La carta y la...

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Después de que Hades hubiera estado insistiendo el resto del día para que fuera al hospital (al que no fui) por fin pude salir de casa para quedar con Emily y sus amigos (Esta vez sin Kian) necesitaba desconectar un poco. Fuimos a pasar la tarde al centro comercial, me compré alguna cosa de ropa pero sobre todo libros.

Cuando llegue a casa fui a buscar a Hades, no lo encontraba por ninguna parte, así que decidí subir a su cuarto como último recurso. Al abrir la puerta estaba todo oscuro, a lo mejor estaba durmiendo ya, me acerqué a la cama pero estaba vacía, me di la vuelta para salir del cuarto pero vi algo brillante en el armario, se que no debería hacerlo pero me tenía que acercar a ver que era, tengo derecho, puedo estar en peligro por culpa de Hades. Había un papel encima del objeto que brillaba, lo cogí, era una nota. 


Querido Hades, 

Sabes perfectamente quien soy no hace falta que me presente, me debes algo y llevas un tiempo de retraso, ten cuidado no te tomes estas confianzas espero que rectifiques y aportes tu parte a tiempo, tienes hasta el 28 de este mes. Sabes que si no lo cumples empezaré por tus padres y después por la chica que vive en tu casa.

Saludos cordiales, CT.


Al levantar la mirada de la carta pude identificar el objeto, era una pistola. No podía moverme el miedo me recorría todo el cuerpo y en ese momento estalle, empecé a derramar lágrimas no podía parar, como me había metido en este problema, en que momento mis padres decidieron traerme aquí, este iba a ser mi fin, asesinada por culpa del niño al que cuido. Todo se paralizó cuando escuche un ruido, alguien subiendo por las escaleras, me sacó de mis pensamientos y si era el mismo que el de la nota, si pudo dejar esto aquí, puede volver a entrar.

Sin pensarlo cogí la pistola y apunté a la puerta.

Cada vez se escuchaban los pasos más cerca a medida que mis manos temblaban más. Al oír un último paso quede paralizada con los ojos abiertos y la pistola apuntando hacia la puerta, el pomo empezó a girarse y descargas eléctricas me recorrieron el cuerpo hasta que la puerta se abrió y ahí estaba.

- ¡Clara! ¿Qué haces con eso?

Hades se acercó corriendo y me quitó la pistola de las manos.

- ¿Estás bien? ¿Te ha pasado algo?

En ese momento no podía hablar, simplemente le acerqué la carta.

El la cogió ya medida que iba leyendo apretaba la mandíbula. Cuando acabo levantando la cabeza despegando sus ojos del texto que le acababa de entregar y posó sus ojos sobre mí.

- ¿Dónde estaba esto? -Su voz era neutra no había ni una pizca de sentimiento en ella, ni preocupación, ni tristeza, ni miedo, ni ira.

Señale el armario donde había encontrado la pistola y la carta. Después de rebuscar en el armario se sentó a mi lado.

- ¿La pistola estaba con la carta?

Asiento con la cabeza.

- ¿Puedes contarme qué ha pasado? -Su voz era delicada.

-Cuando llegue a casa te busque y no estabas por ningún lado asique supuse que estabas aquí pero cuando subí no había nadie y antes de irme vi la pistola y esa...- empecé a llorar no lo podía evitar.

Hades se acercó a mí y me rodeó con sus brazos haciendo que me sintiera mejor.

-Ya está no te preocupes seguro que es una broma de alguien para darnos miedo- Sabía que era mentira y que algo malo pasaba, pero ahora no era el momento de discutir.

-Clara solo te pido que no te preocupes que nada malo te va a pasar – y después me dio dos besos en la frente.

Hades se levantó y me dio su mano para ayudarme y ponerme de pie a su lado.

- ¿Hades crees que tus padres estén bien? -Hades se paró y clavó su mirada en un punto de la habitación.

-Pues no he hablado con ellos estos días, no me he dado cuenta con todo el lío que tengo en el gimnasio.

- ¿En el gimnasio?

-Sí estoy organizando unas peleas.

- ¿Pero tus peleas?

-Princesa si te dije que hago boxeo no creerás que solo pego puñetazos a un saco.

-y ¿Me dejarías ir a verte? -No entiendo en qué momento se me ha ocurrido preguntar eso.

-Pues claro, pero no te va a gustar contra quien peleo.

- ¿Por?

-Porque es tu querido amiguito Kian.

-Y ¿Por qué peleas contra él, no había nadie más?- Replicó de mala gana.

-Pues veras después de que Kian te trajera a casa y me peleara con él.

-Y tu escenita de celos- Puntualizo.

-No eran celos solo te intento proteger.

-Claro.

-Bueno pues estaba muy enfadado y le dije que lo arreglaríamos en una pelea. -Al menos se podía percibir un tono de vergüenza en su voz.

- ¿Todo lo tenéis que arreglar con la fuerza?

-Es la mejor manera. -Y estalló en risas supongo por la cara que le había puesto.

-No me hace gracia Hades.

-No te preocupes, no me pasará nada malo.

- ¿Y a Kian?

-Por eso ni te preocupes tendrá su merecido.

- ¡Hades!

-Es la verdad. Oye si quieres puedes venir mañana por la tarde a recogerme al gimnasio y ves lo bien que peleó.

-Qué egocéntrico eres.

- ¿Vendrás o no?

-Sí, tengo ganas de ver como te patean el culo.

-Sigue soñando princesa y no te preocupes por lo de la nota mi padre es una persona muy importante y suelen pasar estas cosas. -Y se fue dándome un beso en la mejilla.

Fui a la ducha para despejarme, no sé si esta noche podré dormir. Al salir del cuarto de baño me encontré a Hades sentado en mi cama ojeando uno de mis libros.

-¿Qué haces aquí?- Le pregunto.

-Ah, pues era para decirte que he estado hablando con mis padres y que están muy bien, les he comentado lo que ha pasado y pondrán más seguridad en casa así que puedes estar tranquila.-Después de decir eso sale de la habitación y cierra la puerta.

-Muchas gracias.

Me tumbo en la cama y consigo dormir gracias a lo que me ha dicho Hades, estoy u  poco más tranquila ahora que sus padres saben lo que esta pasando.


Gracias a todos por leer esta historia y me ayudarías mucho si votáis el capítulo❤️❤️

LA CHICA DE HIELOWhere stories live. Discover now