HOLA, ADIÓS / Louis Partridge

Caminos distintos

Volvimos entonces a la casa de mi abuelo, tomados de la mano, como siempre habíamos querido. Sin ocultarnos de nadie, ser completamente libres. Dejándonos llevar.

Esta vez, iríamos contra todas las adversidades. Éramos dos locos que se querían con todo el corazón.

Cuando llegamos, fue algo difícil de procesar, pero al final todo salió bien. Mi abuelo lo tomó de la mejor manera y nos dijo que estaba orgulloso de las personas en las que nos habíamos convertido. Aunque, una parte de mi aún debería esforzarse por mejorar.

También hablamos sobre los cambios que se dieron durante el tiempo que es estuve lejos. Al parecer Minerva se casó con Fred. El tonto al fin se le había declarado, fue algo que me alegró mucho. Sin embargo, muchas de las personas que nos han acompañado, dejaron de trabajar en la casa, así que ahora solo quedaban unos cuantos. 

Hablamos también sobre Louis, nunca fue a Juilliard, decidió aprender por su cuenta y consiguió grandes ofertas que le cambiaron la vida por completo. 

- Fue solo suerte. Dijo él

-Tonterías. Respondió mi abuelo. - Conseguiste todo eso con tu esfuerzo.

-Lo hiciste muy bien, estoy orgullosa de ti. Dije haciendo que él se sonrojara.

Otra de nuestras conversaciones largas, fueron sobre mis amigos. ¿Que tanto había pasado desde que me fui? Al parecer, cada uno había seguido su propio camino, aunque eso no significaba que se había separado.

Mi querida Meiv estaba estudiando medicina y se encontraban fuera del país. Noah, el mejor amigo de Louis, estaba de vacaciones con su novia en Italia, además hace poco se había graduado en leyes y sí, él y Meiv terminaron. Sin embargo, aún seguían en contacto, como amigos, claro. Oliver, por su lado, no se había tomado la molestia de estudiar algo, él tenía dinero de sus padres y por razones obvias lo iba a aprovechar, ahora viaja por doquier, disfrutando de su vida de lujos. Y por último, Nate, ese chico que fue la persona más directa y descarada conmigo, en el buen sentido, estaba ahora también fuera del país. Él se estaba trabajando en la empresa de su familia y era una persona muy ocupada.

Aún recordaba cada momento que pasé con ellos, las charlas con Meiv y las reuniones en la cafetería con todos lo chicos. Aquellas discusiones que existieron, ya permanecieron en el olvido. Ahora Nate y Louis se llevaban muy bien, eso hizo que su grupo se vuelva juntar. Eran ellos otra vez. Cambiaron muchas cosas y sobre todo, cambiamos nosotros.

- Será muy bueno para ellos saber que estás aquí. Dijo Louis con una sonrisa.

- Tengo muchas ganas de verlos, sin embargo, ha pasado mucho tiempo y siento que sería raro.

- No digas eso, que seamos adultos no significa que te hayamos olvidado, a todos nos dolió mucho tu partida.

- Y mi me dolió irme. Dije con la voz entrecortada. - Pero ahora con tantas obligaciones, creo que será difícil vernos.

- Lo diré siempre, crecer no es fácil. Dijo Louis con un suspiro.

- Es parte de la vida, ocurre tarde o temprano. Respondí.

- Lo sé, el pasar del tiempo es una locura, a veces me pregunto que hubiera pasado si todo hubiera seguido su curso tranquilamente, sin obstáculos ni grandes abismos.

- Quizás, nada de lo que hemos logrado hasta ahora, estuviese en nuestras vidas. Creo que las cosas pasan, porque así debe ser.

- A pesar de todo, me alegra que haya sido así. Dijo mirándome.

-¿A pesar de todo lo que tuvimos que pasar?

Él asintió. -Llegamos para el otro, en el momento indicado, quizás eso fue mucho antes, pero ahora estamos con una versión más madura de nosotros y estoy seguro que esto nos ayudará a seguir en línea recta.

Ambos nos quedamos en silencio. Yo me es posible sentada en un sofá y él se paró del suyo, para ir por detrás de mi y darme un cálido abrazo. "Tengo miedo" Susurró. "Pero sé que pase lo que pase, donde sea que te encuentres, tu y yo estaremos juntos".