Capítulo 55.

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"Todo paso tan... rápido"

*****

Un mes después. 

¿A donde quieres ir hoy, Emma? Me preguntó Aleth con una sonrisa en su rostro. Poco a poco abrí mis ojos, sus palabras me habían despertado.

Pues... Me puse a pensar unos segundos. Veamos una película ofrecí y él sintió gustoso de la idea.

Lo que tu quieras princesa besó mi frente, me quité las cobija de encima y estiré mis brazos. Quedé frente a él, mire su rostro así como él miro el mio. Poco a poco comenzo a acercarse a mi rostro, en ese momento deseaba besarme y lo había notado, cuando sus labios estaban a punto de tocar los mios voltee el rostro sin pensarlo. Bajo su mirada y me miro desepsionado Nos vemos en la noche, nos encontramos en el campus indicó, yo asenti de acuerdo con su idea. 

  Aleth y yo estabamos juntos hace unas semanas aproximadamente, la realidad es que no quise llevar la cuenta. Aún recuerdo las veces que caminaba por los pasillos, intentaba fijar mi mirada en el suelo para no encontrarme con la de Zeth. Es inútil que solo este junto a Aleth por despecho, por lastima de que él me ame. Desde que Zeth y yo terminamos las cosas no son iguales a como eran antes, me sentia... ¿enferma? No tenía ánimos de salir del dormitorio, no queria ir a clases porque sabia que alli estaria el... mirandome fijamente sin detenerse. Lo hacia siempre, entrabamos a clases y como de costumbre yo me dirigia hasta el ultimo y mas apartado puesto. El se sentaba un poco cerca, recostaba su cabeza a su mano y me miraba. Cuando caminaba por los pasillos, alli estaba el, recostado en algun casillero observandome. 

 No le había comentado a Aleth eso, sabía que le molestaría y sería capaz de ir a buscar a Zeth para reclamarle. No quería eso. Desde la vez en que entre sin tocar en la habitación de Zeth, jamás lo volví a ver cerca de Mar. La evade por completo y no se porque no hacía eso cuando estaba junto a mi. 

Emma, ¿Qué haces alli tirada? preguntó Breanna, soltó una carcajada. Mire a mis lados, estaba acostada en el piso. No se cuando lo hice, pero allí estaba. 

No tengo idea confese. Me levante del suelo, arrastre mis pies hasta el bano para darme una rapida ducha. 

*Flashback* 

Sólo mirame a los ojos y dime que ya no me amas Desviee mi mirada de la suya, sabía que lo amaba en el fondo y no quería alejarme de él. Pero me costaba admitir que era lo mejor. 

Yo amo a... susurré. Él estaba atento, su mirada era triste y sincera en aquel momento. Me arme de valentia para mirarle sin temor.Amo a Aleth mentí.

Eso es todo contestó con la voz ronca, carraspeo incómodo y me dejo sola en el pasillo. Espere a que se fuera y corrí hasta el baño, me deslicé por la pared y caí sentada. Comencé a llorar, el baño estaba silencioso y lo único que se escuchaban eran mis sollozos. 

¡Emma! escuché a Breanna gritar, Entró corriendo al baño, se acercó hasta a mi y se sento a mi lado. Cubría mi rostro con mis manos, ella las aparto y limpió mis mejillas. ¿Lloras por el... cierto? 

Le mentí... le dije que no lo amaba porque simplemente es lo mejor...  confesé y continue con mi llanto, era imposible parar, llevaba tiempo sufriendo y prohibiendole el paso a las lagrimas. 

*Fin del Flashback* 

 Me puse mis jeans negros favoritos y una playera blanca de tiros. Hacia un calor terrible y no queria usar alguna camiseta con mangas largas o cenida al cuerpo. Mire mis rostro en el espejo, estaba palido como siempre, no apetecia maquillarme mucho asi que solo me coloque un poco de la labial.

¿A donde iras? preguntó Breanna. 

Iré a ver una pelicula con Aleth, nos vemos Le avisé, ella se quedo recostada en su cama leyendo uno de sus tantos libros. 

 Baje las escaleras y salí del edificio hasta llegar al campus, me sente en una banca para esperar a Aleth. Pasaron algunos minutos y él aún no aparecia, quizás se le había hecho tarde y aún estaba arreglandose, bueno, los hombres sólo se colocan su ropa, peinan su cabello y listo. No tardan mucho tiempo como las chicas. Saqué mi teléfono de la pequeña cartera negra que había escogido, mire la pantalla y en unos minutos darían las ocho, no me parecía buena idea que estuviera sola a esa hora. Sacudí mi pantalón y me levanté, iría hasta la habitación de Aleth para buscarlo. 

 Caminé hasta su edificio, no estaba tan lejos de donde yo estaba sentada. Al llegar los pasillos estaban solitarios, todos estaban ya encerrados en sus habitaciones o habían decidido salir de la universidad a la ciudad. Estaba pensativa asi que olvide por completo cual era la habitación de Aleth y por impulso me dirigi a la de Zeth. Al llegar a su pasillo vi que él estaba recostado a la pared conversando entretenidamente con Mar, ella sonrió y pestañeaba sin parar, acercó su cuerpo al de él insinuandose. Me di la vuelta, otra vez se me hacía dificil bloquear las lagrimas. Era terca, volví a asomar mi cabeza para ver que hacían, Mar estaba de espaldas, Zeth se dio cuenta de que estaba allí asomada viendo todo, nuestras miradas se encontraron de golpe. Lo miré con temor, por instinto negué con la cabeza y comence a correr para alejarme de allí. Me había engañado de nuevo, ellos aun seguían viendose.

¡Emma! La voz de Zeth se hizo escuchar por el pasillo. No pare de correr, ignoré su voz furiosa y llegue al campus, me sente en una banca y me senté en ella, subí las piernas y las puse contra mi pecho acurrucandome. Llore como quería hacerlo, nuevamente estaba destruída. Cada vez que veía a Zeth mirarme, cada vez que veía a Zeth con otra chica que no era yo, cada vez que estaba con Aleth he imaginaba que era Zeth, no podía evitar llorar.

一Hey Emma 一habló Aleth acercándose a donde estaba. No quería que me viera en ese estado y se enterará de que lloraba por Zeth y no por él. Voltee mi rostro en otra dirección y aproveche para limpiar las lágrimas, aunque mis ojos y nariz aún seguían hinchados. 一¿Qué tienes? 一preguntó preocupado.

Carraspee. 一¿No te ha pasado que tienes una mala noche y duermes pésimo? 一Le pregunté, hice un esfuerzo para reírme y que pareciera real.

一Me ha pasado 一sonrió y luego entrelazo mi mano con la suya. Caminamos en dirección al estacionamiento donde estaba su coche, al llegar nos montamos en completo silencio. Si tenía suerte creería lo que le había inventado.

Al llegar a la ciudad nos dirigimos primero a un restaurante, ambos entramos y nos sentamos en una mesa cercana a la cocina. Igual que cuando tuvimos la "cita" donde perdí el reto.

一Espera un momento, dejé mi celular en el coche 一avisé y él asintió de acuerdo. Sacó de su bolsillo la llave del coche y me las entregó. Caminé, al llegar todo estaba solitario, ningún coche transitaba las calles y ya el sol se había escondido.

Es bueno encontrate aqui, me ahorraste el trabajo. Senti el aliento de aquella voz en mi cuello. Le di un fuerte golpe en su barriga con mi codo, comencé a correr para entrar al restaurante. Aleth no prestaba atención a la escena, estaba concentrado en su celular. Cuando entré al negocio todos me miraban asustados, Lance en ningún momento se detuvo.

一¡Aleth, ayudame! 一grité pero el lo ignoró. Parecía estar en un trance, miraba a Lance fijamente sin hacer caso a mis palabras. Las personas del negocio no eran capaz de gritar o siquiera ayudarme, parecían temer de él.

Intenté gritar nuevamente pero se me hizo imposible ya que él acercó aquél trapo sucio a mi rostro. Sentí mi cuerpo pesarme, empecé a marearme y mis ojos comenzaron a cerrarse. No sabes lo que te espera chica depósito un frío beso en mi cuello. Eso fue lo último que sentí. 

Abrí mis ojos y comencé a gritar. 一¡Auxilio! Maldita sea, ¡Alguien que me ayude! 一Estaba encerrada en el maletero de un auto que seguía en movimiento, no podía moverme mucho ya que el espacio era poco. Cerré mis ojos con fuerzas y sólo deseaba que Zeth estuviera ahí para protegerme.

Indecente (libro 1)Where stories live. Discover now