Las 5 Fases De Mi Plan

27.- Perspectiva

– ¡Buenas días!–. Saludó Ichika desde la distancia.

– Buenos dias… –. Devolvió el gesto con una ligera sensación de deja vu en su cabeza.
– ¿Qué se supone que haces?, Tus hermanas ya deben de estar en la escuela.

– Ah… me quedé dormida ésta mañana y les dije que podían irse sin mí–. Explicó un tanto nerviosa.

– …Como sea, solo ten más cuidado para la próxima.

Dicho esto, Futarou suspiró profundamente e intentó seguir su camino en solitario.

– Oye, no seas tan frío conmigo–. Dijo la pelicorto mientras apresuraba el paso también.
– Mejor ten ésto, lo compré especialmente para tí–. Le extendió uno de los cafés que llevaba en las manos.

Futarou lo miró de reojo y aceptó casi de buena fé.

– Gracias…

– No fue nada–. Contestó satisfecha.

Y así, ambos prosiguieron con su camino a la escuela.

– No sabía que usabas lentes–. Comentó el chico luego de darle un buen sorbo a su café.

– De vez en cuando, suelo usarlos como una especie de disfraz–. Explicó.
– ¿Qué tal? ¿Se me ven bien?–. Posó un poco para Futarou.

– ¿Disfraz?–. Pasó de las segundas intenciones de Ichika.

– Me da un poco de miedo llamar demasiado la atención ahora que se estrenó la película en la que salí, así que uso esto para disimular un poco–. Se acomodó los lentes.
– Pero no ignores mi pregunta–. Hizo un pequeño puchero.

– Si si, te ves muy bien con eso.

– Jeje, gracias–. Lo sostuvo por una de sus manos.
– …Por cierto… ¿No quisieras saltarte las clases conmigo hoy?

Ante tan inesperada pregunta, Futarou arqueó una ceja con esceptisismo.

– Vamos, conozco muchos lugares divertidos–. Dijo coquetamente.
– ¿Qué dices?, ¿No quieres tener una cita conmigo?

Al ver cómo Ichika no jugaba en lo absoluto, Futarou lo meditó por un par de segundos.

– …Solo si prometes que esta vez no vendrá otra persona en tu lugar.

– ¡¿En serio?!–. Lo cierto es que ella no se esperaba esa respuesta.
– En ese caso…

– Sin embargo… –. Interrumpió repentinamente la emoción de Ichika.
– No tengo ninguna intención de saltarme las clases.

– ¿Eh…?

– Así que nos vemos después de clases–. Le dió la espalda y se dispuso a seguir su camino.

– ¡V-vamos!, tú faltas todo el tiempo a clase–. La pelicorto no perdió el tiempo y fué detrás de él.

– Estaba hospitalizado en aquellas ocasiones, por si no lo recuerdas–. Contraatacó.
– Además, ya te cuesta bastante ponerte al día con tus constantes faltas para seguir con tu carrera de actriz.

– ¡E-espera!, solo por ésta vez, ¿Si?

– No.

>>>

Tras pedirle que se saltará las clases con ella, Futarou se la pasó evitándole el resto del día, por lo que el sentimiento de derrota y tristeza inundó la cabeza de Ichika durante el resto de la jornada escolar.

– Oye… –. Una de las chicas de la clase se acercó a su pupitre.
– ¿Estás bien?

– S-si, no te preocupes–. Tranquilizó a la desconocida con una sonrisa.
–¿Puedo ayudarte en algo?