudeó- no importa- negó con su cabeza- puedes ir y decirle a hoseok que no acepto órdenes de nadie, nisiquiera de él que es mi alfa- hyuna sonrió, haciendo una mueca mientras dio una vuelta y se alejo de nosotros.

- ¿Taehyung le dijiste nuestro apellido?- mi pregunta fue casi un grito, nuestro apellido era tanto una bendición como una maldición, al cachorro le temblaron las manos, sus ojos me miraron asustados.

- nunca he hablado con hoseoki sobre sobre eso...

- ¿entonces como?

- no lo sé- sus ojos se alzaron temerosos hacía mi.

- dijiste que ese alfa era pobre, me mostraste el pequeño accesorio de oro- mi puma comenzaba a alterarse, señale con mis ojos la gran casa que estábamos dejando atrás con cada paso- ¿crees que haya pobreza en algo como eso?- el cachorro llevó ambas manos a su rostro.

- el no m-me mentiría, se encarga de estas tierras es todo- llevo ambas manos a su rostro ocultándose.

- ¿porque tanta seguridad?- pregunte- ¿porque tantos hombres?-seguí preguntando mientras lo jalaba hacia mí y esta vez caminamos más rápido- ¿porque quiere darte órdenes?- exclame, luego de esa pregunta estábamos casi corriendo por el inmenso pasto verde que seguía extendiéndose, cada vez crecía más y lo note cuando estaba casi llegando a mi cintura- por lo menos ¿conoces de que familia viene?

- gigi- sus mejillas se mojaron por dos gruesas lágrimas- no, no sé, su apellido o familia me dejé guiar por mi omega.

No podía regañarlo, no ahora, era su primer amor, Taehyung era inteligente y tenía un carácter fuerte digno de un Omega puro, pero era la primera vez que sentía estas emociones hacia un alfa y eso lo hacia débil.

- esta bien- hubo sonidos extraños, mi audición era demasiado buena, cerré mis ojos un momento para volverlos abrir alarmados- están viniendo hacia acá.

- ¿que?- miro hacia varios lados- ¿quienes?

- Taehyung vamos a cambiar ahora mismo- dije comenzando a desabotonar mi camisa.

- gigi pero...

- Taehyung estamos en peligro, necesitamos salir de aquí y organizar nuestras ideas, no sabemos si son enemigos o aliados, no sabemos quienes son realmente y no sabemos que quieren de nosotros.

Luego de eso nuestros cuerpos crujieron con sonidos dolorosos, nuestra carne se extendió y dio forma a un pelaje, nunca había sido muy amantes de observar como mis huesos se movían de forma extraña, así que cuando abrí mis ojos, ambos ya estábamos en nuestra forma animal,dos pumas completamente blancos se movieron por toda la zona que comenzaba a volverse boscosa, corrimos con rapidez, Taehyung tenía una velocidad impresionante, estaba jadeando cuando nos detuvimos por primera vez, había un río cerca podía escuchar su cauce atravez de mis oídos, Taehyung ronroneó buscando protección moviéndose hasta que tuvo su cabeza entre mis dos patas, pasé mi lengua por su cabeza dándole algo de mimos para tranquilizarlo, aunque era un cachorro su puma superaba por varios centímetros al mío, cualquier persona que mirara quedaría cautivado con nuestra imagen al instante, nuestro linaje era único al igual que nuestros genes y éramos realmente exclusivos solo una vez en tu vida podías llegar a toparte con nosotros.

Entonces el gruñido de un alfa me hizo darme cuenta que en realidad estábamos muy lejos de escapar.