☆𝘋𝘳𝘪𝘷𝘦𝘳'𝘴 𝘓𝘪𝘤𝘦𝘯𝘴𝘦☆ || 𝐃𝐚𝐧𝐢𝐞𝐥 𝐒. & 𝐂𝐨𝐫𝐛𝐲𝐧 𝐁.

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Volví a clase con las pocas ganas de verle la cara a mis amigos. Iba con la cabeza mirando al suelo. No quería que mis ojos rojos y llorosos de tanto llorar se notará, tampoco quería que se enojada tomó mi maquillaje corrido de las lágrimas.

Me senté al final de la clase, por suerte esta clase la tenía sola. Ninguno de mis amigos la tenían conmigo por lo que agradezco. Mire hacia al frente para ver la de gente que entraba sin importarle de que yo estaba ya dentro.

Despues llegó el profesor y empezó la clases. Después de una hora que para mi fue un siglo y medio, salimos. Yo fui hacia mi casillero para coger mi libro de lengua, que justo me tocaba ahora. Vi de Corbyn estaba apoyado en la de al lado mirándome con una sonrisa. Ni siquiera tenía ganas de mirarle, quería irme de aquí. Hice como que no lo note o que no lo vi y me fui.

—Olivia —me llamó el mientras que andábamos— olivia escuchame — volví a ignorar lo.—¡Joder olivia escuchame por favor! — grito haciendo que todos, incluyéndome, nos giremos para ver que pasaba. Le mire con tristeza a punto de saltar a lágrimas. El noto lo que me pasaba, yo tire mis libros al suelo y llorando me abrace a el.—¿olivia que pasa? — me pregunto preocupado. No dije nada, solo continúe llorando en silencio mientras mi cabeza estaba en su pecho sintiendo su corazón palpitar con mucha velocidad. El me separó de el lentamente. Miro a los lados para asegurarse de que nadie nos estuviera mirando pero no había nadie en los pasillos. Seguro ya debió de sonar la campana y ni siquiera la note. —necesito que me cuentes que es lo que te pasa olivia, no puedes estar triste — me dijo agarrando me de mi cara. Seguí sin contestar, quería contarle todo, quería decirle que la culpa de esto que me esta pasando ahora es por Daniel, pero por mucho que quería no podía. No podía ni mover un solo músculo, estoy tan rota y triste que no puedo ni hablar. Negué con un puchero en mi cara y el me cogió de la mano.

Me llevó a su habitación, me sento en su cama y me miro con tristeza.

—olivia, habla, dime que te pasa —dijo, yo abri la boca pero nada salía.

Le mire con mis lágrimas saliendo continuamente, el me abrazo y me acarició mi cabeza suavemente. Quería hablar, creo que con el puedo contar todos mis problemas. Creo que confío en el.

—si es por el beso de ayer, me lo dices y te juro que nunca más volverá a pasar— me separe de el suavemente y negué con una pequeña sonrisa. No se por que pero me causó un poco de gracia que dijera eso.

—no es eso — al fin pude hablar— de lo contrario, me encanto Corbyn— le sonreí con timidez, el sonrió un poco coqueto.

—¿así que beso bien? — dijo, yo le di un pequeño empujó haciendo que el riera, yo le seguí riendo— pero bueno, te he sacado una sonrisa después de lo de antes — dijo emocionado y yo cambie mi expresión a una ama triste. —perdón, no quería..

—no tranquilo, estoy bien. Pero es que no puedo — dije y el negó.

—debes parar de pensar en el— me dijo.

—¿crees que no lo hago? —pregunte sin entender — claro que si, pero es el quien me sigue a todas partes. Es el que me hace ponerme de mierda, como ahora. Yo me olvide de el al igual que el a mi, pero hoy..

—¿que pasó hoy?

—hoy me pregunto del beso entre tu y yo y se enfado demasiado que me hizo un poco, solo un poco, de daño— empezaba a ver su expresión de enfado salir por sus venas. Tenso su mandíbula y miro hacia su escritorio.— por favor no hagas nada malo, ya no me duele te lo aseguró — dije para que bajara su enfado. El me volvió a mirar y se levanto, enfadado.

El se fue a una esquina y se llevó sus manos a la cabeza frustrado. Se notaba mal, el me quería y se le nota, se nota que si me pasa algo el siempre me protege. Ahora entiendo el por que estoy tan enamorada pero no de daniel, sino de el, el es el que me aprecia, quien me quiere tal y como soy, quien aunque me equivoque el siempre estará para hacer las cosas como son realmente. Pero estoy tan ciega que ni me doy cuenta. No me doy cuenta de que me estoy yendo con el equivocado cuando hay una persona que daría todo o más.