JeongHan y JiSoo vivieron con una promesa.
Como líderes de la organización clandestina más temida de Corea, son criminales. Son malas personas. Pero a ellos nunca les importó. Lucharon por un propósito y ese era deshacerse de toda la escoria del mun...
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Era tan cálido, tan relajante, y en su mente, se sentía tan seguro. Había derramado todo lo que había reprimido desde ese día. La historia que sabía que era cierta y en la que nadie creía. Finalmente alivió la carga, aunque fuera un poco.
Dios, estaba tan cansado. El precio que le costó a su mente fue indescriptible, durante años se lo guardó para sí mismo, encubriendo los recuerdos y las emociones con violencia porque esa era la única forma que conocía. Ahora todo salió a la luz, en un torrente de palabras, el dolor desbordante finalmente se habló en voz alta.
El abrazo duró más de lo que SeungCheol había esperado y, en algún momento, se encontró a la deriva. Nunca se había sentido tan cómodo en los brazos de alguien que no fuera el de su madre. Se sentía tan diferente.
WonWoo mantuvo un agarre suave pero firme sobre el chico, después de unos minutos de sostenerlo sintió que el peso en sus brazos aumentaba gradualmente. Podía decir que el otro se estaba volviendo somnoliento. Dejándolos caer al suelo, WonWoo se apoyó contra el marco de la cama, con SeungCheol en su regazo, apretado contra su pecho.
Podía sentir las lágrimas mojando su camisa pero eso no le molestaba. WonWoo sintió que el chico se volvía lento, antes de que sus ojos se cerraran y el agotamiento emocional lo arrullara hasta la inconsciencia.
Incluso con su estado, sus brazos nunca abandonaron a WonWoo, se quedaron abrazados a él, como si tuviera miedo de soltarlo, temiendo que lo dejaran. Se aferró a WonWoo como si su vida dependiera de ello.
El mayor sabía exactamente que significaba ese abrazo; hambre de contacto físico.
Se dio cuenta de que el más joven dudaba mucho del contacto físico. Y sin embargo, en el momento en que WonWoo lo abrazó, se fundió en él. Supone que el único contacto físico que tuvo SeungCheol fueron puñetazos y patadas.
El chico nunca debió haberse dado cuenta de cuánto anhelaba el afecto hasta que realmente lo obtuvo. Sonrió tristemente a SeungCheol en sus brazos, pasando su mano por su suave cabello. A WonWoo no le gustó la idea de que esta podría ser la primera vez que el otro recibe un contacto físico que no sea violento.
Apenas conoce a SeungCheol, pero está seguro de que cambiará eso. Todos ellos lo harían. Será un trabajo en progreso, pero lo conseguirán. Todos se ayudaron unos a otros a superar sus preocupaciones, ellos también ayudarán al chico ahora.
Pero primero, a otro asunto que nos ocupa.
-"Ya podéis dejar de escuchar a escondidas"-. WonWoo dijo y se rió suavemente cuando la puerta se abrió para revelar otros once pares de oídos que estaban escuchando.
Todos sonrieron tímidamente y entraron en la habitación. Chan rápidamente corrió al lado de SeungCheol, sentándose para acariciar su cabello ligeramente. De todos ellos, se apegó mucho al otro con bastante rapidez.
