MARGINAL ALPHA | bakugou katsuki [+18]

01 | capítulo uno

CAPÍTULO UNO,
ACORRALADA A UN VÍNCULO
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Hoy era el día.

El barullo en aquel enorme salón era ensordecedor, y era de esperarse, después de todo éramos aproximadamente alrededor de cien personas dispersas por todo el lugar.

Hoy era el primer día de clases para los nuevos ingresantes de la AINP.

No pude evitar sonreír. Por fin estaba en el lugar que tanto había deseado ingresar. Era un lugar prestigioso; uno de los pocos centros que nos enseñaban sobre los híbridos y al mismo tiempo donde se nos permitía participar en la investigación. Nos decían que este lugar nos hace el futuro mismo, contribuyendo a lo que aún se nos es desconocido.

Me emocionaba la idea de investigar lo desconocido, la naturaleza de las relaciones humanas, y siendo que la inclusión de los híbridos era tan reciente, todo parecía estar en constante transformación en cuanto a su influencia sobre nosotros. Especialmente con el hecho de que cada uno posee una energía relacional: alfa, beta u omega.

Aunque también me interesaba investigarme a mí misma y entender mi propia naturaleza como omega.

—¡Hola, pequeñita! —escucho una voz femenina hablar cerca mía, por lo que de inmediato me llama la atención y giro mi mirada hacia la dueña de aquella voz.

Era una chica de ojos dorados y pupilas de forma elíptica lo que la delataba como híbrida, con cabello rosado y corto, ropas extravagantes y una ensanchada sonrisa plasmada en su rostro. Intuitivamente percibo la energía alfa emanar de ella, lo que me sorprende dado que las mujeres alfa no son tan comunes en híbridos, según lo que había escuchado. Tengo que aguantar mi expresión de asombro ante esto.

Pero lo que más me sorprendía era que me estuviese hablando a mí sin aparente razón entre todas las personas. En realidad no esperaba interactuar socialmente tan pronto, me consideraba una persona que se toma su tiempo para adaptarse al ambiente social y entonces saber si me sentiría cómoda interactuando con tales personas. Podría decirse que era precavida. De todos modos, presentí que ellas eran agradables y me permití la comodidad en la interacción.

Trato de disimular la sorpresa y le doy una sonrisa, notando la presencia de dos chicas más detrás de ella. Una de ellas de cabello marrón hasta por arriba de los hombros, ojos de igual color y mejillas rechonchas. La otra era de mi altura aproximadamente, cabello verde y largo y ojos de color negro. La castaña era de las mías; desprendía energía omega mientras que la otra era beta. Tampoco noto algún rasgo inusual en ninguna, así que deduzco que son humanas al igual que yo.

—Hola... —le devuelvo el saludo con una sonrisa amable mientras concentro mi mirada en la única híbrida, contemplando sus ojos inusuales. Casi no había tenido contacto con híbridos, por eso ella me parecía instantáneamente intrigante.

Y  también era emocionante la idea de poder relacionarme con uno tan solo en el primer día. Grité internamente.

—¿Podemos sentarnos contigo? —asentí con la cabeza inmediatamente, aún manteniendo la sonrisa.

—Claro...

—¡Qué bien, más amigas! —la chica castaña sonrió con entusiasmo mientras sus mejillas se sonrosaban ligeramente.