Capítulo 7.

11.1K 439 5
                                    

Su mirada me mataba de segundo en segundo. No pude darme cuenta cuando me había perdido en esa galaxia de infinita felicidad que sus ojos eran capaces de mostrarme.
¿Para qué mentir? Lo único que quería era permanecer a su lado el resto de mi vida, pero no era posible; no ahora que Harry había hecho que todo el mundo cayera en mis hombros.
-Por favor, levántate-reí nerviosa.
-Oh, sí-reaccionó al darse cuenta de que llevábamos así más de cinco minutos.
Acomodé mi cabello y mi polera al momento en que Niall observaba cada uno de mis movimientos. ¿Éste no se cansaba de ponerme nerviosa? Lo contemplé durante varios segundos antes de volver a salir de la habitación, pero justo antes de correr escaleras abajo, la melódica voz de Niall pronunciando mi nombre hizo que me devolviera.
-¿Qué ocurre?-pregunté.
-¿Qué hizo Harry?-insistió serio; al parecer, no se rendiría.
-No hizo nada, Niall-golpeé su hombro con delicadeza.
-Por favor, ______. ¿Para qué mentir?
-¿Y para qué saberlo?-contraataqué.
-Porque...-suspiró-. Conozco a Harry, y sé que algo pasó. ¿Acaso no puedo preguntar?
-No... no es eso-alcé los brazos y caminé unos pasos más cerca de él-. Niall, no es importante lo que Harry hizo.
-Te besó, ¿cierto?
Bajé mi vista inconscientemente y noté cómo los pasos de Niall avanzaban en dirección a la escalera. ¡Por favor! Digo, no es algo que debería ponerlo así. Bajé en su búsqueda y lo hallé cruzando la puerta.
-Niall, ¿qué pasa?-lo jalé de la muñeca, provocando que su agitada respiración se adentrara en mí.
-Nada. No tiene porqué pasarme algo-sonrió fingidamente; lo conocía más de lo que creía.
-¿Y por qué ahora estás así?
-¿Así cómo? ¡Estoy perfecto!
-¿Seguro?-alcé una ceja.
Soltó el suspiro más grande que había escuchado, tanto así, que cerró los ojos al momento de hacerlo. Me encantaba cada una de sus expresiones. ¿Era posible enamorarme así de rápido? Al parecer, sí.
-Seguro-afirmó al fin.
-¿Amigos?-extendí mi mano.
-Amigos-estrechó su mano con la mía, provocando que, nuevamente, millones de sensaciones me recorrieran entera.
Volví a cerrar la puerta justo antes de que comenzáramos a avanzar lentamente, tal y como dos pequeños disfrutando de lo que el verano traía para nosotros.
De vez en cuando lo miraba de reojo, ¿y qué me encontraba? al mismísimo Niall mirándome a mí. Sonreíamos como dos idiotas y clavábamos la vista al frente otra vez.
-Se me hizo extremadamente corto el viaje-susurré antes de abrir la puerta de la casa de mi mejor amigo.
-A mí también-murmuró-. Tenemos mucho en común.
Le sonreí con la mirada más risueña del mundo, y es que éste chico era capaz de hacerme sonreír con todo lo que llegara a salir de sus labios. Era increíble la forma en la que hacía latir mi corazón con sólo regalarme una de sus miles de palabras.

Honey Kisses |horan|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora