Itinerario

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Era mi segunda noche en Castina, las luces ya estaban apagadas, sólo quedaban en pie los caballeros en su turno de vigilia, incluso Lien ya se había ido a dormir, mientras que yo me encontraba en el balcón de la habitación. La noche era hermosa, el cielo resplandecía lleno de estrellas, era un cielo que jamás pude conocer en mi mundo anterior, aunque jamás me preocupé por ver un cielo de noche, por lo que el encantamiento era mayor aún; corría una brisa fresca pero no sentía frío, y el único sonido que había eran algunas risas y voces lejanas de los caballeros que hacían guardia.

Aristia... Quizás sea muy pronto para averiguar de su estado, pero al menos la primera etapa había sido cumplida. Jieun es lo mismo, sin siquiera haberlo planeado, positivamente todo marchó a la perfección, al menos generé en ella un poco más de confianza por lo que podré mantenerla lejos de cualquier ataque del duque, sin embargo....aún me quedaba la pieza más importante de este tablero de ajedrez: Ruvellis.
Aún queda mucho que pensar, lamentablemente no puedo quedarme ajena a él puesto que es la pieza principal en este destino, Aristia ya está lejos de sufrir en sus manos, Jieun está por el momento de mi lado, pero Ruvellis está en el aire, más cerca del duque, y por lo visto me será demasiado difícil llegar a él con el carácter del demonio que dicen que tiene...¡Tch....ya su persona me es polémica en mi vida y más encima debo hacer algo por él...!.
Por otro lado...podría usar la misma reflexión que usé con Jieun para él...pero era imposible, simplemente es diferente.... Jieun no es mala por sí misma, pero Ruvellis es todo lo que me imaginé...por lo mismo, no podría quitarme la mala imagen que había formado en mi mente de él, después de todo..si intervengo alejándolo del duque, ¿qué tan diferente sería su vida?...
No sería envenenado por lo que su mal carácter no pasaría a rayar en la locura, pero seguiría siendo un emperador frívolo para con su pueblo, seguiría tratando mal a quién le diga algo a Jieun o su arrogancia seguiría.... simplemente el Ruvellis de la segunda vida tuvo suerte por alejarse desde temprano del duque, pero el actual ya es un "árbol torcido".

No fue mucho lo que pude pensar al respecto de Ruvellis, quizás lo dejaría al último..no me podía imaginar un buen plan para él más que mantenerlo lo más lejos posible de mi vista. Finalmente regresé a la habitación para acomodarme en la cama, a decir verdad, esta era la mejor parte del día, en especial por lo cómoda que era la cama.

Un nuevo día alumbraba por los ventanales de la habitación, aún no brillaba una pizca de luz solar, pero ya el claro del amanecer había proporcionado un poco de luminocidad a la habitación. No sentía ruido aunque de seguro Lien ya debía estar en pie, por lo que no tenía caso seguir quedándome en cama, por un lado tenía cosas que hacer aquí, pero no por ello significaba que no podía aprender algunas cosas de Castina.
El día de hoy me sentía más parte de Castina, de hecho tengo intenciones de aprender más sobre su idiosincrasia, por lo que en algún momento quiero aprender tanto que mis modales sean los adecuados para combinar con el palacio.
Supongo que al no saber por cuánto tiempo viviré en Castina puedo dedicarme a otras actividades para recrearme también, obviamente sin olvidarme por completo de mis asuntos, sólo que estaba comenzando a considerar que no me servía de mucho pasar cada segundo pensando en qué hacer para llevar a cabo mi misión...


Me senté en el respaldo de la cama, me estiré y respiré profundamente, en cuanto puse un pie fuera de la cama Lien llegó para ayudarme con mis arreglos.

"Buenos días señorita, ¿cómo estuvo su noche?"

"Buenos días Lien, más tranquila, creo que ya me estoy adaptando."

"Me alegra oír eso, bueno prepararé el baño así yo podré encargarme de su atuendo del día."

"Muchas gracias Lien, aunque esta vez...¿podría ser más simple mi vestimenta?."

"Ji ji ji, está bien, veré qué puedo hacer."

La habitación se había alumbrado un poco más, el sol ya estaba comenzando a salir, el día de hoy me sentía muy tranquila, la sensación era como si ya estuviera acostumbrada a la "rutina diaria" y ya supiera como vivir aquí, algo muy gracioso a la vez porque ni siquiera tenía una rutina, y tampoco pertenecía a este mundo, aún así, si me dejaba llevar por la sensación, me sentía en paz.
El calor del agua abrazó todo mi cuerpo, y el aroma de rosas se esparció por toda la habitación, hoy el baño era aún más relajante y satisfactorio. Aún así, nuevamente un mar de pensamientos venían a mí... "si acabara con el duque ¿significaría que ya nada intervendría en los destinos de estas personas y mi misión habría sido cumplida?, ¿dónde estará la autora? ni siquiera he salido de los dominios del palacio como para poder investigar acerca de ella...sin embargo, si una chica extraña a este mundo hubiese aparecido ya me habría enterado porque seríamos tres personas de un mundo diferente, ¿entonces cómo es posible que nadie sepa que hay otra forastera? ¿acaso Vita habrá hecho algo para mantenerla oculta?...y ¿si quizás está en el templo?"...
Donde fuese que estuviera, mi deseo era que se encontrara bien, por otro lado, Vita me dijo que ella conocía muy bien Castina ya que él le relató la vida de estas personas, quizás no se note que viene de otro mundo porque sabe cómo ser un ciudadano, tampoco creo que esté viviendo en malas condiciones puesto que era su niña bendita también... aunque si es su niña bendita ¿tendrá algún poder en este mundo?, y ¿si la revivió aquí será porque tiene algún destino que cumplir? después de todo su vida acabó en mi mundo, a menos que Vita supiera que yo llegaría a estas condiciones, no creo que sólo la haya traído para vivir una vida tranquila en un mundo que en un futuro podría volcarse en caos si es dominado por Jenna.

Reencarné en la historia que odio (Fanfic Emperatriz Abandonada)Where stories live. Discover now