Get my number * Showki

Treinta y dos

Que las semanas pasen tan rápido no se si me gusta y hace estar tranquilo o todo lo contrario. Ya he entrado en el séptimo mes y aunque no he vuelto a sentir dolor y estoy descansando mucho más ahora, desde aquel día, no puedo evitar preocuparme ni dejar de pensar en que podria volver a ocurrir.

Intento siempre no pensar en ello por diferentes razones, como evitar volverme loco con esa idea de imaginar a mis bebes muriendo en mi interior, aquí donde crecen sanos pero con el riesgo de perder sus vidas antes de siquiera ser reales fuera de su actual refugio.

Haber sufrido un aborto natural meses atrás ha dejado marca en mi, tan fuerte esta que por ello siento tanto miedo porque se vuelva a repetir y pudo ocurrir dos semanas atrás cuando fui llevado al hospital, siendo por ello que vivo con mi primo y Jooheon desde entonces, siendo lo mejor no para mi sino para mis pequeños bebes que deben nacer dentro de dos meses, sin importar lo que me ocurra en el proceso.

Sentado en esta cama, cubriéndome bien con la ropa de la misma, escribo en este pequeño cuaderno mis pensamientos y sentimientos al respecto, mis deseos porque mis bebes nazcan sanos, que Hyunwoo pueda conocerlos y cuidarlos, llenarlos de todo el amor que su corazón guarda para ese día en el que vengan al mundo.

Mis pequeños se que vendréis al mundo porque estoy haciendo hasta lo imposible porque así sea. Estoy comiendo bien, comida sana aunque muchas veces tenga antojos que no puedo controlar. No dejo que vuestro padre me de todo lo que se me antoja por vuestro bien. Os quiero mucho más de lo que podéis imaginar siquiera y nunca dejará de ser así. Hace dos semanas casi os pierdo y se aunque no lo diga que yo también podria haber fallecido ese día. No es vuestra culpa sino mía, por tomar decisiones erróneas en el pasado. Sois mi vida entera y estoy más que dispuesto a dar hasta el último latido de mi corazón porque vosotros dos viváis, salgáis a la vida respirando y sanos, que podáis estar con vuestro padre que os amará siempre. Es un buen hombre. Siempre ha luchado para cuidar a quienes ama y se que aunque su hermana pequeña ya no esté en su vida nunca la olvida. Tampoco me olvidará a mi si algo malo me pasa, pero vosotros le daréis todo el amor y no pensará demasiado en mi si me pierde el día que vengáis al mundo.

Como vuestro padre os amo infinitamente desde el momento en que supe que crecíais en mi interior, siendo una parte de mi demasiado valiosa.

Cada día que ha pasado desde entonces solo he pensado en vosotros pero también en Hyunwoo. Será un gran padre y no me cabe duda que dará todo de si mismo por daros la mejor educación, los mejores valores.

Por favor quiero que le cuidéis.

Escuchar que podria quedarme en la mesa de ese quirófano el día que nazcáis me aterra, me llena tanto de miedo que temo ese día, pero lo deseo al mismo tiempo por que naceréis y os podré amar si tengo la oportunidad de hacerlo, y..

Dejando el cuaderno rápidamente en la mesita de noche, en este cajón que ahora cierro, veo la puerta abrirse, entrando por esta Jooheon que carga con una bandeja con mi desayuno que como siempre tomo en la cama desde hace dos semanas, ya estando acostumbrado aunque me gustaría levantarme y estar en el comedor como ellos.

— ¿Por qué no me ayudáis a ir al comedor?

— Kihyun sabes que estás ya de siete meses pero eso no hace que sea de menos riesgo tu embarazo —miro el desayuno sin apetito —te ayudaría porque tampoco es bueno que estés encerrado aquí, pero se lo que es que tu hijo nazca prematuro y con los riesgos que eso supone y no quiero que sufras lo que Min y yo sufrimos cuando nuestro hijo pasó por ello.

— Me quedaré aquí no te preocupes —lo acepto —pero llévate el desayuno, no tengo hambre. Dáselo a Minhyuk que también tiene un bebe al que cuidar.