Capítulo 56 - Ze Yuan, el hijo de los demonios

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"Zhu-ge, ¿qué pasa? ¿Lo conoces?" Xia Yi vio la cara de Gu Wen Zhu y preguntó confundido.

Al ver a Gu Wen Zhu aturdido, sin escuchar sus palabras, Xia Yi se sintió celoso. Le pellizcó fuertemente en el brazo, con los ojos mirando ferozmente, "¿Qué estás mirando? ¿No puedes apartar tus ojos de un hombre hermoso?"

Gu Wen Zhu sintió el dolor en su brazo y se recuperó de su estado anterior. Se volvió para mirar a Xia Yi, preguntando en un tono extraño: "Xiao Yi, siento que lo conozco."

"¿Conocer a quién?" Atónito, Xia Yi se dio cuenta de que estaba hablando de ese hombre de rojo, "¿Conoces a ese tipo llamado Jie Shang al que llamaban el líder demoníaco?"

"¿Es el líder demoníaco Jie Shang?" Gu Wen Zhu no contestó sino que preguntó a su vez, su voz sonaba fuertemente confundida.

"Una vez lo vi. Algunas escenas pasan por mi mente. Escenas de él hablándome suavemente, y riendo. Me siento... me siento cerca de él..." Gu Wen Zhu miraba fijamente el aire delante de él, murmurando.

¿Ahora jodidamente te estás imaginando eso? ¿Ahora tienes un flashback? ¿También habrá dramas?

Xia Yi se enfadó. Pellizcó y retorció una zona suave de la piel del brazo de Gu Wen Zhu con fiereza. Dijo detrás de sus dientes rechinados: "Suavemente... me río de ti... muy cerca..."

Gu Wen Zhu cogió la mano que le atacaba y la sujetó con fuerza, "Xiao Yi, ¿has tenido alguna vez flashbacks en tu mente? Y en estos flashbacks, eras como otra persona, como si no fueras tú mismo."

Xia Yi se congeló. Las palabras de Gu Wen Zhu le recordaron su experiencia. Ese charco de agua. Y a veces esa voz llamándole 'Lan'. De alguna manera, Xia Yi se sintió culpable al instante, debilitando su ira. Pero aun así dijo ferozmente: "Puedes mirar, pero no pienses en ello. Incluso si eso es asunto de otras personas."

Gu Wen Zhu asintió inmediatamente para mostrar que había entendido. Xia Yi, por lo tanto, lo soltó y cerró la boca, para mirar hacia la dirección de la puerta.

Después de su sonrisa, Jie Shang bajó lentamente de aquella águila descendida de tres cabezas.

Aunque era delgado, era muy alto y apuesto. Siguió los escalones de piedra hacia adelante, caminando elegantemente con facilidad como si estuviera en su propio patio.

La zona encantada de CangYi estaba justo delante de él, erigiéndose como una pared de cristal. Parecía transparente, con destellos de luz. Estaba a sólo unos pasos de la zona encantada.

Todos detuvieron su respiración por él aunque Jie Shang no detuvo sus pasos. Un gran agujero fue creado mientras él pasaba. Era como si hubiera sido cortado por cuchillas afiladas.

Después de que Jie Shang había entrado en la zona, ese agujero se cerró de nuevo, tan bien como antes.

En vista del hecho de que el área encantada del honorable líder inmortal Ciang Yi no funcionaba en absoluto para Jie Shang, todo el mundo respiró frío. El miedo se extendió entre ellos.

"Esta es la zona de Qi Shan. Los del mundo demoníaco no son bienvenidos. Por favor, abandona este lugar". Liu Si Qian gritó para detener a Jie Shang al verlo entrar por la puerta como si no hubiera nadie a su alrededor.

Jie Shang se rió. Se detuvo para mirar a Liu Si Qian: "¿Quién eres tú? ¿No hay nadie más aquí en Qi Shan? Dile a CangYi que salga a charlar conmigo."

No hablaba en voz alta y su voz era clara y suave, sin embargo, su voz sonaba como si estuviera hablando al lado del oído. Todo el mundo podía oírle claramente.

Llevar una azada para cultivar la inmortalidad [Transmigración a un libro]Where stories live. Discover now