La tercera vez es la vencida

8.-Una cruzada y su festival

Nota de autor 1: Recomiendo buscar 'The Benny Hill Show Song' y escucharla durante su búsqueda.

-OxOxO-

Si. Una belleza.

De hecho, había dos bellezas. Uno a la izquierda. Uno a la derecha. Se sentaron en el cofre de la persona que había intentado hablar con Tanya.

A lo largo de su vida como niña, Tanya había tratado de suprimir sus hormonas tanto como pudo pensando en cualquier cosa menos en sexo y su situación.

En realidad, en ese entonces era bastante fácil. Había muy pocas mujeres en el ejército del Imperio, y las únicas con las que interactuaba de manera regular y amistosa eran algunos miembros de la 203a.

Su pubertad tampoco la estaba afectando demasiado. Eso fue útil en algunos aspectos: menos distracción, no tenía senos, pero también molesto en otros: parecía una niña de doce años y tenía la altura para igualar.

Todavía miraba a otras mujeres de vez en cuando, de nuevo, principalmente con la 203, y si alguna vez la atrapaban, simplemente miraba con tristeza su propio cuerpo en un intento de usar su apariencia mediocre como una excusa.

Se le había dado todas las clases de extremidades, y, junto con el tiempo que había pasado en las aguas termales de Bidin-Budin con Viktoriya, crearon maravillosas fantasías que Tanya deseaba poder adecuadamente 'cuidar' de.

En estos días, estaba empeorando un poco. Ahora tenía una dieta saludable que no contenía cuero ni aserrín ni corteza de árbol, y la ciudad de Axel estaba llena de mujeres a las que no les importaba lucir una pulgada (o veinte) de piel.

En este caso, sin embargo, los montículos de abundante carne eran demasiado para ignorarlos. Eran enormes. Y no solo 'tengo-dolor-crónico-de-espalda' enorme. Este par de pechos necesitaba que la armadura que los contenía tuviera la forma adecuada.

Se suponía que la armadura no debía funcionar así. Ese tipo de cosas era estúpido, caro y, al hacerlo, probablemente disminuyó la defensa general de la armadura. Eran ridículos, y debajo de toda esa armadura ...

… Probablemente hicieron con orgullo el nombre de 'peto'.

Por supuesto, la persona a la que estaban apegados no estaba mal. El hermoso cabello largo y dorado al que Tanya imaginó que su propio cabello podría parecerse si alguna vez lo dejara crecer, estaba recogido en una cola de caballo, en su mayor parte, y los rasgos afilados y aristocráticos eran la norma en su rostro.

Tanya negó con la cabeza y se secó la comisura de la boca con una servilleta cercana. Lo dejó y se aclaró la garganta. "¿Podría repetir eso?" preguntó, esperando que su voz no vacilara ni se quebrara.

"¿Sigues buscando miembros del grupo?"

Tanya asintió y la mujer cerró los ojos y juntó las manos. "Gracias a Dios. He estado esperando la llegada de alguien como tú", dijo la mujer, exhalando pesadamente al final.

Las cejas de Tanya se fruncieron. ¿Estaba nerviosa o algo así?

La mujer se enderezó e hizo ademán de presentarse con frases entrecortadas. "Mi nombre es Darkness. Mi vocación es la de un cruzado. ¿Puedo, por favor, unirme a su grupo?"

Tanya examinó el resto de su apariencia. Una armadura pesada adornaba su cuerpo, la mayor parte centrada en su pecho y caderas. El resto de su cuerpo estaba vestido con una especie de tela amarilla y, si Tanya tenía que adivinar, probablemente tenía una cota de malla debajo de todo.

Ella fue realmente lo que le vino a la mente cuando pensó en la palabra "cruzada".

Sí, debe haber estado nerviosa por tartamudear tanto. Tanya también se puso de pie. "Mi nombre es Tanya von Degurechaff. Soy una aventurera y estoy buscando un grupo para liderar".