Ryuguji Tenshi (Sano Manjiro/Mikey) Tokyo Revengers

08. "Toman dividido".

Todas las miradas estaban puestas en Atsumu y en Tenshi que deslumbraban como ninguna otra pareja. No había persona que no se acercara a ellos a hablarles de estupideces, sin embargo, Tenshi hacía caso omiso y solo le prestaba más atención a la comida que había allí. A pesar de tener hambre, y a pesar de que todos en el lugar estaban comiendo, Atsumu le pidió que no comiera nada hasta que no haya nadie en el salón que no la haya visto de manera perfecta. Aquello le dio repugnancia, pero entonces entendió que ambos estaban juntos para obtener algo a cambio por lo que no iba a llorar cuán una niña pequeña y empezar a victimizarse. Por eso solo fingía una sonrisa y permanecía al lado de su novio, quien la tenía tomada, fuerte, de la cintura.

Quien parecía ser el entrenador, se acercó a ellos.

—Atsumu Jones, eres un chico prodigio —comenzó a decir el entrenador—, y la verdad es que, para mi, es un privilegio tenerte en mi equipo.

Atsumu sonrió triunfante.

—¡Oh, bueno, señor Tomioka...

El pelinegro estaba a punto de dar otro falso discurso, pero el móvil de Tenshi comenzó a sonar. Quiso tomarlo, pero Atsumu le apretó fuerte la cintura, sin sacar su cínica sonrisa, por lo que decidió dejar que suene. Sin embargo, y al instante en el que se calmó, el teléfono nuevamente comenzó a sonar.

—Debería atender, jovencita —le recomendó el entrenador.

—No es nada, señor Tomioka, no se preocupe —respondió Atsumu a lo que Tenshi asintió, inquieta.

Sin embargo, cuando el teléfono sonó por tercera vez, lo sacó de su bolso soportando el dolor que Atsumu le estaba generando en su cintura.

—Discúlpenme un momento, por favor.

Como pudo se soltó del fuerte agarre de Atsumu y salió del gimnasio para atender.

—¿Qué pasó, Mikey?

—Ten —Éste parecía agitado—. ¿Dónde estás?

—Estoy acompañando a Atsumu en algo de su club, ¿por qué? ¿Qué pasó?

—La Toman se dividió, Tenshi.

Todo lo que creía que iba en orden, de pronto, se desmoronó. Los segundos se frenaron de repente y le estaba costando respirar.

—¿Qué? ¿Qué mierda estás diciendo, Mikey?

—Arrestaron a Pah entonces yo me peleé con Draken y ahora la Toman se terminó para todos.

Tenshi no entendía nada, ¿cómo que habían arrestado a Pah?

—Manjiro, ¿dónde estás? Dime dónde estás así voy y hablamos tranquilos, quizá podamos llegar a un acuerdo.

—Olvídate de mi, Ten, esto se terminó, la Toman ya no existe —No, no podía estar diciendo eso—. Te amo, Tenshi.

Entonces colgó.

—¡MANJIRO!

La llamada había terminado a lo que volvió a marcarle, pero le daba error, Mikey la había bloqueado. Maldijo por los aires. Se negaba completamente a que todo eso esté pasando, es que, ni siquiera entendía la situación y el que Mikey se aísle cuán un prófugo la ponía peor de lo que ya estaba. Comenzó a marcarle a Draken, pero tampoco hubo respuesta de su parte. Estaba inquieta y desesperada, necesitaba hablar con alguno de los dos y hacerlos entrar en razón. Ellos se complementaban, eran su otra mitad, no podían dejar irse solo por una absurda pelea.