XXVII

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—Simplemente no entiendo lo que les pasa a ustedes dos.

Shin-ae y Jae dejaron de comer al tiempo, mirando incrédulas a la castaña quien las miraba de mala gana.

Se encontraban en la azotea de la escuela y habían quedado de comer con Dieter, Rika y Maya, pero esta última cambió su estado de humor cuando vio al rubio.

Jae rodó lo ojos, ignorándola y sabiendo el escándalo que habría. Dieter pensó en irse, pero Rika lo detuvo.

—No entiendo de qué hablas—le respondió la de ojos rojos, dándole otro mordisco a su sándwich.

Rika pareció alterarse cuando maya se levantó hecha furia y caminó hasta Jae, quien le dio una mirada de advertencia.

—¡Hablo de que ya no nos cuentan nada y confían en tipos que acaban de conocer!—exclamó furiosa.

Dieter se encogió en su asiento.

Shin-ae no supo que decir y Jae simplemente se quedó en silencio, observándola seriamente.

Maya al ver que no decían nada, decidió irse de ahí y con Rika siguiéndole el paso.

—Y-Yo...

—No te preocupes, Dieter—le dijeron ambas chicas al tiempo—siempre es así...

Se quedaron hablando los tres un rato hasta que cada uno tuvo que ir a su respectivo salón de clases. Bajaron las escaleras y Jae se despidió de ambos con las manos, pues ella era de otro salón.

Cuando entró a su salón, se dirigió vagamente hacia su asiento, que quedaba en la penúltima fila, en la fila de la mitad. Se sentó y esperó a que su profesor llegara mientras miraba el gran reloj que se encontraba por encima del pizarrón. Faltaban cuarenta y cinco minutos para que terminara la jornada de clases.

Una vez llegó el profesor, se dispuso a copiar lo que él dictaba en su cuaderno.

Cuando ya faltaban 12 minutos para irse, el profesor dejó un proyecto de a parejas. Jae odiaba trabajar en grupo, pero no porque les cayeran mal sus compañeros, sino que siempre terminaba haciendo todo ella.

Jae siempre consideró a sus compañeros como eso, compañeros, pero jamás como amigos. Se hablaban de vez en cuando de temas triviales, pero no había esa confianza con ellos como la que tenía con Shin-ae, Hansuke e incluso podría decirse con Yeong-Gi.

La peor parte era que el profesor era el que estaba formando las parejas. Ella solía hacerse con el grupito más grande y el que era considerado como el «popular»

Cruzó los dedos, deseando que le tocara con alguno de ellos y observó que ellos imitaron su acción.

—... El grupo número doce es... —dejó las palabras en el aire mientras miraba la lista de estudiantes—Choi y Kyo.

Sus compañeros se quejaron con el profesor y este solo alzó los hombros con indiferencia. Diciéndoles claramente que le valía un carajo si se quejaban.

Sonó el timbre y todos se levantaron a hablar con sus parejas. Algunos emocionados porque eran amigos, otros decepcionados y otros, como Jae, indiferentes.

Jae no conocía muy bien a Ya-Joon Choi, pero la chica siempre miraba a todos con recelo y era muy difícil llevársela bien con ella.

Caminó hacia ella, dándole un sonrisa amable cuando ella la miró con los ojos entrecerrados.

—Hola—saludó amable.

Ya-Joon la miró fijamente, pero no le devolvió el saludo.

Jae sonrió nerviosa y le dijo que podrían hacer el trabajo en una cafetería que quedaba cerca del centro comercial y Ya-Joon aceptó, levantándose de golpe y caminó hacia la salida, en el trayecto golpeándole el hombro a la de ojos azules.

GLAMOUR © [Kousuke Hirahara] 𠅤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora