Sky's Mayhem

Cloud

- Patético. – Esa fue la primera cosa que el otro ser en la habitación se dignó a decirle, tomando tranquilamente una taza de té.

Alaude no fue sorprendido ni hizo gestos de reconocimiento ante la mirada ni la intención asesina fijándose en él. En todo caso, se tomó su tiempo tomando su té, como si nada pasara. Llevaban días en esto, desde que finalmente el ser que casi lo asesina despertó. No estaba precisamente feliz de estar allí, pero no dejaría a nadie más cerca de esta persona inestable y con demasiado poder en manos y mecha extremadamente corta.

Cloud, si sabía lo que le convenía, no lo tocaría. Si lo intentaba podía soportar un tiempo, a diferencia de los otros, porque ya había chocado armas con este idiota. Si lo tocaba, Tsunayoshi no estaría feliz. Si lo mataba, si mataba a alguien, Tsunayoshi probablemente nunca lo perdonaría por ello. Su tío, bien podría ser un segundo padre mas no lo diría en voz alta, había estado con ellos por más de una década. No tomaría bien si los tocaban, especialmente aquellos que eran considerados familia.

Así que si, Alaude estaba confiando en la poca sensatez del hombre de pelo negro. La intención asesina era mucha, era la peor que había sentido hasta ahora, y no iba a mentir en decir que era fácil permanecer impasible ante un ser que solo parecía ser capaz de respirar intención asesina.

No había tocado comida ni agua desde que estaba allí, al menos no en su presencia. Tampoco era su niñera. Si el hombre quería hacerse el fuerte, que lo hiciera. Le valía un colmillo y estaba seguro que también le valía lo mismo a Tsunayoshi.

Dejo la tasa vacía en su plato, y se levantó para irse. Tenía rondas que hacer, tenía gente que ver, y tenía un reporte que dar. De cualquier forma, su punto era el mismo:

- Eres patético, Cloud. – No tenía nada más que decirle a ese ser que se suponía que estaba allí por una única razón, y estaba haciendo nada.

Si un cazador quería cazar, tenía que planear, perseguir, atacar. La presa no iría al cazador para ser cazado, el cazador tenía que ir a la presa. ¿Cloud quería a Tsunayoshi?, pues Tsunayoshi no iba a venir de buena gana. Su tío estaba molesto, y tenía toda razón de estarlo. Había venido los primeros días a ver como estaba el hombre, cuando aún estaba inconsciente. ¿Cuándo eso cambio?, por supuesto que no.

Estando aquí sin hacer más que matar todo con la mirada no iba a cambiar nada. Para eso no hubiera venido en lo absoluto y ese evitaban el mal trago. Por tanto, solo tenía una descripción para Cloud y eso era justo lo que había expresado.

Era una gran decepción saber que Cloud, el más fuerte de todos los elementos del cielo, el ser indomable que ponía a todos los demás en su lugar cuando las reglas eran quebrantadas sin importar quien fuera, era solo un gran niño malcriado y brabucón. Patético. Las historias de su tío eran increíbles, y hasta ahora todos habían, más o menos, confirmado esas historias. Excepto Cloud, a quien había admirado así no lo admitiera.

Kyoya solo podía mirar al idiota que osaba insultarlo y tratarlo como si fuera cualquier persona. Tomando en cuenta que fue salvado a duras penas y aun respiraba, el que actuara así era sorprendente. No cualquiera tenía el valor de mirarlo a la cara como si nada luego de ser apelado por él.

- Tsk. – Igual no valía la pena, era solo un ser terrenal que en verdad no tenía idea de cómo eran las cosas.

Sky debería de haber venido a verlo, así fuera para reclamarle lo que había hecho, para regañarlo por estar allí o solo para darle mala cara si no quería decirle nada. Pero no estaba allí. Así que, como era de esperarse, estaba furioso. Tsunayoshi siempre aparecía cuando hacía algo que no le gustaba, así fuera solo para que lo sintiera y supiera que desaprobaba lo que sea que hizo, sin necesidad de decir pio.