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Severus Snape

Cuando Lili tuvo a Harry, _______ fue la mujer más feliz, su querido sobrino había nacido.
Ella ese día al cargar y ver esos maravillosos ojos verdes, decidío protegerlo sin importar el costo.

Los rumores sobre el ataque hacia los Potter eran cada vez más. La castaña había decidido unirse a los mortifagos para proteger a su familia ¿Su mentira? Decir que tenía celos de su hermana mayor y que la odiaba por haberle robado al hombre que amaba.
Esto le fue de gratificante escuchar a Voldemort, ya que tenía mayor oportunidad para matar a esa familia y principalmente al niño.

Severus sabía que aquella chica mentía pero no diría nada ya que el también protegía a Lili.


La tragedia había sucedido y la castaña no pudo hacer nada, aún con los años se lamentaba tal hecho de haber sido inservible pero aún con ello protegería a su sobrino en las sombras.
Dumbledor había podido sacar a Severus y ____ de una sentencia de muerte. Estos le regresarían el favor infiltrados juntos con los moetifagos hasta que estos volvieran a dar señales.

La joven había desarrollado sentimientos por aquel hombre frío de carácter, serio pero que al fondo tenía un gran corazón.
Severus pensó que solo tendría ojos para Lili pero aquella chica extrovertida, algo torpe y por supuesto hermosa le robaba suspiros sin darse cuenta y el temía porque aquel sentimiento llamado amor surgiera de nuevo en su corazón roto.

Ambos habían abierto aquella puerta, dando pequeños pasos para poder ser felices. Cuando confesaron su amor juraron que cuando su trabajo terminará se irían lejos a la vieja casa de los Prince para ser felices y tener una familia.






Narcissa había ido junto a su hermana Bella a buscar a Snape por su ayuda.
Colagusano las dejó pasar y estos se fueron a la sala de estar a hablar.
La castaña ese día se había levantado tarde ya que el sueño era cada vez más persistente en el día.
Se levantó fue al baño y se miró en aquel espejo de cuerpo completo, miró de cerca aquel pequeño bulto que sobresalía de su blusa, la levantó y miró como su pequeño vientre 4 meses era más visible cada vez.
Embelesada, salió de ahí con una gran alegría y al oír voces en el despecho de su esposo decidió investigar.

—Severus ¿Por qué no me.... —No pudo terminar la frase al ver como su hombre hacía un juramento inquebrantable.

Narcissa al ver la cara de molestia y preocupación decidió irse de ahí, sabía que se aproximaba una pelea y decido mejor estar lejos.
Cuando la habitación quedó vacía el silencio reinaba ese pequeño espacio.

—¿Que le prometiste? —El hombre con aquel rostro estoico le miro—Proteger a Draco—La joven sabía que había algo más, en aquellas dos décadas había conocido hasta muy en el fondo a Severus Snape y sabía cuando le ocultaba algo.

¿Qué más? —El volvía a mirarla serío—No puedo hablar más del tema, esto no te concierne—.

Ante tal negativa la castaña se enojo más—Severus Prince Snape si esto te pone en riesgo a ti o mí y nuestro hijo, me iré lejos de aquí con él ¿Entendiste?—.

Conocía muy bien el carácter de su esposa y sólo trago en seco, pues sabía que ella no mentía y haría tal cosa.

Aquella conversación quedo en el olvido, pues el morocha había hecho ciertas acciones para que su mujer cambiase su humor.

Las vacaciones habían finalizado y el nuevo año en Hogwarts daba inicio, la pancinta de cuatro meses había pasado a ser una de seis y esta se notaba con mayor claridad.
La bienvenida se daba como siempre y la selección de nuevos alumnos daba inicio con tranquilidad.
Dumbledore decido dar la noticia de que el Profesor Slughorn daría las clases de pociones, dándole el lugar al fin a Severus de ser el profesor de defensa contra las artes obscuras.

—Nuestra querida profesora _____ debido a su condición dará las clases de Runas—Muchos fruncian el ceño al no entender, la castaña se levantó y varios soltaron un suspiro de sorpresa  al ver a su maestra más carismática embarazada.
Muchos se preguntaban quien era el padre, pero las dudas se aclararon al ver cómo está tomaba la mano del hombre de las sombras y el aceptaba tal apretón con una sonrisa poco visible, más que nada una curva de labios.




Las clases habían trascurrido con normalidad, la castaña siempre tenía atenciones especiales por parte de sus alumnos y uno que otro profesor.
En aquellos meses todo había transcurrido con normalidad.

La pareja se encontraba acostada junto a la chimenea—Sabes si es niña quiero que se llame Eileen—Los ojos de Snape brillaron, aquel era el nombre su difunta madre y la persona que más amó—Si es niño quiero llamarlo Elliot—Snape beso la frente de su mujer con mucho amor y ambos fueron a dormir a la cama.

La castaña a mitad de la noche se levantó, camino hacia el baño pero a mitad de este, un líquido empezó a salir de su entrepierna, con miedo miró al suelo y sabía lo que significaba.

¡Severus despierta! ¡Nuestro bebé está a punto de nacer! —Ante tales gritos el morocho se levantó de golpe y al ver cómo su mujer lo miraba con alegría e miedo supo que era el momento.

Madame Pomfrey tuvo que ser despierta a mitad de la madrugada esa noche y uno que otro profesor al escuchar el ajetreo.
Las horas habían pasado y el amanecer se coloba por los ventanales, el morocho se mantenía al pendiente caminando de un lado a otro.

Pomfrey salió con una sonrisa dejandolo pasar, entró rápidamente pero sus pasos desaceleraron al ver a su bella mujer con un pequeño bulto en brazos.

Es una niña Severus, es nuestra Eileen—El hombre sin poder preverlo empezó a derramar lágrimas y abrazo con muchos fuerza a su mujer e hija. Al fin tenía una familia.


⚡✨H A R R Y    P O T T E R       O N E S H O T✨⚡Where stories live. Discover now