Capítulo 19

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Busan, Corea. 2016.


El gran salón principal estaba adornado de globos plateados y dorados por todo el lugar. El olor a pastel y caramelos venía desde la cocina.

Había un enorme letrero hecho con globos dorados de helio.


"Feliz cumpleaños Taeyang"


Era el primer año que se celebraba su nacimiento (independiente que con que formalmente se le aumenta en el momento de nacer en Corea). Había cientos de personas en el lugar, unos cuantos niños jugando en el enorme patio de juegos que daba hacia una playa.

El clima era aun un poco frío, ya que era enero.

La omega revisaba por última vez su peinado y acomodaba sus aretes, por ultimo tratando de abrochar su collar de perlas.

— Tae, ¿Me ayudas? — preguntó mirándolo por el enorme espejo.

El alfa dejó de mirar su teléfono y se levantó. Caminó hasta donde ella estaba y se detuvo detrás de ella; Somin sostuvo su cabello hacia arriba y Taehyung con cuidado sostuvo los pequeños broches, hasta que los unió.

— Listo.

— Gracias.

Taehyung se convirtió en una persona más vanidosa debido al contacto con los medios de comunicación con los que tenía que convivir regularmente debido a los padres de su esposa.

— ¿Tu madre vendrá? — preguntó el alfa.

— No creo — dijo soltando un suspiro — Debe estar muy ocupada grabando su nuevo drama — dijo haciendo ademanes con las manos.

Se alejó del espejo y le miró.

— ¿Qué? — preguntó ella.

— Nada. Te vez muy hermosa — dijo el alfa mirándola en su vestido negro pegado a todo su cuerpo.

— Siempre, siempre — dijo en tono de burla.

Se acercó al alfa quien estaba de nuevo sentado en el sofá redondo blanco. Taehyung abrió las piernas y ella se puso en medio para abrazarlo por sus hombros y el alfa por su delgada cintura. Alzó su rostro, haciendo sus labios un mohín para recibir un beso, ella se rió y puso su mano encima de ellos.

— Traigo labial rojo. Se embarrará.

— No importa.

Con algunos movimientos hizo que ella se quedara sentada encima de sus piernas y le robó un beso. Somin le devolvió un beso lento y luego se separó.

Fue rápido por unos pañuelos y limpió la comisadura de sus labios y luego los del alfa que habían tomado un tono ligeramente rojo debido al labial.

— ¿No quieres que me vean así? — preguntó el alfa.

Papá necesita un omegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora