Advertencias: fluff, poco drama. AU de hibridos y omegaverse
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Mark, en su forma de conejito, se orinó sobre Jackson. Literalmente.
Jackson soltó un grito sorprendido, Jimin saltó hacia atrás y Jungkook murmuró una maldición. Taehyung, todavía en el suelo, comenzó a reírse. Debido a la impresión el híbrido de lobo soltó al conejito, que cayó al suelo de forma elegante, dando unos saltos para alejarse de alli, y se transformó a su forma humana.
-¡Oh, lo siento! -tartamudeó Mark, su rostro cubierto de escarlata por la vergüenza-. ¡Lo siento mucho, de verdad! ¡Es que me asusté demasiado y es un mecanismo de defensa!
-¡Su cara, Markie, su cara! -se rió Taehyung todavia riéndose en el suelo.
Mark miró al suelo sus ojos poniéndose un poco llorosos debido a la humillación de la situación. Jimin se compadeció ante su amigo, dando un tímido paso para acercarse y consolarlo, sin embargo, no pudo hacerlo porque Jungkook lo agarró de la muñeca.
-¿Podemos hablar? -dijo Jungkook, con su voz un poco baja.
-Um, tenemos clases -dijo Jimin, repentinamente asustado, pero de forma inmediata ese miedo desapareció al ver la mirada triste de Jungkook-. ¿Qué tal si... si uh... ha-hablamos después del colegio?
Jungkook sonrió, repentinamente feliz y entusiasmado.
-¡Si, eso suena bien! -aceptó Jungkook, girándose para Jackson, que seguía pasmado, mirando su playera húmeda-. Oye, hay que ir a clases.
-Si pero, eh... -masculló el híbrido de lobo aturdido.
-¡Déjame a-ayudarte! -saltó Mark, todavía con expresión atormentada-. ¡Por favor...!
Jimin sacudió la cabeza, sin querer intervenir al ver a Jackson sonreír como si un conejo no se hubiera meado sobre él, y le tomó la mano a Taehyung, que seguía soltando risas bajas. Ambos se despidieron de Jungkook, que parecía algo fastidiado, entrando al edificio por los pasillos casi vacios.
-Le gustas a Jungkook -se burló Tae, con una sonrisa pícara y divertida.
-No -se apresuró en decir Jimin-, no, eso no es cierto. Él...
-¡Él te defendió de los alfas carnivoros! -dijo Tae, sin dejar de observarlo con esa juguetona sonrisa-. ¡Te llamó su omega!
-Estaba bromeando -trató de excusar-. ¡Quizás sólo quiere reírse de mí, como todos los alfas hacen, Tae!
Su amigo lo contempló, atónito por sus palabras, y Jimin sintió ganas de llorar. Sin mentir un poco, Jungkook era el primer alfa que se interesaba en él, así que debido a eso mismo, el omega realmente sentía que todo era una broma de mal gusto.
-¿Por qué Jungkook querría reírse de ti? -preguntó Tae, poniendo una expresión triste.
Taehyung y Mark no podían verlo, pero porque ellos eran bonitos. Muy bonitos, con aromas omegas atrayentes, delgados, sin un gramo de grasa extra en sus cuerpos. Jimin, por el contrario, estaba gordito. Odiaba especialmente, esos momentos en los que se sentaba y podía sentir los rollitos en su estómago, cómo se formaban, sintiendo el llanto pujando en su garganta por esa sensación.
