"¿Por qué no puedes elegir tratar con asesinos y violadores en su lugar?" gritaste al descubrir que Jin supuestamente estaba involucrado en el asesinato del padre de tu compañero de clase. No muchos de tus amigos sabían que estabas saliendo con alguien, lo que es más Jin de todas las personas, pero los chismes se extendieron como la pólvora en el campus y de repente todos los ojos estaban puestos en ti. Ninguno dijo una palabra porque todos conocían la reputación de Jin, pero sabías lo que estaban pensando detrás de sus miradas temerosas y críticas hacia él.
"¡Es mi trabajo! No solo elijo personas al azar, no soy un dios", gritó Jin. No sabía todas las razones por las que estabas tan molesto con solo otro hombre en su lista y eso lo volvía loco. Respiraba con dificultad mientras te miraba.
"Bueno, seguro que actúas como tal", espetaste justo antes de que se te rompiera la voz. Se sentía como si alguien tuviera su puño alrededor de tu garganta porque no podías decir una palabra más.
Jin entrecerró los ojos hacia ti, con una ira tan grave dentro de él que no gritaría sino que mantendría la voz firme. "¿Qué te hace pensar que el tipo no era un asesino o un violador?"
Su tono profundo y amenazante hizo que se te pusiera la piel de gallina y te sentiste mucho peor que si te hubiera gritado. Las palabras de Jin te golpean como una bofetada con un ladrillo. ¿Por qué pensaste eso? Incluso si fuera el padre de tu compañero de clase, ¿por qué eso lo haría una buena persona?
"Pero-"
"No. Otro. Palabra. Princesa", rechinó entre dientes y por el más mínimo momento, tuviste miedo de él. Te congelaste en el lugar y tus ojos se abrieron, mirándolo expectante.
Cuando Jin notó tu reacción de él, toda su ira se calmó de inmediato. Era como si la discusión nunca hubiera sucedido. En un movimiento rápido, sus brazos te rodearon y te abrazó tan fuerte que tus pies ya no tocaban el suelo.
Sobresaltado al principio, no respondiste, pero pronto te relajaste y te permitiste dejar escapar un suspiro que no sabías que habías estado reteniendo.
"No me tengas miedo, princesa", susurró en tu cuello. Pensaste mientras tomabas su calor de él y el olor de su fragancia de él.
"Lamento que hayamos discutido", murmuraste, sin preocuparte un poco por las miradas estúpidas que recibiste en el campus ante la idea de perder a Jin.
"Yo también lo siento, cariño".
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𝐘𝐨𝐨𝐧𝐆𝐢
"¡Sigues alejándome!"
"¿Te estoy alejando?" preguntó Yoongi en voz alta mientras apuntaba su índice a su pecho. Estaba al borde de la frustración. Su cabello estaba desordenado por pasar su mano por él tantas veces y sus labios estaban entreabiertos por la molestia.
