Intrepid || n.h. au || Español

Capitulo 25

Comprobando la dirección escrita poco clara sobre la pequeña pieza arrugada de papel, llamo a la puerta otra vez, cada vez más fuerte que la anterior. Con un suspiro echo un vistazo al número clavado en la madera; este es, apartamento 11. Ella sabe que tengo que estar aquí, esto tiene que ser una broma de algún tipo.

Suspiro de nuevo y trato de sonar el timbre una vez más, pero no funciona bien. Frustrado, trato de abrir la puerta y estoy un poco sorprendido cuando en realidad se abre. Parpadeo en el mango de metal, todavía componiéndome a mí mismo, pero luego me forzó a dar unos pasos hacia adelante, finalmente entrando en la habitación desconocida.

Ahora que lo pienso, ella estaba bastante perturbada anoche, ugh, estoy bromeando, yo no me habría sorprendido si ella hubiera tenido un derrame cerebral en el acto. No sería extraño si me escribió mal su propia dirección, no me sorprendería que un completo desconocido saliera de una de las habitaciones con un bate de béisbol.  

“Um…” murmuro a mí mismo, mirando alrededor; me doy cuenta de dos o tres chaquetas de cuero en una percha, y de botas de combate en fila a lo largo de una pared, pero todavía podría ser cualquier persona quien vive en este lugar. Ella no es la única chica que está obsesionada en lucir como un punk. “¿Freya?”

Pongo mis manos en los bolsillos de mi chaqueta, esperando algún tipo de respuesta, pero no consigo alguna. Estoy esperando a tener un sentimiento de inquietud acerca de todo esto, así que instintivamente camino a la puerta abierta más cercana, que supongo que es la sala de estar.

“¿Qué demonios?” Digo con el ceño fruncido, cuando veo a una mujer – más obviamente la que yo había llamado – sentada en el sofá. Camino alrededor del objeto negro, frunciendo el ceño aún más profundamente cuando veo que ella está allí sentada, con las piernas cruzadas delante de ella, sosteniendo un teléfono fijo en sus manos mientras ella mira al vacío, con el rostro vacío. Ella está sin duda consciente, pero no estoy seguro de que ella escuche algo de lo que digo.

Un pensamiento más aterrador se me cruza por la mente cuando pienso dos veces sobre el teléfono en sus manos y rápidamente tomo asiento a su lado. “¿Freya?” Llamo de nuevo, esta vez con mucha más cautela como puedo escanear un lado de su rostro; ahora que estoy más cerca de ella puedo ver a los pequeños detalles que no pude ver antes – cómo sus ojos rojos, ya que la luz brillante viene de fuera de una ventana, también puedo ver lo que parecen manchas de lagrimas en sus mejillas.

De cualquier manera, nada se ve bien hasta ahora. “Freya, lo que-”

“Él no ha despertado en once horas,” ella comienza, el tono ronco de su voz provoca escalofríos en mi cuerpo. “Ellos no pueden despertarlo. Él no responde al sonido, o a la luz, y cuando trataron con estímulos de dolor en él, sólo movió un dedo.”

Esto último me da un poco de esperanza, pero parece estar haciendo su comienzo entre las lagrimas otra vez. “Mira,” empiezo, frunciendo las cejas de nuevo mientras se lleva las mangas de la sudadera con capucha de gran tamaño a sus ojos; esto no es mi campo, esto no es mi campo en absoluto. “Él se golpeó en la cabeza con una botella de cerveza, es normal que esté inconsciente después de eso.”

“Está en estado de coma, Seth,” ella me interrumpe y de alguna manera¸ yo sabía que la conversación iría en esa dirección. “No trates de negarlo, incluso los médicos que he llamado intentaron negarlo lo que haría herir mis sentimientos, endulzar todo esto, yo solo-“

Ella salta del sofá, caminando delante de mí con las manos en su pelo; Niall me dijo que era una bola de fuego, que debería haber esperado esto. “¿Qué estabas pensando?” Ella me grita, la sonoridad de su voz me sobresalta. Ella es una chica británica fina que casi es un pie más baja que yo, ¿Quién sabría lo que ella tiene? “¿Qué carajo estabas pensando al dejarlo cerca de Craig?” Freya continúa y yo suspiro, porque no quiero pelear con ella. La oí a noche – he oído tanto de ellos la noche anterior – cuando ella le dijo que lo ama demasiado, es natural que ella esté buscando a alguien a quien culpar. Y también es natural que sea yo a quien esté culpando.