Capítulo 82: Ser joven, ser libre, y no perderse en la oscuridad.

20 3 3
                                    


Antes de empezar el cap, y porque hoy es un día tremendamente especial, y no sólo por ser el día del libro, permíteme darte las gracias por haber llegado hasta aquí. Ya seas de las que votaron en aquella encuesta que hice hablando de hacer un spin off sobre Sabrae, o entraras el año pasado, o acabes de llegar y aún no sepa de tu existencia (por favor, sal de las sombras si así es); me leas en mi blog o en Wattpad, quiero que sepas que te estoy profundamente agradecida porque tú me has ayudado a que, cinco años después de ese mágico 23 de abril de 2017, el día que nacía Scott y a las 17:10 salía el primer capítulo de esta novela, todavía estemos las dos aquí. Escribir me apasiona, y esta novela es una parte tan esencial mía como lo son mis pulmones, mi cerebro o mi corazón. No concibo mi vida sin ella, y confieso que también me da un poco de vértigo el qué pasará una vez que escriba ese último punto de esa última frase en ese último párrafo de ese último cap (para el que, por suerte o por desgracia, todavía queda bastante). Pero que me dé vértigo no significa que no haya veces en que seguir aquí sea muy, muy difícil: tengo que renunciar a planes, organizarme más que la gente de mi edad, compatibilizar estudios y trabajo, y hay momentos en los que simplemente pienso que no me apetece escribir, pero tengo que hacerlo porque tengo un compromiso con la historia, sí, pero también contigo. Si no fuera por ti, es muy posible que no estuviéramos donde estamos. Que no le pusiera tanta pasión, que no hubiera tantos detalles o que yo no hubiera crecido tanto como escritora.

Así que muchas, muchas, muchísimas gracias por haberme permitido celebrar el quinto aniversario de esta novela que, supuestamente, iba a tener 20 capítulos. Soy consciente de que sin mi trabajo esto no sería posible, pero de poco sirve batir las alas si no hay aire que volar. Y tú eres ese aire.

Feliz cumpleaños de Scott, feliz quinto aniversario de Sabrae... y feliz día del libro para ti y para mí. Gracias por haberme dado la oportunidad de celebrarlo conmigo. Puede que mis historias no tengan páginas (o no todas), pero sí corazón. Y un ventrículo, por fuerza, eres tú.

-I'm gonna...-continuó ella sola, y entonces, se sumó su padre-, get ya, get ya, get ya, get ya-cantaron los dos, avanzando hacia la base del escenario mientras daban saltitos al ritmo de la canción-. One way or another I'm gonna win ya-se miraron y se sonrieron, poniendo cara de angelitos y guiñándose el ojo-, I'm gonna get ya, get ya, get ya, get ya.

Se abrieron rápidamente, y Zayn y Scott dieron un paso al frente, ocupando el centro de la pantalla mientras los demás, motitas de polvo incandescente en un mundo hecho de sombras, continuaban la ruta hacia la base de la pasarela del escenario, en lo que parecía un cuadrilátero ahora que comenzaban a subir unas barandillas rojas a juego con la decoración del estadio, el logo de la banda... y la ropa que llevaban los Malik.

Conocía lo suficiente a Sabrae como para saber que no era casualidad que llevara una blusa y una bandana del tono exacto de rojo que las barandillas que acababan de surgir de los bordes de esa protuberancia.

­-One way or another I'm gonna see ya, I'm gonna meet ya, meet ya, meet ya-cantaron padre e hijo, agitando las manos frente a sus rostros, con el dedo pulgar e índice extendidos. Luego, Zayn miró a Scott-. One day, maybe next week, I'm gonna meet ya.

-I'm gonna meet ya-dijo Zayn solo, y le guiñó el ojo a S.

-I'll meet ya-prácticamente jadeó Scott, devolviéndole la mirada a su padre y relamiéndose los labios. Su piercing bailó un poco.

¿Me puse un poco cachondo?

... puede.

No se lo dirás a Sabrae, ¿verdad?

G u g u l e t h u (Sabrae III)Where stories live. Discover now