Capítulo 14.

9.3K 345 22
                                    

... Lo vi otra vez. Su sonrisa no era capaz de borrarse de su rostro, pero notaba cómo sus ojos estaban hinchados y algo rojos. Me sentía tan culpable... Me puse de pie para observarlo mejor, aunque mis piernas volverían a caer en cualquier momento gracias a ese aroma de su perfume que me seducía por completo.
-Niall...-susurré.
-______, debemos hablar-tomó mis manos entre las suyas.
-¿Es grave?-mordí mi labio inferior.
-No lo es... No para mí, al menos. ¿Te parece si vamos a caminar?
-Está bien-asentí mientras su mano se entrelazaba con la mía y me guiaba hacia la nada.
Todo en mí cambiaba. Mi vista quería volver a clavarse en él, pero simplemente no podía. No podía volver a mirarlo como si nada, si antes había besado a su amigo... o ex amigo. Mis nervios salían al aire en una risita casi invisible, pero que él lograba captar, y mi corazón estaba a punto de salirse de mi pecho.
-¿Qué ocurre?-me atreví a preguntar.
-¿Es cierto lo que me dijiste en la mañana?
-¿Qué cosa?-lo miré, fingiendo ingenuidad.
-Lo que conversamos en el auto.
-¿Sobre si tú...?-dejé de caminar y me adelanté a sus pasos, quedando a escasos centímetros de distancia. Él asintió totalmente ansioso-. La verdad, Niall, es que ... 
-Te amo-dijimos al unísono.
Lo miré con total incredulidad, pero alegría infinita a la vez. Eran palabras grandes, pero no tanto como todo lo que yo sentía por Nialler. Mi Niall Horan.
No tuve tiempo siquiera para pensar, pues sus manos me acorralaron por la cintura rápidamente, y sus labios capturaron los míos con total facilidad. Y no lo creía. Mi labios eran rehenes de los delicados y perfectos labios de Niall. Todo al rededor sobraba. Todo lo que sentía eran sus labios jugando con los míos de una manera especial... distinta... hermosa.
Nos separamos en una tímida sonrisa por parte de ambos, pero que no duró mucho, pues mis manos se aferraron a su cuello y sus labios volvieron a mí. Sus besos se volvían más apasionados y salvajes, pero sin quitar ese toque de delicadeza que sólo él podría darle a todo lo que hace. Mordí su labio inferior y ambos sonreímos sin separarnos justo antes de que sus besos volvieran a atacar mis húmedos labios.
-Niall...-susurré separándome.
-¿Sí?
-Te amo. Todo el tiempo en que no estuviste aquí, valió totalmente la pena, porque tú fuiste y serás el único que cambiaría mi vida de ésta forma.
-_____-susurró en mis labios.
-¿Sí?
-No quiero perderte jamás.
-Jamás lo harás. Nací para decir que te amo, Niall.
Me dedicó un fugaz beso antes de volver a tomar mi mano y seguir nuestro camino en total silencio. Pero no cualquiera, sino de esos que te llenan; de esos que te sacan mil sonrisas, porque sabes que, sin decir nada, puedes transmitirle todo a la persona que tienes al lado. Y yo podía decirle a Niall cuánto lo amaba sin siquiera hablar.
Sus labios de miel mezclado con algodón de azúcar fue lo más exquisito que alguna vez hubiera probado.

Honey Kisses |horan|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora