Reina el amor duele (COMPLETA✔️)

capítulo 51🔪🩸

— No se dan una idea de cuánto los extrañamos— La pelirroja nos mira a nosotros y nos hace un gesto para que nos acerquemos.—¿Cómo les fue en el viaje?

Connor le tiende la mano para saludarla y ella lo jala para darle un abrazo.

— Bien señora Wilson— responde haciendo que en el rostro bronceado de la mujer se hagan pequeñas arrugas a los costados de los ojos.

— ¿Cómo que señora?—pregunta riendo mientras se acerca a mi y a Devon.— Camil, ¿Cuántas veces tengo que decirte que me llames por mi nombre?

Devon la saluda con un abrazo y cuando es mi turno de saludarla no se que hacer por lo que le tiendo la mano pero ella me da un abrazo al igual que a los demás, el aroma a flores me llena los pulmones y por una milésima de segundo me pregunto si quizás se ha dado un baño en estas.

— Pero que preciosa— me dice acariciando un mechón de pelo, Camil mira detrás de mi y su sonrisa disminuye un poco— ¿Y ella quién es?

Connor camina hasta Penny para tomarla de la mano y presentarla.

— Ella es Penny Jones, mi novia.

La rubia se para un poco más derecha mientras intenta mantenerle la mirada.

—¿Así que eres su novia?— dice pero el tono amable y alegre desaparece de su voz por lo que Holgël, el padre de Evans, va hasta ella para apartarla de Penny quién está completamente roja.— Tú sabes que no debes estar aquí...

Las manos de Camil comienzan a temblar por lo que Holgël se ve en la obligación de sacarla fuera del comedor para que se tranquilice.

— ¿Estás bien?— le pregunto a Penny y ella asiente.

—Solo fue uno de sus episodios—la tranquiliza Evans.

El chico que había visto en el balcón aparece en escenas, sus ojos van directo a Evans y Victoria para abrazarlos. Las fracciones del chico son tan parecidas a las de Evans que enseguida me doy cuenta de que se trata de su hermano más pequeño, Neils Wilson, si no me equivoco.

Devon da unos pasos adelante para saludarlo y este parece alegre ante aquel gesto, aunque su cuerpo se ve tenso parece que se esfuerza en mostrarse amable.

— ¿Y Honey?— pregunta el Cuervo.

— Debe estar en su cuarto— le responde el chico con un tono de voz alto.— No creo que baje.

Los ojos azules del hermano más pequeño de Evans se posan en mí y yo le sostengo la mirada, estoy casi segura de que por el ancho de sus hombros hace algún deporte que requiere fuerza, también se que por la forma en que me mira está acostumbrado a obtener todo lo que desea. Quiere intimidarme pero lo único que logra es que una sonrisa de labios cerrados aparezca en mi boca, había visto demasiadas cosas como para que me intimide su mirada, aúnque estoy segura de que con cualquier otra persona si funcionaria.

— Soy Chloë,— le digo mientras le tiendo la mano y él da varios pasos al frente para aceptarla— Chloë Johnson.

— Neils Wilson.— responde mi saludo.

Ahora que esta más de cerca dudo el hecho de que tenga dieciocho, ¿Quizás diecinueve? No lo sé, sus facciones se ven duras y fuertes pero no hay ningúna marca en su rostro que me dé indicio de su edad.

Después de las presentaciones Mindy nos guío a la segunda planta de la mansión donde nos asignó un cuarto para mi y para Devon, otro para Penny y Connor y cuando los ojos de la señora se posaron en Viko y Evans solo suspiro y les asignó cuartos separados.

La noche cayó con rapidez y los nervios también, los Wilson resultaron ser mas aterradores de lo que aparentaban. Todos guardaban secretos, eso era obvio pero no sabía que eso implicaba el hecho de amenazar a sus dos hijos de muerte si los encontraban solos, tampoco sabia que Camil, la misma mujer que me había saludado con un abrazo podría lucir jodidamente sexy con un vestido rojo intenso al igual que su pelo.

Intento apartar la mirada de ella pero resulta ser demasiado adictivo verla, Holgël por otro lado viste un traje negro que lo hace lucir como un un vampiro ya que su piel blanca sin rastros de arrugas destaca muchísimo más bajo ese atuendo.

Devon, Connor y Evans habían desaparecido del mapa con la excusa de que irían hasta la mansión donde se celebraría la fiesta para acomodar los últimos detalles.

— Te veré ahí— me había dicho como despedida.

—¿No van a cambiarse?— Dice Camil clavando la mirada en Penny.

Victoria se percata de la incomodidad de la rubia por lo que se interpone entre ellas.

— Si, justo eso estábamos por hacer— le contesta.

Viko hace un movimiento con la cabeza que no indica que la sigamos escaleras arriba.

Una vez estamos en su cuarto Victoria suspira con pesadez, se sienta sobre la cama de sábanas blancas y abre una de las bolsas que hay ahí.

— No le hagas caso— Le dice a rizos— Con el tiempo ha ido empeorando y ahora suele decir que tiene visiones.

Penny asiente con la cabeza mientras apoya la caja que hemos ido a buscar a su cuarto sobre la cama.

— No pasa nada, solo tengo que admitir que me da miedo la rabia que escupen sus ojos cuando me mira.— se sienta sobre la cama mientras pasa sus manos sudadas por se jeans.

— Puede llegar a ser muy aterradora— Victoria niega con la cabeza mientras la mira.

Saco de las bolsas el vestido que Devon me compro ayer cuando veo que Viko y Penny sacan lo que se van a poner.

— Pero no va a hacerte daño.—afirma Victoria— Antes tendrá que pasar por nosotros.

Penny parece aliviada al escuchar las palabras de la pelinegra por lo que sonríe un poco mientras levanta los zapatos que va a ponerse.

— Ahí tienes los centímetros que te faltan—bromeo apuntando sus zapatos color rosa pastel.

— ¡Hey!— se queja mientras me da un empujón.

— Bueno voy a cambiarme al baño, si quieren pueden vestirse aquí o esperar a que salga— dice mientras coloca el vestido negro que va a ponerse en el antebrazo— Solo haganlo rápido así podemos maquillanos y salir.

Y dicho esto desaparece.

Penny dice que no tiene problema en cambiarse frente a mí así que ambas nos cambiamos ahí, el vestido de la rubia de rulos es parecido al de una bailarina de ballet ya que la parte superior es casi tan corta como un tutú y el corset es bastante ajustado. Por otro lado Victoria sale del baño luciendo como si volviera del infierno, el vestido negro se amolda a la perfección en sus pechos y luego tiene caída libre hacia abajo llegando hasta sus rodillas donde puedo ver como las medias de red adornan sus piernas, en los pies lleva unos zapatos altos que hacen que su cuerpo se vea estilizado y en su muñeca tiene un antifaz negro con plumas en las puntas.

Lucen como dos polos opuestos igual de atractivos.

Camino hasta el espejo con luces a los costados y comienzo a maquillarme con las cosas que ha dejado Viko ahí. Las sombras marrones oscuras y el labial rojo mate me hacen lucir como una celebridad ya que combinan a la perfección con el vestido.

Cuando ya estamos listas bajamos las escaleras y nos dirigimos directamente hacía la puerta principal para luego montarnos en un auto negro de alta gama.

Victoria le indica a donde vamos al chófer y luego de 30 minutos llegamos a una casa gigante casi tan elegante como la mansión donde habíamos estado, solo que esta luce mas moderna y está literalmente en el bosque a miles y miles de kilómetros de algún rastro de civilización.

Siento una punzada de nervios cuando veo a Devon parado en la puerta de la casa mirándome directamente con una corona dorada en las manos.