Nunca Lo Imaginé ||Libro 3|| Trilogía Nunca ✔

Capítulo 45: Nunca lo imaginé.

–¿Algo bueno? –se mofa Logan –¡Es la maldita escolta! Ella será la pieza más importante en el juego, sin ella ninguna de las otras niñas sabría qué hacer.

Rio por el comentario de Logan y unos padres nos miran con el ceño fruncido, dejo de reír y me siento apenada, pero Logan no parece apenado por nada y menos por tirarle flores a Isy. Emma y él comienzan una discusión que no tiene sentido alguno, a pesar que han pasado tantos años ellos siguen con este rollo extraño, ni siquiera por ser padre Logan ha madurado y Emma, bueno, ella continua con su vida como siempre. Esta soltera y conociendo hombres nuevos cada noche.

Maldigo cuando caigo en cuenta de lo importante que es este partido para Isobel. Ahora entiendo porque esta mañana nos recordó mil veces sobre el partido, recalcando que era un partido muy importante y realmente es importante. Isobel consiguió ocupar la misma posición que su padre, ella comenzó como base y eso alegro mucho a Ross, pero Isobel siempre dijo que jugaría en la misma posición que su padre y ahora lo ha conseguido, solo que Ross no la vera.

Veo a Isobel mirando la entrada de la cancha, sé que está esperando la llegada de su padre y me rompe el corazón saber que él no vendrá. Tomo mi teléfono del bolsillo trasero de mis vaqueros y marco el número de Ross, le pido a Emma que cargue a Emett y ella lo hace con duda. Bajo las gradas para poder escuchar mejor cuando Ross me responda, pero me envía directo a buzón, maldigo y esta vez marco al número de Francis. Ella me responde en el segundo tono.

–Debes decirle a Ross que me llame enseguida –me apresuro a decirle.

–El señor Gring está en medio de una...

–Interrumpe lo que sea que esté haciendo y dile que me llame urgentemente –hablo con desesperación –, esto es de extremadamente urgente.

Cuelgo la llamada y miro a mi pequeña, ella está concentrada escuchado todo lo que le dice su entrenadora y cuando se acomodan en la cancha recibo la llamada de Ross.

–¿Qué paso? –su tono destila preocupación –¿Le paso algo a mi pequeña Bell?

–Debes venir al partido.

–¿Qué dices? –inquiere y su tono cambia por completo. Escucho cerrarse una puerta y Ross suelta una exhalación –Annie no puedo dejar la reunión...

–Ross si no vienes a este partido tendrás que buscar en dormir en los próximos días –le advierto.

–Annie esta mañana quedamos en algo –me recuerda –, esta reunión es importante para la empresa y no puedo dejar a estas personas aquí por ir al partido de nuestra hija.

–Ella jugara como escolta –Ross suelta un impropio y se lo que está sintiendo –, debes venir.

Ross me pide un minuto y corta la llamada, el árbitro del partido está hablando con las entrenadoras e Isobel una vez más mira a las puertas, pero al verme a mí sabe que su padre no vendrá y su cara se transforma, lo que hace que mi corazón se estruja más. Cuando el silbato suena y el partido comienza mi teléfono suena en mi mano, lo contesto enseguida y Ross me pide que hagamos videollamada para que él pueda ver el partido, vuelvo a mi sitio y comienzo con la llamada.

El partido termina y al equipo de Isobel no le fue nada bien, hubo una gran diferencia de puntos y todos sabemos que ahora el genio de mi pequeña no será nada bueno, a ella no le gusta perder y si a eso le sumo la ausencia de su padre nada saldrá bien ahora. Logan continua gritando a favor de mi pequeña, pero ella ni siquiera lo mira y Emma golpea la cabeza de Logan para que guarde silencio, luego le devuelve a su hijo y le arrebata la pancarta de las manos para romperla. Cuando Logan intenta quejarse Emma le advierte que lo mejor será que se mantenga callado y se ocupe de su hijo.