BLACK MAGIC - Draco Malfoy - (Español)

𝐄𝐏𝐈𝐋𝐎𝐆𝐎 𝐈

SÓTANO DEL DOLOR

Y a través de sus venas, la magia dentro de él viajó tan rápido como nunca antes. Él también podía sentir su magia, muriendo en él solo para fusionarse nuevamente y volverse uno con su sistema. Incontrolable.

Sus ojos se cerraron, su pálido rostro inexpresivo. Sin voz. No brillante. No hay vida.

Ella lo había salvado. Esa chica estúpida.

Su frente presiona la de ella cuando los sollozos comenzaron a salir de su garganta. Puede sentir a las otras personas a su alrededor, puede escuchar a su madre llorar como Lhu y Luna, como Pansy. Tan desconsolado como él, como siempre lo estará.

"Tú eres mi reina, amor, te lo prometo, te veré en la otra vida", susurró tan bajo como pudo antes de que otro sollozo hiciera un sonido.

Con sus brazos, acerca su cuerpo a él y un sollozo irregular y más fuerte sale de las profundidades de su garganta.

Dolor.

Es parecido al gris, como una bruma a tu alrededor, asfixiándote mientras el aire raspa tu garganta y los implorantes desgarran tu carne. El dolor es humo. Un tono oscuro de gris. Si fuera un número sería un 8, porque la forma del mismo, es una curva infinita.

Su dolor es tan enorme y tan jodidamente insoportable que lo abandona.

En ráfagas de magia.

Magia catastrófica.

Cuanto más se aferra a ella, más violentamente tiembla el suelo debajo de todos. Un grito ahogado sale de su garganta y los escombros comienzan a derrumbarse. Otra lágrima y el aire se enfría como el hielo, ya no hay sol.

No más ella.

Grita contra su cabeza.

Porque ella esta muerta.

Ella había muerto entre sus brazos.

No le importa en absoluto si alguien más muere hoy porque su magia está fuera de control. Solo quiere gritar, gritar hasta quedarse sin voz, y tal vez seguiría haciéndolo en ese momento.

Con los ojos cerrados con fuerza, caen más lágrimas.

Y la oscuridad es todo lo que ve a continuación.

13 años después

"Jullieth! Jullieth!"

"¿Hm?" respondió la joven sin apartar los ojos de su interesante libro.

"Es hora de que nos vayamos, ¿qué diablos estás esperando?"

"¡Ya voy mamá!" dijo antes de cerrar su libro.