Señor Swift

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Primero, me gustaría agradecerle Sander235 por permitirme usar su dibujo como portada de este capítulo, el diseño de la nueva versión de Kazemaru le quedó simplemente genial <3

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- ¿Nathan Swift? Vaya nombre más americano - Se burló un poco el rubio - Pareces una naranja andante ¿No has pensado en teñirte el cabello?

- Miyasaka, en lugar de criticar la vestimenta de otros, preocúpate por llevar esos documentos cuanto antes a mi oficina, los necesito CON URGENCIA - Dijo el goleador con bastante seriedad, haciendo que el mencionado resoplara y se les adelantara - ... - No fue hasta que estuvo nuevamente a solas con Kazemaru que soltó una pequeña risa - ¿Nathan Swift? ¿De dónde sacaste ese nombre?

- Deja de reírte - Respondió ligeramente avergonzado - Fue totalmente improvisado, y esto se debe al gran fallo en tu plan... Si querías que me hiciera pasar por otra persona, debiste pensar en un nombre falso como el que usas tú.

- ¡Hey! Se supone que estamos juntos en esto - Se quejó - En todo caso, es culpa de ambos... Pero ya, basta de esto, mejor comencemos de una vez con la misión, quiero que esto se acabe lo antes posible.

Escuchar eso le generó un muy mal sabor de boca a Kazemaru, pues desde que se reencontró con su amigo, no se había parado a pensar demasiado en lo que significó para Goenji, el estar lejos de su familia por más de una década.

Ichirouta apenas podía imaginarse lo terriblemente angustiante que esto tenía que ser para el rubio, por lo que no dudó en acatar la sugerencia que le dieron, después de todo, él también quería regresar cuanto antes con su familia.

Nada más ingresó a la oficina de su amigo, se sorprendió de ver lo extravagante que era, en definitiva no se parecía en lo absoluto al estudio que Goenji solía tener en su casa cuando aún convivía con Fubuki.

Sin embargo, no tuvo tiempo de analizar mucho las cosas, pues a los pocos minutos de haber llegado, Senguuji entró de improviso, bastante molesto al parecer.

La revolución iniciada en la secundaria Raimon ya era un asunto de gran relevancia para los altos mandos de la asociación juvenil de fútbol, ya que afectaba directamente sus intereses económicos y sociales, por lo que estos no dudaron en comunicárselo a Senguuji, quien a su vez decidió tomar cartas en el asunto para restablecer el orden impuesto muchos años atrás.

La irritación del hombre de traje blanco era tanta, que ignoró olímpicamente la presencia de Kazemaru en aquella oficina, concentrándose en gritar los mil insultos hacia la secundaria rebelde que se atrevía a oponerse a ellos.

Goenji, por arte magia volvió a entrar en el papel de Ishido Shuuji, cambiando su personalidad drásticamente frente a su jefe, soltando varias ideas con las que se supone tenían que erradicar la "tonta idea" de que el soccer era un deporte libre.

Fue cuando el líder del sector, mencionó lo que antes el rubio dijo en la carta; "Es hora de llevarnos a esos niños al santuario, no podemos dejar que sigan interfiriendo en nuestros planes"

Por dentro, Kazemaru explotaba, era casi como si un huracán de furia estuviera en su interior, haciendo estragos por salir y desatar su ira contra quien tuviera en frente. Ganas no le faltaban de golpear a Daigo por querer atentar contra su familia y seres amados.

Claro que a estas alturas de la conversación, Goenji notó los instintos asesinos por parte de su colega, aunque también se percató de que este lo disimulaba muy bien, reafirmándole que su decisión de llamarlo fue la correcta.

Una vez que Senguuji terminó con su terrible monólogo sobre cómo debería ser el fútbol, se enfocó por fin en el hombre de la camisa blanca - Disculpa... ¿Quién eres tú? ¿Por qué estás escuchando nuestra conversación?

¿Fácil? ¡No! (Completa)Where stories live. Discover now