Capítulo 9: Advertencia

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— En ninguna vida tuve novio, llegando al punto de hacerme pensar que era asexual, todos eran buenos amigos, pero nada que me llamara como pareja, pretendientes insistentes, pasivos, posesivos, unos que no lo dijeron por no incomodarme entre otros, pero al final solo sentí una conexión con él…

— Pero… ¿crees poder tener algo igual con alguien más? — dijo interesada.

— No lo sé Alice — dije riendo — no es tan fácil… solo… pasa.

— Bueno, está bien, si tiene que llegar llegará — dijo estancando el tema, pero aun con esa sonrisa sospechosa en su rostro.

— Como digas mi hadita amiga — dije feliz y ella sonrió.

Después de eso ella me llevó a casa, ya había caído la noche, me abrazó y se lo devolví con sumo cariño, pero ella se puso alerta cuando nos acercamos, me tensé, sabía que era Jacob, estaba nerviosa, no quería verlo, pero si estaba dentro era por algo, tío Charlie debe estar hablando con Billy Black.

Me aproximé para saludar rápidamente, Alice se fue, aunque parecía molesta, supongo que por el hecho de que hay cambia formas dentro de mi casa, si, definitivamente no les iba a decir hombres lobo, era una terminología que no aplicaba para ellos, siendo que son metamorfos conscientes.

— ¡Julie! — saludaron ambos adultos, mientras Jacob me veía raro.

— Hola, tío, Billy y… — miré a Jacob esperando su nombre, pero no decía nada.

— Es mi hijo, Jacob — dijo Billy presentándolo conmigo mientras lo golpeaba disimuladamente.

— Mucho gusto — dijo al final con una enorme sonrisa mientras me extendía su mano, cabe aclarar que parecía forzada.

— El gusto es mío, el tío Billy habla mucho de ti — dije estrechando su mano de vuelta, y es que no era mentira, siempre me hablaba de lo genial y buen chico que era su hijo, y que seguramente sería un gran hombre.

— Vaya, que casualidad, lo mismo digo, no hay día en que no mencione lo maravillosa y agradable que eres — dijo Jacob mientras Charlie miraba a su amigo entrecerrando los ojos, y Billy que reía como si lo hubiesen descubierto, se dirigió de la entrada, a la sala.

— Así que… — dijo y el ambiente se puso incómodo, sabía que él había estado todo este tiempo detrás de Bella, por lo que seguramente no había escuchado halagos a mi persona de su parte.  

— Bueno, creo que tengo que ir a hacer mi tarea — dije en un intento de huir.

— Charlie dijo que fuiste a hacer tarea con unos amigos — dijo en un tono que no pude identificar por lo confuso que sonaba. 

— Sí — lo miré y me miraba como si me analizara — pero creo que al que debo darle esas explicaciones es a mi tío, no es por sonar grosera, pero apenas nos conocemos y me estas juzgando… desde que llegué.

— ¿Cómo? — dijo sorprendido.

— Billy también se percató de eso, probablemente te lo diga más tarde, eres pésimo escondiendo lo que piensas… no quiero quedarme para ser juzgada de esa forma. — dije y frunció el ceño — he pasado por suficientes cosas el día de hoy niño, ven cuando consigas una mente más abierta — vi como una pizca de remordimiento pasó por su mirada, pero no esperaría a escuchar nada más.

Me encerré en mi recamara, colocando todo lo estrictamente necesario, comencé a escribir, ya estaba perdiendo mucho el tiempo, y quería desahogar mis sentimientos escribiendo… así duré hasta el amanecer, tío Charlie parecía no querer molestarme, pensando que me había pasado algo en la casa de los Cullen, por lo que fue a dormir temprano.

Reencarnando en CrepúsculoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora