Clase 45

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Dos semanas no fueron mucho tiempo. Pasaron tan rápido que apenas pareció un parpadeo

La tensión en el Shibusen se podía sentir en el aire, todos los postulantes al programa intercambio ya estaban formados esperando su número de turno. Ema estaba especialmente nerviosa, después de todo no tenía una pareja de la Academia por lo que era incierto si lograría al menos rellenar su tablilla

Volteó a ver a Lucas quien estaba de pie a su lado, con una expresión seria. Después de haber pasado tanto tiempo juntos había aprendido un par de cosas sobre el muchacho. Por ejemplo que tenía una actitud taciturna por naturaleza, no sólo era serio para su trabajo. También lo era para todo, por lo que rara vez lo veía sonriendo o hablando mucho incluso —¿No estás nervioso?

—¿Usted lo está?

Eso no responde la pregunta en absoluto, pensó antes de hablar nuevamente —Es imposible que no lo esté, después de todo los jueces son figuras importantes

—Todo saldrá bien

—No eres muy bueno animando a la gente, sabes

—Me disculpo por eso

—Olvidalo, estaremos bien— se animó a sí misma y a él apretando su agarre en el amuleto de suerte que le dió Crona. No tenía inconveniente en recibir cualquier tipo de ayuda divina por lo que este objeto no le haría daño a nadie si lo traía

Lentamente los alumnos fueron llamados a la sala de audiciones, la fila se hacía cada vez más corta conforme pasaban los minutos. Aunque parecía una larga espera de horas, el nerviosismo provocaba que el tiempo se escurriera rápidamente. Para cuando su turno llegó, la joven Evans palmeó con fuerza sus mejillas ahuyentando cualquier duda o temor

—Buenas tardes— saludaron ambos chicos a la mesa de jueces

—Buenas tardes— aquellas mujeres y hombres despedían un aura estricta —Su nombre— solicitó la educadora de la derecha

—Ema Evans

—Lucas Portman

—Ema Evans aparece, pero, usted caballero me parece que no es un alumno de la Academia— dedujo un juez luego de una búsqueda en todo el sistema

—No señor, no soy alumno. Solamente soy un soporte

—¿Soporte?

—Si, verá, no tuve oportunidad de hacer pareja con ningún alumno por lo que le pedí a un amigo que me ayudara

—Señorita Evans, esto no es imposible pero debe saber que hay ciertas reglas sobre los soportes. Debe comprobar que este joven no es un profesionista en el baile

—Ah, sobre eso— recordó tendiendole una carpeta al juez —Esto, comprueba que no lo es

El hombre mayor revisó el historial del chico sin encontrar ninguna discrepancia —Pueden comenzar entonces— indicó entrelazando las manos sobre la mesa.

Al mismo tiempo que se llevaba a cabo la audición de Ema, los spots de  Musique de rue eran lanzados formalmente en la televisión y el internet. Era una oportunidad tranquila para Soul, su agenda repleta de tareas fué disminuyendo conforme terminaron sus actividades programadas, lo último que faltaba era la apertura de la sección "EVANS" en la sucursal principal de las tiendas de instrumentos. Los cargamentos de sus productos llegarían a más tardar en dos días por lo que se encargaría de revisarlos, luego redistribuirlos ordenadamente y su trabajo estaría terminado

Alfred estaba demasiado feliz con los resultados de las negociaciones y los modelos elegidos para sus instrumentos que ya no presionaba a Soul para quedarse más tiempo en París, sin embargo, él no quería volver tan pronto. No tenía muchas ganas de enfrentarse a la ola de preguntas que le harían todos al volver, sobre todo las maldiciones que le lloverían por no responder un solo mensaje durante todo ese tiempo

Aún más importante, no estaba listo para enfrentarse a Maka. No porque la odiara, sino porque entendía mejor que nadie lo que significaba volver a verse. Sería más incómodo y doloroso que antes, en especial si ella seguía enamorada de Black Star, no supo si la situación entre ellos mejoró o empeoró pero esperaba infinitamente la primera opción, al menos habría algo bueno de todo aquel problema

—Hey, Soul— Roux se acercó a él para contemplar el panorama desde el ventanal de su edificio principal —Los comerciales están por todas partes y los afiches pegados en cada rincón. La audiencia se está volviendo loca de la impaciencia para adquirir los nuevos instrumentos, debo decirte, eres un genio. Una verdadera pena que no tuviera una hija, de lo contrario me encantaría que fueras mi yerno— bromeó dándole una calada a su habano. Notando el semblante poco alegre del menor —Te preocupa... Una mujer ¿Cierto?— continuó su línea de conversación —¿Tu novia te extraña demasiado? O ¿La extrañas tú a ella?

—No, señor, no se trata de eso— respondió con una expresión de pena —Solamente estaba pensando en algunos pendientes que tengo pero nada relevante

—Has estado aquí casi medio año Evans. Éste viejo zorro tiene un buen ojo para distinguir esa clase de problemas— el albino solo pudo reír ligeramente —Créeme muchacho, los parisinos tenemos un sexto sentido. Todos vivimos pasionales, no por nada nos llaman habitantes de la ciudad del amor. Es por eso que, después de la demostración en nuestra sucursal, puedes volver a casa, te he robado mucho tiempo de las personas que amas y las que te aman— dijo fácilmente —Me has ayudado enormemente con esta nueva colaboración por lo que voy a extender un sueldo para tí

—¿Me está ofreciendo trabajo?

—Precisamente— le extendió una carpeta para que revisara su contenido. Dentro había un contrato redactado a detalle sobre sus labores si aceptaba la oferta

—¿Director moral de desarrollo de ideas? Esto quiere decir...

—Necesito a alguien visionario como tú. Alguien que se pueda manejar con versatilidad en el mundo de los negocios— elogió

—Pero ¿Por qué moral?

—Oh, eso. Este puesto no te lo ofrezco como un miembro de Musique de rue, tengo una organización privada donde recluto jóvenes talentos de distintos países, la Organización de desarrollo de ideas es una figura moral. La mayoría de mis empleados no se encuentran físicamente en el lugar, sinó que están aún en sus países de origen o viajando para adquirir más experiencia— explicó resumiendo la idea —De todas las personas que he conocido tú eres el que tiene el mayor potencial para dirigir al resto

—Entonces quiere que vuelva a Londres

—¡Por supuesto! No tengo ningún inconveniente con que sigas trabajando en la fábrica de tu familia. Después de todo no es un crimen tener más de un empleo y principalmente. Para que veas a esa Mussa

—¿Mussa?

—Tu fuente de inspiración hombre. Esa pieza que compusiste y tocaste en las pruebas de los pianos fué una obra llena de amor. Así que necesito que visites a esa mussa con regularidad para que me traigas ideas frescas— sentenció seguro de lo que decía —Si aplicas esa creatividad en nuestro nuevo proyecto llegaremos muy lejos. Lee el contrato detenidamente y avísame ¿Te parece bien?

Dichas esas palabras palmeó su hombro alejándose de ahí. La pieza que tocó para probar los pianos fué la que compuso para Maka durante años  y apenas podía darse cuenta del transfondo de su comportamiento hasta ahora.

Continuará...

Unilateral Where stories live. Discover now