❝A veces solo tienes que tener un poco de fe...
...literalmente❞
Faith Diggory, la hermana pequeña del popular Cedric Diggory, no es muy diferente a su hermano. Ambos aman el Quidditch, probablemente todos en la escuela alguna...
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Faith, Ron y Neville corrían por los pasillos. Ron tenía el Mapa de los Merodeadores en sus manos y lo miraba cada par de segundos para ver si alguien se acercaba a ellos o si Malfoy había salido de la Sala de los Menesteres. El corazón de Faith latía en su garganta. Quería saber si Harry estaba bien. Faith esperaba que si Harry resultaba herido, la maldición le dejaría sentirlo para saber si necesitaba ayuda y si estaba bien.
—Aquí está— jadeó Ron cuando se detuvieron frente a la pintura con los trolls bailando ballet que colgaba en la pared opuesta a la que les mostraría la puerta de la Sala de los Menesteres.
—¿Crees que todavía está allí?—preguntó Neville mientras se movía para pararse al lado de Ron, mirando sobre su hombro para encontrar a Malfoy en el Mapa.
—No puedo verlo en ningún otro lado, tiene que estar ahí— dijo Ron. —No podemos entrar allí, ¿verdad?
—No, Harry y yo lo hemos intentado varias veces, no sabemos qué forma toma la habitación para Malfoy— dijo Faith mientras sus ojos estaban nerviosos fijos en la pared en blanco. ¿Qué podría estar haciendo Malfoy allí?
—Entonces tendremos que esperar—suspiró Ron. —¿Qué haremos cuando salga?
Tanto Ron como Neville miraron a Faith asumiendo que ella lo sabría.
—¿Maldecirlo?— preguntó Faith encogiéndose de hombros. —¿Secuestrarlo?
—Improvisar, entonces,— Ron se rió entre dientes con ansiedad.
Ninguno de ellos tenía idea de lo que les esperaba al otro lado de la pared. No tenían la menor idea de cómo iba a resultar esta noche. Faith no estaba realmente preocupada por sí misma ya que pensó que estarían a salvo en el castillo, estaba mucho más preocupada por que Harry se enfrentara a una parte del alma de Voldemort. Si Dumbledore realmente hubiera encontrado un Horrocrux, Voldemort no dejaría que lo tomaran. Faith pensó que probablemente estaba protegido por hechizos y maldiciones para debilitar al intruso, dondequiera que estuviera. Faith se dio cuenta de que se sentía mucho menos segura aquí que cuando estaban en el Departamento de Misterios y sabía que eso era porque Harry estaba con ella en ese entonces.
Los tres Gryffindors esperaron durante una hora. Vigilaron a ambos lados del corredor para ver si algún otro miembro del ejército de Dumbledore vendría a ayudarlos, pero el corredor permaneció desierto. Solo Neville respondió a la llamada de la moneda, y Luna vino con Ginny. Probablemente fueron los que más se perdieron las reuniones del ED. Neville era realmente bueno, uno de los mejores, ya Luna le gustaba pasar el rato con ellos allí, decía que era como tener amigos. Faith esperaba que Luna supiera que la veía como su amiga.
Un fuerte ruido de deslizamiento despertó de repente a Faith de sus pensamientos. Una gran puerta negra de latón comenzó a aparecer en la pared vacía.
—¡Él está viniendo!— Faith advirtió a Ron y Neville que estaban a ambos lados del pasillo. Rápidamente se escondieron detrás de armaduras y Faith se camufló en las paredes de piedra para que Malfoy no la viera.
