El Hijo del Jeque ✔

Extra | Amor y letras

•Extra•

El reflejo del agua, mi rostro sobre ella, mis anhelos de poder estar dentro y perderme en sus milésimas. Muchas veces pensé en lo grandioso que sería simplemente volar e ir a donde tu alma te mande a donde tu corazón se sienta libre en armonía, donde tus sueños se cumplan sin pensar nada. Una vida donde mi yo interior se sienta rebosante.

—Mi señora, ¿Me mando a llamar? —la voz de Cris interrumpe mis pensamientos, mis ilusiones.

—Sí —digo con un rostro desorbitado —. Quería que me consiguieras papel y lápiz para escribir una carta.

—Ahorita mismo, mi señora.

La juventud es un camino que marca los pies de aquellos que deciden vivirla de manera inconveniente. Llena de púas que hieren a cada paso.

Mi vida fue un rompecabezas con piezas que no cuadraban, más a la fuerza las introdujeron, piezas que marcaron más a que a mís pies, marcaron casi todo mi cuerpo.

Pero como todo siempre hay algo que consuela ese dolor que en tu corazón se almacena, siempre hay algo que te acompaña y sabes que por ese algo tu vas a luchar.

Aún la planta más espinosa tiene una hermosa flor.

—Señora aquí tiene lo que pidió —volteo a ver.

—Muchas gracias Cris, te puedes retirar.

Me sonríe y camina.

Quedo viendo la hoja de papel y muchos recuerdos explotan sobre mi cabeza, las emociones se transfieren dentro de mi piel.

Tomo el lápiz en mi mano y una lagrima sale de uno de mis ojos, el saber que pronto ya no seré, duele hasta el fondo y no por mí misma, sino por el hecho de aquellos que tú aprecias.

Ibrahîm.

El niño que se convirtió en hombre, el joven inmaduro que ahora piensa como adulto. El ser que dio a mi vida una luz de esperanza, mi hijo amado.

Me enfocó y empiezo a escribir:

♧

Querido Ibrahîm.

Soy la persona que te dio a luz, la persona que siempre a pensado en ti, la persona que a pesar de tus errores nunca ha dejado de confiar, la persona que te ama más que a su propio ser.

Te escribí esta carta para expresarte todo lo que siento ya que pronto será tarde para mí.

Ibrahîm eres mi luz, ese rayo de esperanza que me mantenía cuerda, el resplandor que marcaba mi corazón con tanto amor. Ibrahîm te pido que cuando leas carta pienses en tu vida, pienses en si estás asiendo lo correcto, no dejando que los demás controlen tus situaciones. Amado hijo la fé que tengo en ti es inmensa, por que yo se de lo que tu eres capaz, capaz de lograr cosas que ni yo y ni tu padre podemos.

Yo se que no será fácil pero recuerda que por lo bueno se da la buena batalla.

Con todo mi corazón y mi alma.

Te ama tu madre. Ibrahîm.

♧

Al escribir eso último lagrimas salen por montón de mis ojos, solo pensar en que habrá un día que no lo volveré a ver, me parte completamente el alma.

Firmo la carta y mando a pedir un sobre.

Ya teniendo la carta en mis manos pienso en Tahira para que sea ella quien se la de, ya que dudo llegar al momento donde se la quisiera dar, que es el día de su boda.

♧◇♡♤

—¡Hola madre! —se me acerca Ibrahîm a depositar un beso en mi mejilla. Y el solo sentir su afecto hace que mi corazón se estruje. 

—Hola hijo —le sonrió.

—¿Como te sientes? —me pregunta.

—Me siento bien —sonrío ya que lo que menos quiero es preocuparlo, se muy bien mi condición en este momento y no es de las mejores.

—Hijo ¿y tu hermana? Quiero hablar con ella.

—Ahorita la llamo, madre —deposita otro beso en mí y se retira.

Después de unos minutos analizando en lugar, llega Tahira radiante, con su hermoso cabello y su piel blanca.

—¡Hola Nana! ¿Para qué soy buena? —se acerca a abrazarme.

—Es que ocupo un favor tuyo querida —mi rostro cambia a uno un poco más quebrado. Al Tahira ver mi reacción se acerca a más a mí.

—¿Que sucede Nana?

De debajo de mi almohada saco la carta que escribí para Ibrahîm.

—Necesito que guardes esto —le doy la carta en sus manos —. Hija, quiero que tu se la des a Ibrahîm.

Ella me queda viendo —. ¿Y tu por qué no se la das Nana? —Volteo a ver hacia otro lado y solo pensar en el hecho de que pronto estaré sin él, provoca dolor en mí.

—Hija, yo tarde o temprano no estaré aquí con ustedes y por cualquier cosa quisieras que tu se la dieras el día que Ibrahîm se vaya a casar.

—Nana, no digas eso, tu seguirás todavía con nosotros.

Sonrió y pongo mi mano en su mejilla. Tahira es una joven hermosa y muy cariñosa, el hombre que se quede con ella tendrá mucha suerte de tenerla

porqué es una chica única.

—Gracias querida.

No importa a dónde yo vaya, o donde me encuentre después de mi muerte. Estaré feliz de saber que Ibrahîm es un hombre que no solo es de mi orgullo sino que es el orgullo de todos.

♧◇♡♤

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Hola chicos!

El primer extra. Espero que les guste, se que no era lo que esperaban pero quería hacer un enfoque sobre el dolor de la madre de Ibrahîm.

Esperen el próximo! Será de infarto 😅😅

Hasta la próxima!