Beautiful Promise. 'HunHan'

Capítulo XV. Getting to know...

— ¿Lo justo? —YiFan suspira—. Estás demente.

ZiTao ríe.

—Es lo justo.

— ¿A qué? ¡Maldita sea! —YiFan exclama, ojos heridos y aspecto cansado.

—Merecen pasar por lo mismo que yo. Ellas deben sentir mi dolor. Es sólo lo justo.

Tal vez son las palabras sin arrepentimiento salidas de los labios de ZiTao, o el dolor bajo la piel, o puede que sea anhelar tanto a alguien que duele y marchita, la verdad es que después de eso los últimos intentos, no, las ultimas ganas de YiFan por conseguir la atención de ZiTao se desmoronan tanto que sin importarle nada comienza a llorar delante de ZiTao.

YiFan suelta lentamente el cuello de ZiTao, lagrimas deslizándose por sus mejillas hasta llegar al suelo. El menor parece frío, distante a las lágrimas emanadas por YiFan.

Es doloroso.

—Bien —murmura YiFan, bajo, en tono muy bajo—. Entiendo, perfecto —un suspiro—. Yo... Nada.

—De acuerdo.

Rumbos diferentes.

Es así como debería ser. O como se fuerzan a que sea.

ZiTao se va por el lado derecho después de salir del callejón. YiFan elige el lado izquierdo.

Dolorosamente el estúpido mundo es redondo y es seguro que vuelvan a encontrarse en algún punto. Pero lo más lamentable de todo, es que seguirán viéndose en la escuela.

Y su historia se relatará lentamente. Porque ese "Nada" de YiFan fue más de lo que realmente aparenta.

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Una tercera rueda. Tal vez eso no debería pasar.

Si LuHan supiera sobre la terrible y descolada afición de SeHun por Red Velvet, afición que inclusive se eleva a la de EXO, tal vez no aceptaría la oferta de YiXing para ir al edificio de SM Entertainment.

Pero no lo sabe.

Y así es como una semana después de su encuentro íntimo con SeHun se ve arrastrado de nuevo hacia el vecindario con el rostro lleno de vergüenza cada vez que SeHun le habla o le mira, porque después de lo que pasó entre ellos dos se siente tontamente cohibido y recuerda cada gemido y jadeo, cada sensación y se pone colorado hasta la medula y es extraño porque durante esa semana en la que SeHun tomó la decisión de quedarse y acompañarlo en la cabaña de sus tíos ha estado resistiéndose a los toques o besos del menor, murmurando torpemente alguna excusa para no besarlo o dejarse tomar de la cintura y eso le ha puesto los nervios de punta al otro porque le gruñe molesto a todo lo que le pase por enfrente.