𝖥𝗅𝖾𝗎𝗋 | Haikyuu!!

capítulo veintiséis.

Hanako.

Sostengo mí mochila con fuerza y bajo del autobús dando un gran salto, ¡finalmente llegue a Tokio!

— Hana–Chan —Mis cabellos se erizan de solo escuchar su voz, me giro lentamente y la veo usando unos pantalones de mezclilla con un suéter negro.

Detrás de ella estaba Suzumeda que vestía una blusa blanca acompañada de unos jeans.

— H-Hola senpai —Aunque no lo crean, esa mujer me da miedo, su tranquilidad me asusta.— Suzumeda–Chan.

— Hola Hanako–San.

— Me alegra que no hayas escapado de la apuesta —Menciona.

— Como podría contigo diciéndome cobarde —Hago un puchero— ¿vinieron solas?

— Obvió, sí ellos se llegan enterar de que éstas aquí, Bokuto y Kuroo de seguro hubiera venido corriendo.

Suelto una risilla, ambas caminamos hacía un taxi que nos llevó hasta la casa de senpai.

Había perdido una apuesta con Shirofuku–San en el campamentos de entrenamiento, ella y yo competimos en ver quién comía más rápido y pues... me gano, ahora es mí sensei.
En fin, ella me dio a saber que cuando tuviera la idea perfecta de como hacerme pagar la apuesta me lo haria saber, y pues sí. Me hizo ir desde Miyaji hasta Tokio para apoyar a Nekoma y Fukurōdani, y no pude negarme cuando me dijo cobarde porqué oigame no, Hanako Echizen no es ninguna cobarde.

— Perdón por la intromisión —Hago una pequeña reverencia hacía la madre de Shirofuku–San que sonríe, es la misma maldita sonrisa que la de su hija.

— Bienvenida Hanako–Chan ¿cierto?

— Síp, un gusto —Saludó con una gran sonrisa que la mujer mayor me devuelve.

— Estaremos en mí habitación mamá —Las tres subimos las escaleras y entramos a la habitación de la mayor, su habitación era turquesa y tenía ese toque de Shirofuku–San.

— Por cierto, felicidades por pasar a las nacionales —Me dice con una gran sonrisa Suzumeda–Chan

— ¡Oh gracias! —Rió— la verdad fue un gran paso para nosotros, los chicos se quedaron entrenando y Kageyama fue invitado al campamento juvenil nacional.

— Oh ¿de verdad? creó que Sakusa–San también está allá.

Sakusa... uhm... me suena

— ¿Quién es él? —Dejo caer mí mochila al suelo y me siento en la cama, dando unos pequeños saltitos.

— Es el peor enemigo de Bokuto —Ambas chicas ríen— es del instituto Itachiyama, Bokuto lo concidera su peor rival cuando Sakusa–Kun ni siquiera lo pela.

Suelto una risilla, me gustaría saber la actitud de Bokuto–San con ese tal Sakusa.

— Estoy ansiosa por mañana —Susurró— Bokuto–San y Kuro–San...

— Lo sé.

Nos quedamos en silencio antes de chasquear la lengua — Tengo hambre —Hago un puchero hacía Shirofuku–San que rie y acaricia mis rubios cabellos.

— Dime cuándo no.