Eva Vegas es una chica con un pasado, que la ha llenado de dolor y cicatrices. Sus padres se divorciaron cuando apenas tenía un año y medio, pero a pesar de no tener un ejemplo a seguir en tema de relaciones amorosas sueña con flores, corazones y to...
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- Ya estas despierta menudo susto nos distes- Claudia entra a el cuarto de hospital como un remolino, arrasando con todo a su paso, le da un empujón a Marco para ocupar su sitio a mi lado y apretarme contra ella más que abrazarme.
- Ahora que no es un secreto puedo felicitarlos a ambos por el bebé- pregunta Igor- Papá va a morir cuando se entere que va a ser abuelo.
-Igor te advierto que si papá se va a enterar va a ser por mí y por nadie más, entendido- Marco le lanza una mirada a su hermano que si mataran ya Igor estaría muerto.
- Vale, vale- dice el hermano mayor levantando las manos a modo de rendición.
Marco me mira como apenado, esto de que muchos sepan me resulta incómodo. Aprieto la mano de Claudia y vuelvo a mirar al padre de mi bebé.
-Vamos Igor por algo a la cafetería, muero de hombre- el entendió la indirecta necesito estar a solas con mi amiga- Eva te traigo algo.
-No es necesario nosotros le trajimos el desayuno y Safiye te mandó para ti también algo- aclara mi cuñada.
- Vale, entonces vamos a por un café y en un rato estamos de regreso- se da la vuelta y cuando creo que ya se ha marchado regresa- Claudia no le dejes hacer nada, tiene prohibido levantarse de esa cama hasta que venga el médico.
- Yo la cuido Asensio, ve tranquilo.
- Antes que empieces a preguntar necesito ir al baño con urgencia- le advierto a mi amiga cuando al fin hemos quedado solas.
- Pero mira que te gusta llevarle la contraria- me regaña Claudia.
- De verdad Clau necesito hacer pis y por ir no me va a pasar nada, además voy a ser toda juiciosa- pongo morritos y ojos de gato con botas para que me deje ir.
Con mucho cuidado de no llevarme la vía que tengo en el brazo derecho me incorporo para quedar sentada, bajo lentamente los pies y un mareo se me viene encima, doy gracias que Clau me sostiene.
- Porfa con cuidadito si, quédate ahí voy por tus pantuflas- se aleja por unos segundos de mi para ir al sofá a buscar en una maleta, que al instante reconozco como la mía, se gira con aire de victoria mostrándome mis pantuflas de peluche de punta abierta con diseño de conejito en gris- Sabias que aun eres muy infantil.
- No me digas que no te parecen tiernas.
- Es verdad, me tienes que decir donde las compraste- ambas reímos- Además te traje un pijama por si te quieres cambiar-
- Una ducha no me vendría mal.
- Pues vamos que te ayudo.
- Claudia yo puedo sola- digo poniendo mis manos en jarra al lado del cuerpo.
- De eso nada, estoy aquí para cuidarte, así que mueve tu culo para el baño.
Logro hacer pis, bajo la vigilancia de Claudia, nos las ingeniamos para desnudarme, es algo cómico porque desenganchamos el suero del perchero y lo metemos por la manga de la bata de hospital, las dos aplaudimos cuando lo logramos. Mi amiga pone la ducha a una temperatura agradable, entonces aprovecha ese momento tan íntimo para llenarme de preguntas. Al final le cuento muy por arriba mi conversación de hace unos minutos con Marco.
