The Sway House - Griffin John...

Від itsannxx

368K 19.1K 11.1K

-Les presentamos a Peyton Cantwell, nuestra nueva chica en Sway. Como todos sabemos, tienen re cancelado a Gr... Більше

cero
antes de leer
uno
dos
tres
cuatro
cinco
seis
siete
ocho
nueve
diez
once
doce
catorce
quince
nota
dieciséis
diecisiete
dieciocho
diecinueve
veinte
veintiuno
veintidos
veintitrés
veinticuatro
veinticinco
veintiséis
veintisiete
veintiocho
veintinueve
Agradecimientos
Me despido
Hasta siempre...
Feliz Año + Sorpresa

trece

9.7K 592 150
Від itsannxx

—¡Nuevo video en mi canal! Será uno de los últimos este año, ya que me dedicaré a pasar tiempo con mi familia estas semanas. Ahora estoy esperando a mi hermano en el aeropuerto, ya que se olvidó de mí. Creo que nadie me quiere últimamente.—terminé de grabar la historia y entré a TikTok. Comencé a grabar mientras las personas me miraban. Acostúmbrense, esta es la nueva generación.

—¡Pey!—me giré y vi a mi hermano.

—¡Al fin!—corrí a abrazarlo.—¡Eres un idiota! Te avisé que llegaría.

—Lo siento, en serio. Tuve que dejar a Jason con su familia y se nos hizo tarde. Ahora estoy exclusivamente para ti.—reí y tomó mi maleta. La entrada del aeropuerto estaba llena de fans. Malditos, les dije que organizaría algo luego.

—¿Hasta Alemania, Peyton?—me encogí de hombros.

—No puedo controlarlo. Son más fuertes que yo.—sonreí al verlos. Salimos y grabé a todos mis fans mientras saludaba a algunos. Los guardias hicieron una especie de pasillo donde nos dejaron pasar. Corrimos al auto de Mark y comenzó a conducir sorprendido.—Mis fans te dan y no consejos.—le dije divertida.

—Lo supuse en el momento en que una tocó mi trasero.—reí. Llegamos a su departamento y dejé mi maleta en la entrada para luego tirarme en el sofá de la sala.

—¿Cómo te está yendo con esos chicos?—me preguntó sentándose a mi lado.

—Son geniales, literalmente los amo.—sonreí.—Me encanta estar con ellos. Te aseguro que no van a ser unas fiestas fáciles.—rio.

—¿Y Hawai? ¿Algún chico sexy?—negué riendo.

—Fue el viaje más hermoso de toda mi vida. Juro que nunca pensé que sería tan hermoso. La pasé genial con los chicos.

—Algún día iré a quedarme contigo en esa casa unos días. Pero la Universidad me está matando.

—¿Cuándo le dirás a papá?—me miró con terror en sus ojos.

—Nunca le diré. No quiero ser una decepción para él.—me habló exaltado.—Además, sabes que debo ir cavando mi propia tumba si lo hago.—rodé mis ojos riendo.

—Estás hablando con tu hermana la cual ni siquiera continuó estudiando una carrera, es famosa, y casi le da un ataque a papá cuando me fui de la casa por un Tour, terminé la escuela por Internet y ahora vivir con siete chicos. Siete chicos, Mark, no sé qué está pensando en este momento.—sonrió de lado.—Yo sí que soy la decepción de la familia.

—Tú tienes el valor de enfrentarlo. Sabes el miedo que me da, no puedo perder a Jason, Pey.

—Mark... no va a golpearte, idiota. Tampoco va a separarte de Jas. Supongo que él estará feliz porque continúas con tu carrera que dejará de lado... que le mentiste con lo de Alemania... y te mudaste con tu novio... —alzó su ceja irónico.

—No lo haré. Fin de la historia.

—Me parece una idea excelente.—ambos reímos.

—¿Quieres ir a visitar la ciudad?—me preguntó mientras se paraba y me extendía su mano.

—¡Por supuesto!—tomé una mochila y algo de dinero para salir del edificio. Alemania era hermosa. Grabé historias con Mark mientras reíamos, saqué miles de fotos y nos pusimos a grabar tiktoks en la calle. Entré en una tienda y compré gomitas.

—Bien. ¿Qué más hay para recorrer?—le pregunté mientras nos sentamos en un parque.

—No sé qué quieres hacer. Mañana podremos ir a comprar los regalos, ya sabes, de mamá y papá.

—Diablos. No sé qué regalarle a papá. ¿Queda mal si no le doy nada? No creo que le importe. Y seguro tampoco me regale algo.

—No seas idiota. Podemos comprarle una de esas camisas y corbatas que le gustan. Vi algunas de esas por aquí.

—A mamá le compraré esas cremas y cosas raras que usa, o algo que se vea lindo.—asintió. En dos segundos teníamos regalo para nuestros padres.

—¿Y a ti que te compro, Pey? Tienes de todo.—reí.

—Solamente quería un perro. Pero veo que eso no será posible conviviendo con los chicos. A Nick no le gustará la idea. Así que... no lo sé.—suspiré. Si tuviera un perrito, podría vivir de ese amor... ¿no?

—Vamos a casa, debes estar cansada.—asentí y volvimos caminando hasta el edificio. Pedimos pizza y nos estamos e la barra a cenar.

—Hay una habitación de invitados, no es la gran cosa. Si quieres puedes dormir en mi cuarto.—negué.

—Es lo mismo, Mark. Solo serán unos días.

—La oferta sigue en pie.—sonreí. Terminamos de comer y entré en la habitación que me había indicado. Me puse mi pijama y me acosté en mi cama. Estaba revisando mis redes hasta que recibí un mensaje de Tay.

T: Hola Pey-pey ¿Cómo estás?

P: ¡Hey! La estoy pasando más que bien con mi hermano. Mañana iremos a comprar los regalos de navidad y luego iremos a Phoenix.

T: Oh, genial.

T: Escucha. ¿Sabes qué regalarle a Bryce?

T: A Tony le tocó para el regalo de año nuevo y no sé ni yo que regalarle.

T: Los mejores regalos se lo hacíamos juntos :(

El regalo de año nuevo. Mierda. Ni siquiera abrí el papel y lo dejé en casa. Dios, soy la peor amiga del mundo.

P: esos buzos grandes o algún pantalón corto. Le encantan esas cosas. O comida.

T: Gracias, Pey. Siempre supe que eras la mejor.

P: Idiota, me usaste.

T: Oh, no. Me quedo sin señal. MUEROOOOO.

Miré el teléfono extrañada. ¿Qué clase de amigos tenía?

P: Adiós, Tay.

Dejé mi teléfono en la mesa de noche y me dormí al instante.

—Arriba Pey.—escuché la voz de Mark del otro lado de la puerta.—Nuestro vuelo sale a las diez de la noche. Tendremos que salir ahora.—miré el reloj de mi mesa de noche y eran las nueve de la mañana. Suspiré y tomé mis cosas para ducharme.

—Buenos días hermano.—dije entrando al baño. No recordaba lo que era despertar sin los gritos de los chicos. Los extrañaba.

—Dentro de treinta minutos nos vamos.

—¡No me pongas presión!—rodé mis ojos y me duché rápido. Me puse mis jeans negros, una remera básica y mi sweater gris. Mis Vans, un abrigo y fui al living.—Estoy lista. ¿Desayunamos fuera?—él asintió y fuimos a un restaurante al frente de su edificio.

—¿Qué tal la estás pasando? Sé que no soy esos siete chicos con los que convives todos los días, pero soy tu hermano.—reí.

—Los extraño mucho. De todas formas recién llevo un día, Mark. Quiero que las fiestas pasen rápido. No quiero escuchar a papá decir que espera que el año siguiente entre en la universidad.—le dije con cara de asco.

—No lo escuches. Si eres feliz haciendo esto, que los demás no te digan que hacer.

—Buen punto hermanito.—le sonreí. Nos pasamos hablando unos minutos más hasta que se comenzaron a escuchar gritos desde afuera.

—Diablos, Pey.—dijo mi hermano mirando a los fans sorprendidos.

—Juro que en Los Ángeles no sucede esto.—reí al velos. Los saludé con mi mano y los gritos aumentaron.—O será que no salgo mucho.—los observé preocupada.

—No me digas que saldrás a saludarlos.—le mostré mi mejor sonrisa forzada. Iba a matarme, pero esto era salir conmigo.

—Solo cuando termine de desayunar con mi lindo hermano mayor. Esto no puede empeorar—reí. Cuando terminamos alrededor de media hora más tarde, había muchos más fans que antes.—Bien. Si podía empeorar.—había guardias en la entrada evitando que pasen al restaurante. Ahora mismo me sentía un monstruo.

—¿Cómo diablos haremos para salir de aquí?—le preguntó mi hermano a los guardias.

—Están llegando más refuerzos para sacarlos en una van.—saludé con mi mano a unas chicas que estaban en la puerta y solo gritaron aún más.

—No hagas eso.—me dijo mi hermano sorprendido.

—Debemos ir al centro.—les hablé seria.—Y nuestra casa está enfrente, ¿para qué diablos una van?

—Deberemos llevarlos en ella hasta el centro comercial.—rodé mis ojos, y uno solo quería disfrutar Alemania. Llegaron los refuerzos y nos sacaron del restaurante, formando una especie de pasillo para que pudiéramos pasar. Me tomé un par de fotos, firmé algunos autógrafos para luego subí al auto.

—Esto es increíble.—dijo Mark.—No puedo creer cuantos fans puedes traer... es genial.

—Son lo mejor que tengo, Mark. Sin ellos no sería nadie, no puedo simplemente ignorarlos.—asintió divertido. Llegamos al gran centro comercial y entramos en una tienda para hombres, elegí una camisa para mi padre y Mark una corbata. Cuando pagamos, mi teléfono vibró, un mensaje de Griffin. Me detuve en seco.—¿Qué diablos...?

—¿Quién es? ¿Tu exnovio? Parece que viste un fantasma.—me preguntó Mark llegando a mi lado. Negué y continué caminando para buscar un regalo para mamá.

—No... Griffin.—suspiré. Leí el mensaje.

G: ¿Cómo estás?

Maldito, ¿en serio te importa?

P: ¿Por qué haces esto Griffin?

G: siento ser un idiota, Pey.

Un gran idiota, gracias por recordármelo.

P: luego hablamos, estoy ocupada.

Bloqueé mi teléfono y seguí mi camino junto a Mark.

—¿Y bien?

—¿Recuerdas a Griffin? El chico que estaba conmigo cuando fueron a visitarme.—asintió.

—Claro. ¿Qué sucede con él?

—Me gusta.—lo miré confundida.—Bueno, suena muy brusco ahora que lo acepté.

—¿Y qué esperas para decirle?—la felicidad de mi hermano iba a ser arruinada en 3... 2... 1...

—Sale con otra chica a la cual la llevó a todos mis lugares favoritos y seguro hasta hicieron brownies juntos, pero no mejores que los míos.—hablé enojada.—Ahora cada vez que vaya, será Griffin y su estúpida novia.

—No puedo creer que estés celosa.—rio fuerte Mark a mi lado. Lo miré mal.—Ya, Pey. Estás rodeada de chicos en esa casa. Alguno caerá a tus pies.—suspiré. No quería a otro idiota. Además todos tenían novias.

—No quiero a otro, Mark. No sirve otro... Griffin me conoce mejor que nadie, pasé una semana junto a él y me cuidó estando enferma, me dejó hacer tantas cosas y él... creo que ambos estábamos bien.

—Es normal, Pey. Luego se te pasará. Es solo porque hace mucho no te sientes así.—rodé mis ojos. Vi un bolso para mamá súper lindo por lo que tiré de Mark a la tienda en donde estaba. Lo compré y luego lo ayudé a elegir un conjunto para que mi hermano se lo regale. Mientras él pagaba vi un lindo buzo para él. También lo llevé. Al ver que ya teníamos todos los regalos, fuimos a casa a preparar nuestras cosas para viajar.

—¡Mark!—lo abrazó mi madre feliz y él igual. Luego fue con mi padre que también lo abrazó.—Estoy feliz de verte de nuevo, y esta vez sin lágrimas en los ojos.—reí y la abracé. Aquí viene la decepción de la familia. Fui con papá y lo miré como siempre, con mi ceja enarcada y mi mirada en alto, como si nada me importara.

—Me alegra verte, Peyton.—asentí.

—Igualmente, padre.—nada de abrazos, nada de besos.

—Ahora, hazme el favor de controlar eso.—me señaló las puertas del aeropuerto. Sonreí y salí prácticamente corriendo, no eran muchos fans, por lo que no iba a morir aplastada. De todas formas quería que mi padre viera esto.

—¡Hola a todos! ¡Por favor no me aplasten! Estoy bien si mantenemos un poco de distancia.—reí. Me saqué algunas fotos, autógrafos y algunos vídeos.—Mis padres me van a matar por esto. Pero en serio debo irme.—me subí a un pequeño escalón que había allí.—Ahora saquen la foto de que me vieron aquí.—reí y los flashes comenzaron a aparecer.—¡Los amo! Ahora por favor, abran paso para que mi familia pueda salir.—un gran pasillo se formó y la seguridad del aeropuerto los rodeó por precaución. Mi familia salió y yo los seguí.—¡Los adoro! ¡Gracias por venir!—todos gritaron y subí a mi auto.

—Estás loca, Pey.—dijo mi hermano riendo.

—Es lo mejor de todo esto.—sonreí saludándolos desde mi auto.

—No se dan una idea lo que fue Alemania. ¡Estaban por todos lados! ¡Ahora saben donde vivo y van a acostarme!—reí fuerte.

—Pobre Jason.—le dijo mi madre divertida. Para mi padre, Jason es el mejor amigo de Mark el cual estudia en Alemania y son compañeros de piso. Gran excusa.—Espero pueda soportarlo.—reí.

—Si son un amor.—le contesté.

—A ver si al fin traes una novia, Mark.—miré por la ventana el camino para evitar reír por el comentario de mi padre.

—Ya papá. Estoy bien así.—rio al verme. Era divertido escuchar esos comentarios de parte de mi padre, si supiera la verdad, no estaría vivo para decirlos.—Como siempre digo, primero el estudio.—lo fulminé con la mirada y él me sacó la lengua divertido.

—¿Y tú Peyton?—lo miré sorprendida.

—¿Yo qué?—¿acaso ese hombre que se hace llamar padre me estaba hablando?

—¿No tienes novio? Solamente supe de ese niño de ese tour.—creo que es un milagro que lo recuerde.

—Blake, papá, Blake. Y si, solamente él. No tendré ninguna relación hasta que todo esto acabe.—ya estoy en mi plan, superar a Griffin Johnson.

—Espero sea pronto. A ver si por lo menos te dignas a entrar en la universidad y no a distancia.—que espere sentado que faltan años para que eso suceda.

—¿Cómo te fue en Hawai?—me preguntó mi madre para salir de la conversación.

—El mejor viaje de mi vida. Los chicos son los mejores amigos que pude encontrar. Y los extraño mucho.—sonreí. Llegamos a casa y subí mi maleta a mi cuarto. Le avisé a mi madre que iba a dormir un poco y que me llamara para cenar.

—Y así fue como Bryce explotó el microondas mientras no estuve. Juro que no hice nada con ellos para que dependan de mí. Pero creo que no pude evitarlo.—reí con mi madre.

—¿Y cómo te va a ti en la carrera, hijo?—me interrumpió mi padre. Ya era costumbre que haga eso, por lo que mi cara pasó a ser seria. El mal humor se hizo presente y mi madre podía notarlo.

—Bastante bien. Podría decirse que estoy seguro de lo que estoy haciendo.—mi padre asintió. Ahora vienen los halagos.

—Vi tus notas. Son excelentes. Fue una buena inversión ir a Alemania.—él asintió y yo solo evité reír.

—Cuando hagamos el Tour, si vamos a Europa, te llevaré al show.—cambié de tema ya que nadie hablaba.—¡Será genial! Y si vamos a París, juro que te llevaré. La pasarás genial. Le diré a Nick que nos deje un día libre para porder recorrer...

—¿No crees que ya es suficiente, Peyton?—miré a mi padre y mi sonrisa se borró.

—¿Suficiente qué?—le pregunté confundida.

—Todo esto, ¿más giras, shows? Creo que en serio deberían saber lo que es la vida. Golpearte las veces que sean necesarias contra una pared.—aquí vamos de nuevo.

—Papá, no voy a pelear contigo faltando un día para Navidad.—le dije bajando mi mirada, en serio no quería hacerlo,

—Eso no es vida, Peyton. La vida es formar una familia, un trabajo. Encontrar la felicidad en eso.—suspiré.

—Estoy más que feliz con todo lo que estoy haciendo y estoy acompañada de las mejores personas que pude encontrar, ellos son mi familia. Formamos una familia. ¿Qué tanto te cuesta aceptar de una maldita vez que no seré la hija perfecta que soñaste? Por favor ¡abre los ojos! ¡No todo es a tu manera! No dejas ser feliz a ninguno de los dos papá. Tu mismo viste hoy a todos esos chicos... sus rostros de felicidad por verme solo dos segundos. Hice esos dos segundos los mejores de sus vidas. Esta casa lo es todo para mí. Sé que será uno de los mejores momentos de mi vida y estás arruinándolo por el simple hecho de que quieres tu felicidad antes que la mía.—tomé aire frustrada.—Esta casa no me impide formar una familia, encontrar un novio o tener algún emprendimiento, el cual sabrías si no fuera porque estás negado a escucharme.

—No me levantes el tono, Peyton.—"ni mi livintis il tini Piytin". Cada día se hacía un ser más detestable.

—¡Tengo casi 19 años! ¡No puede ser que aún dependa de todo lo que pienses o digas! ¡Por un segundo mira la realidad! En esta casa no puedo opinar, hablar o algo que ya soy la perdición.—me paré enojada de mi lugar.

—¿Oh, ahora quieres ser libre? Bien. Hazlo. Terminadas las fiestas te vas de esta casa. Llévate todo lo que te pertenece.—inhala paz, exhala amor... ¡Me estaba echando de mi propia casa!

—¡No dije eso! ¡No puedes dejarme en la calle! ¡Soy tu hija!—hasta donde sabíamos.

—Tienes esa casa que te mantiene, llena de muchachos los cuales solo Dios sabe lo que hiciste.—lo miré sorprendida, era de esperarse que pensara eso, pero jamás creí que me lo diría.—Aparte tu mismo dijiste que es tu familia.—señor, usted interpretó lo que quiso.

—¡Paul!—lo regañó mi madre.

—Eres el peor padre que alguien pudo tener.—me levanté de la mesa y subí a mi cuarto. A los minutos recibí una llamada. Addi.

—¡Hey! ¿Cómo estás? Te extraño un montón.—cerré mis ojos con fuerza.

—Necesito pasar las fiestas y volver con ustedes.—aguanté mis lágrimas.—Necesito volver a casa.

—¿Qué sucede, Pey?—negué pero no podía verme. No estaba dispuesta a hablar del tema.

—No quiero hablar de esto ahora.—suspiré.—¿Cómo lo estás pasando con tu familia?

—Estoy feliz, hay muchos obsequios por todos lados... es hermoso.—sonreí y las ganas de llorar volvieron.—Mis padres volverán conmigo para pasar año nuevo con nosotros, ¿no es genial?

—Claro que lo es.—las lágrimas rodaron por mis mejillas.—Debo colgar, Addi. Mi madre me necesita, te llamó luego.

—Te quiero, Pey. Suerte.—colgué y me tiré en mi cama. Iba quedándome dormida hasta que mi madre entra en mi habitación, pero la ignoré.

—No debes irte de casa, Pey.—justamente ahora tenía que hablar de esto.

—Lo haré.—me senté y la miré furiosa.—Estoy harta. No es malo irme a vivir sola. Puedo vender algunos muebles... aún no termina esto, mamá. Recién comienza, no estoy tan perdida. Sé que puedo pedirle ayuda a los chicos. Tay y Bryce siempre están... pueden ayudarme.

—No escuches a tu padre. Él... planeaba otras cosas para la familia.—otras cosas, si claro... ¡Planeaba explotarnos!

—Estoy cansada mamá, mañana hablamos.—ella asintió y se fue dejándome sola. Suspiré y me recosté nuevamente. A los minutos me llega un mensaje de Griffin, nuevamente. ¿Qué era el día de: hagamos enojar a Peyton?

G: ¿Estás bien? Addi me llamó y me dijo que no te escuchó feliz.

P: estoy por dormir Griffin, mañana hablamos.

Lo conecté y me dormí sin esperar su respuesta.

Продовжити читання

Вам також сподобається

Lo nuestro será eterno Від Laura

Підліткова література

5.2K 282 7
Cartas entre Hasley Weigel y Luke Howland hechas por mí. Contienen spoilers del libro original, por lo que se debe leer después. Están inspiradas en...
69.3K 4.8K 51
. . . . ☞︎ La fama llegó de forma tan repentina a la vida de Charli D'amelio que le pidió a su hermana gemela, Barley , hacerse pasar por ella. . . ...
516K 53K 133
La verdad esta idea es pervertida al comienzo, pero si le ves más a fondo en vastante tierno más que perverso. nop, no hay Lemon, ecchi obviamente, p...
270K 19.6K 23
-HEATHER ✧.*ೃ༄  ̄ ̄ ̄ ̄ ̄ ̄ ̄ ̄ ̄ ̄ ↬x ❝ I'm not even half, as pretty You gave her your sweater It's ju...