Capítulo 9: Los preparativos para el viaje.

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Su pregunta fue respondida una hora después. En un supermercado. Con mucha gente. ¿Para qué? Simple: la comida. Un saiyajin común no sobrevive ni una hora sin comida.

Estaban en una larga fila de unas 20 personas, hasta parece que la cajera del mercado se mueve a leña y no cualquier leña, sino esa húmeda a que no le podes prender fuego ni con alcohol.

-Trunks...- susurra la joven mientras sostenía el carrito de supermercado, vestía una chaqueta amarilla con una calsa negra y zapatos deportivos -¿Cuánto más vamos a tardar?- se quejaba hasta levitar a la altura del joven de cabellos lavanda.

Él la tomó del brazo y la bajó hasta que ella toque el suelo -Ya te dije que no puedes volar frente a los terrícolas normales, pensarán que somos un villano o un androide- susurraba agachándose a la altura de la pequeña.

-Pero me estoy aburriendo y ya quiero ir a entrenar en las montañas- hizo un puchero con su boca quedando en una forma muy tierna llamando la atención de sus alrededores.

Una señora se acercó hacia ellos con una sonrisa- Que tierna eres ¿Son hermanos o novios?- Trunks quedó en shock unos segundos hasta que Koron explotó.

-Escúchame señora, yo soy...- fue interrumpida por las manos de Trunks agarrándola de los hombros y apartándola hacia un costado, rápidamente una de sus manos se despegó de su hombro cubriendo su boca.

-¡Amigos!- habló nerviosamente, Koron comenzó a enfadarse -Es la hija de uno de los amigos de mi madre y hoy nos toca cuidarla- soltó una carcajada llena de nervios y algo de vergüenza.

-¡Qué bien!- la señora sonrió tiernamente de nuevo a Koron- Que les vaya bien- se despidieron y la mujer se marchó.

El híbrido suspiró relajado hasta que la saiyajin mordió su mano para que lo soltara de una buena vez.

-¿Hasta cuándo estarías sujetándome?- bufó la pequeña mientras se cruzaba de brazos.

-No era necesario morderme, Koron- sacudía su mano quejándose del dolor. Ella lo había mordido tan fuerte que por poco sangraba, esta vez se pasó de la raya.

-¡Llegamos!- las voces de los jóvenes saiyajin sonaron a unísono al entrar por las puertas de la corporación.

-¡Hola, hola!

-Que bueno que ya llegaron.

Trunks quedó paralizado y Koron saltó de la emoción al ver a sus amigos terrícolas sentados en el sofá del salón.

-¡Oliver, Mamoru!- fue a recibirlos con un abrazo.

-¿Por qué están en mi casa?- preguntó el híbrido algo enfadado mientras se acercaba hacia ellos y dejaba los víveres en una mesa de madera.

-No íbamos a dejarlos viajar ustedes dos solos- respondió el joven de cabellos castaños. Trunks casi cae al suelo de la sorpresa.

-¿En serio? - preguntó emocionada la pequeña. Ambos asintieron.

-Mi hermana tiene una viaje hacia el sur para buscar más tipos de semillas y plantas, Bulma me avisó que ustedes iban a viajar también y se me ocurrió ir a las montañas todos juntos- la joven alta explicó lo ocurrido, se acomodaba sus sandalias rosas al igual que su blusa que hacía un juego con su falda blanca.

-Y yo no salgo hace mucho tiempo- agregó el joven de camisa colorada- Me gustaría viajar por todas partes con mis amigos- soltó una carcajada golpeando amablemente el hombro del híbrido.

El joven de cabellos púrpura extendió su brazo frente suyo -Número uno- levantó su dedo índice- no vamos a viajar por todo el mundo, y número dos- levantó el dedo corazón junto al anterior -es un viaje de entrenamiento, un entrenamiento muy duro- aclaró.

-Eso no importa- resopló sin importancia a lo que mencionó su amigo- además yo quiero entrenar también- señaló con su pulgar encima del hombro -Y Mamoru cocina exquisito- ese último comentario hizo que la pelirroja se ruborice.

-¿¡Más exquisito que la comida que prepara Trunks!?- preguntó la pequeña con los ojos como platos.

-Digamos unas diez veces más exquisito- mencionó extendiendo los dedos de ambas manos.

Koron quedó totalmente sorprendida y convencida. Mamoru terminó cubriéndose la cara por lo roja que estaba, no está muy acostumbrada a ser admirada. Trunks anotó a Oliver en su lista de personas a quien asesinar, nadie tiene que atreverse a ofender su comida.

-¡Bien!- gritó la saiyajin -¡Preparemos nuestras cosas y comencemos nuestro viaje!- extendió su brazo en lo alto como estaba acostumbrada.

-¡Sí!- siguió el castaño levantándose de un salto del sofá- ¡Una gran aventura nos espera!- se colocó al lado de Koron y copió su pose.

-Ambos están muy entusiasmados, son adorables- dijo dulcemente la pelirroja mientras colocaba su mano en su mejilla expresando ternura.

-Esta bien- expresó el joven saiyajin- Preparemos las maletas y nos marcharemos.

-¡Qué bien!- gritaron la pequeña y el joven humano al unísono, brincaron de la alegría hasta que el muchacho levantó en sus brazos a la saiyajin.

Trunks sintió un golpe el interior de su pecho. ¿Qué rayos acabó de sentir...?

*Les dejo un dibujo de Koron :'v*

¿Existen los finales felices? -DBZ Fanfiction-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora