capítulo- 20

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Estaba boca arriba recostada en el pasto de un parque sobre las piernas de Hye-yo y yo miraba el cielo.

Llevábamos así más de 1 hora nadie decía nada, pero era tan cómodo este silencio que me sentía cómoda como nunca antes me había sentido.

- Hye-yo-
Ella voltio a mi llamado.

- ¿no tienes alguien que te guste? -

Se puso colorada, tan roja como el tomate causo mucha gracia verla así.

- no... nada de eso yo...-

Estaba nerviosa y hablaba en pausas eso me daba aún más risa.

- bueno yo te diré quien me gusta -

Me pare de sus piernas y me puse cara a cara.

Ella asintió un poquito más calmada.

- pero tienes que adivinar mientras te doy pistas -

- es alto, guapo y muy listo -

Ella se quedó pensando, pero no pudo adivinar.

- última pista es un poco mayor -

Era una mentirosa, él señor Taeyong no era un poco si no un mucho mayor, pero no podía decirlo tan fácil me aterraba pensar que me odiara si supiera la verdad.

- ay ya Cata, no me gusta estos juegos porque no puedo -

Se veía molesta, pero más que eso era tristeza talvez no le gusta sentirse tonta.

- bueno te toca y yo adivino -

- bueno para empezar es una chica y se llama Carmen -

Yo me exalte.

- eso no son pistas -

Ella se río y alzo los hombros restandole importancia.

- entonces  ¿te gustan las chicas? -

- las chicas no, a mí me gusta Carmen -

Yo me reí, pensé que ella conservadora algo típico de aquí.

- pero ¿quién es Carmen? -

- puede que la conozcas es una chica hermosa en todo sentido, su físico es poco comparado con su hermosa energía es como si su aura opacara a todas, simplemente la mujer de mis sueños-

- que cursi te escuchaste -
Las dos soltamos una carcajada.

Y ella soltó un leve suspiro, me comía la curiosidad de saber quien era esa chica, pero no quería verme impertinente al preguntarle tantas cosas así que lo dejé pasar.

Nunca creí que esa chica era yo.







Mi cabeza daba vueltas y mis ojos no podía abrirlos, todo me dolía es como su un camión me pasara encima, pero necesitaba despertarme.

Cuando abrí los ojos lo primero que noté era el horrible y repugnante dolor en mi cabeza, toque con mis manos y sentí unas vendas.

Sentí que mi vista estaba nublosa es como si estuvieran mis ojos empañados era una sensación muy rara y horrible.

Estaba tratando de ponerme estable, necesitaba saber que paso, cuando por fin mis ojos se aclararon estaba en una habitación de obra gris y mire en lo que estaba acostada y era una cama individual.

Toso el cuarto se veía sucio como si nadie limpiara ese polvo mugriento por años y la cama rechinaba demasiado.

Tome un suspiro y aguante el dolor y me pare se la cama, cuando me pare sentí que mi cabeza pulsaba.

~𝑱𝒖𝒏𝒈~Where stories live. Discover now