| ADVERTENCIA: smut |
Después de lo ocurrido en Endgame, nadie es igual, especialmente Heather Potts, cuya vida dará un giro completo al regresar del Chasquido y darse cuenta que sus padres han muerto.
Asistir a una secundaria llena de idiotas y...
(n/a: italics significa español... y hay smut 7u7 )
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Nasáu, Bahamas, Islas del Caribe
—Agárrate fuerte.
—¡Peter, no!
Llevaban una hora ahí y lo primero que a Peter se le ocurrió que hicieran fue subirse a una moto de agua e ir a ver a los famosos cerdos nadadores.
—Creo que los veo.
—Ve más lento, los vas a atropellar.—exclamó Heather asustada y se agarró más fuerte de su torso.
—Tranquila, ya sé donde estacionarme.
En medio mar, había una pequeña cabaña y el señor que los esperaba levantó sus brazos llamándolos. Peter se detuvo lo más cerca posible y el señor los ayudó a bajarse.
—¿Señor y señora Parker?
Peter asintió y miró pícaramente a su novia, quien rodó los ojos divertida. Era obvio que tan sólo eran adolescentes, pero el castaño los registró como casados.
—Muy pronto estará el almuerzo, pueden tomar asiento.—indicó el señor.
Dentro de la cabaña había una elegante mesa y una puerta que llevaba a una cocina.
—¿Podemos ver a los cerdos primero?—preguntó Peter como un niño chiquito.
—Claro. Puede bajar por esa escalera.—señaló.
Peter corrió al agua a acariciar a los cerdos.—Aww, ven a verlos, amor.
—Ehm, estoy bien aquí.—respondió Heather viendo asustada a los gigantes animales.
—Son inofensivos.—animó el señor.
Heather suspiró y bajó lentamente las escaleras. Apenas la vieron, los cerdos nadaron hacia ella.
—Peter.—llamó con voz temblorosa mientras nadaba lo más lejos de los animales.—Ayúdame.
—Les agradas.—dijo el castaño, sin moverse.
Como si le pudiera entender, un cerdo hizo oinc.
—Aww, así ronca Ned.—bromeó, pero ella no rió, pues los animales no dejaban de seguirla.
—Peter.—insistió. Estaba muy lejos de la escalera y no tenía a donde huir.
El chico se sumergió y nadó hacia ella. La cargó, dejando que rodeara sus piernas en su torso.
—Shoo, shoo.—le dijo suavemente a los cerdos, quienes se fueron tranquilos. Abrazó a su novia y le dio un beso en la nariz.—Te salvé.
