Tomoyo quedó impactada cuando vio a la pareja llegar, esperaba a que Sakura llegara, sin embargo, no se esperaba que llegara en compañía de Shaoran, se suponía que Eriol había ido a buscarlo para llevarlo hasta ahí y hacer un encuentro "casual". Vio que ambos se dirigían a la entrada, entonces corrió hacia su escritorio en donde tenía todos sus bosquejos y empezó a remarcar uno, para aparentar que ha estado distraída trabajando.
-Hola Tomoyo -dijo Sakura cuando entró a la habitación de diseños de su amiga- ¿interrumpo?
-Ah... hola Sakura, para nada, pasa -sonrió la chica- Li, no te esperaba -lo miró curiosa, quería hacer que alguno soltara información-
-Vine a acompañar a Sakura -se encogió de hombros el chico-
-Pues aprovechando que estás aquí, en esta caja tengo unos antifaces, le había dicho a Eriol que te comentara, por si aún no tenías el tuyo -comentó la chica lo más casual que pudo- Sakura ven, te enseñaré el vestido -Tomoyo comenzó a jalar el brazo de su amiga, para llevarla a otra habitación, en donde tenía cientos de telas por doquier y los vestidos ya confeccionados para el desfile que estaba organizando, en un rincón de la habitación habían dos prendas colgadas, Tomoyo se acercó a esas prendas y sujetó una- este es tu vestido, te quedará estupendo -le guiñó un ojo a su amiga- ve a probarlo -insistió-
-Tomoyo, no te hubieras molestado -dijo Sakura al sujetar el vestido que le daba su amiga, era un vestido largo color rosa, tenía un escote en forma de corazón, la espalda estaba un poco descubierta, los tirantes del vestido estaban decorados con piedrería, tenía algunos detalles color fucsias, la tela se sentía muy suave.
-Anda ve y pruébalo, si no te viene aun tengo tiempo de ajustarlo -dijo la chica, mientras dejaba a Sakura a solas con el vestido-
En la habitación anterior, Shaoran veía los antifaces que Tomoyo tenía en la caja, habían algunos que no le quedaron, estaban algo pequeños, había un antifaz rojo, el cual le había llamado mucho la atención, en la puerta de la habitación, Tomoyo observaba al chico, no podía entender cómo es que no se había atrevido a aclarar las cosas con Sakura, se acercó hasta él y le sonrió.
-Ese antifaz está hermoso, estoy segura que buscarás la manera de combinarlo con tu traje -dijo la chica mientras sacaba un antifaz rosa de la caja-
-Gracias, ¿segura que puedo usarlo? ¿Eriol no lo usará? -cuestionó el chico-
-El de Eriol ya se lo llevó, puedes tomar el que te guste, iré a ver a Sakura -le guiñó un ojo, dejando al castaño mirando el antifaz-
En la otra habitación, Sakura estaba embelesada con el vestido, le sorprendió mucho lo bien que le acentuaba la figura, así como también, le gustaba cómo se sentía con el vestido, al verse en el espejo con él, se quedó muy anonada, no era la primera vez que su mejor amiga le hacía un vestido, pero era la primera vez que se veía al espejo y se sentía hermosa, pero lo que realmente cruzó en su mente fue "a Shaoran le encantará", Sakura se sonrojó ante ese pensamiento, cuando escuchó que alguien entraba, al voltear y ver a su amiga se tranquilizó un poco.
-¿Y bien? -preguntó Tomoyo- ¿sientes que necesite algún ajuste? -la chica se acercó para comprobar que su amiga haya colocado con propiedad el vestido, con tantos vestidos que le había confeccionado, ya se sabía sus medidas, pero una nunca sabía cuando las personas iban a cambiar de talla.
-Está perfecto, Tomoyo, muchas gracias -dijo Sakura al tiempo que abrazaba a su amiga-
-Si así te pones por un vestido cualquiera, no me quiero imaginar cómo te pondrás con el vestido de novia que yo te confeccionaré el día que me digas que te vas a casar -comentó la chica muy ilusionada-
-Te estás adelantando mucho -se sonrojó Sakura- me cambiaré, no quiero arruinar el vestido.
-Espera, mira este antifaz le vendrá muy bien al vestido -dijo Tomoyo mientras le enseñaba un antifaz rosa con detalles dorados-
-Tomoyo, es precioso -dijo la chica mientras sujetaba el antifaz- has pensado en todo -se sonrojó la chica de ojos verdes-
-Sakura, eres mi mejor amiga y mi prima, así que siempre me esforzaré en ayudarte en todo -le guiñó un ojo- además, el baile será especial ya lo verás -Tomoyo se quedó pensado un momento- hace días que no hablamos, tengo que contarte algo muy importante, ¿crees que a Li le importe esperarte un poco más?
-Pues... no lo sé -Sakura se encogió de hombros- ¿qué necesitas contarme?
Sakura se pasó detrás del biombo que estaba en un rincón de la habitación, necesitaba cambiarse para no arruinar el vestido hermoso que le había confeccionado su amiga, Tomoyo mientras tanto, buscaba la manera de hablar con ella, no era normal que no supiera cómo empezar, pero se sentía un poco apenada de no haberle contado enseguida a su amiga.
-Es que... -comenzó a decir la chica de cabello largo y ojos amatistas- Eriol y yo ya somos novios -se sonrojó levemente-
-¡Tomoyo, eso es una buena noticia! -dijo Sakura saliendo detrás del biombo- ya era hora -dijo sin pensar-
-Debí llamarte antes para contarte, pero... -Sakura la interrumpió-
-No pasa nada, cosas así roban los pensamientos y las acciones, yo también tengo mucho que contarte, pero no creo que deba hacer esperar a Shaoran -Sakura bajó la mirada-
-Hacerlo esperar hará que te valore más -comenzó a reír Tomoyo- además, Eriol está por llegar, no estará solo.
-Que te parece si nos vemos más tarde -sugirió Sakura- así tal vez te tenga más para contar -diciendo esto, la chica sintió que sus mejillas se tornaban de rojo-
-De acuerdo, te paso a ver a tu casa en la noche, después de la junta que tendré en la empresa -comenzó a recordar Tomoyo sus deberes- yo te aviso -concluyó-
-Está bien -sonrió la chica- el vestido ¿en dónde te lo dejo?
-¿No lo llevarás a tu casa? Es tuyo -sonrió Tomoyo-
-Mejor te lo dejo, puedo venir a arreglarme aquí -sugirió la chica-
-De acuerdo -Tomoyo agarró el vestido y lo colgó junto al suyo- entonces nos arreglaremos juntas.
En la habitación de al lado, Shaoran estaba un poco impaciente, no entendía por qué se estaban demorando, de haber sido posible, ya habría formado un agujero en el piso de tanto caminar, quería hablar con Sakura de una vez, antes de que se tenga que volver a postergar la plática.
Eriol entró a la mansión Daidouji, una de las empleadas le dijo que Tomoyo estaba un poco ocupada, pero que podía esperar, como ya conocían a Eriol, no tenían problema con que el chico de cabello azul se desplazara por donde guste, así que lo dejaron a solas, lo cual hizo que el chico se dirigiese al estudio de diseño de Tomoyo, lugar en donde estaba Shaoran caminando como león enjaulado; al verlo, el joven inglés, tuvo que aguantarse la risa, se veía muy chistoso caminando de un lado a otro.
-Amor, llegaste a tiempo -dijo Tomoyo, al tiempo que entraba junto a Sakura-
-Hola Eriol -sonrió la chica- ya me contó Tomoyo lo de ustedes, muchas felicidades -dijo la chica-
-Gracias, estoy muy feliz -Eriol abrazó a Tomoyo y le dio un beso corto-
Shaoran estaba parado, mirando la escena que se reproducía enfrente de él, se había quedado en segundo plano, cuando llegaron las chicas y Eriol, no esperaba verlo ahí, después de la plática que habían tenido, aunque claro, estaba en casa de su novia, era obvio que él se dirigiera ahí después de todo. Cuando vio que Eriol tomó a Tomoyo de la cintura y la besó, sintió un poco de envidia, él era tan abierto, que no le importaba tener espectadores para demostrar cuánto quería a su chica.
-Shaoran, ¿te quedarás ahí parado? -dijo Eriol, haciendo que el chico regresara a la realidad-
-Perdón... -se disculpó y se acercó a los demás- ¿Sakura ya acabaste? -preguntó un poco sonrojado-
-Mmmm... si, eso era todo ¿no Tomoyo? -Sakura volteó a ver a su amiga-
-Si, no se te olvide que el viernes tienes que venir a arreglarte conmigo, tendré todo dispuesto -guiñó un ojo la chica amatista-
-Si, yo estaré aquí -sonrió Sakura- ¿Nos vamos? -preguntó la chica dirigiéndose a Shaoran-
Eriol al escucharlos, miró a Shaoran de manera sugerente, le alzó los pulgares en signo de aprobación sin que las dos chicas se dieran cuenta.
-Te veo más tarde Shaoran -comentó el chico-
-Si -Shaoran sabía que Eriol solo quería molestarlo, aún así se dirigió a la entrada, esperando a que Sakura se despidiera de los dos chicos-
-Te veré más tarde, te aviso cuando esté yendo -comentó Tomoyo, mientras acompañaba a su amiga a la puerta-
Sakura, se fue hasta donde estaba Shaoran, subió al auto y esperó a que Shaoran también subiera, pero Eriol lo detuvo un momento.
-¿Dejarás de huir? -preguntó el chico a su amigo, haciendo que este se detuviera-
-Ya te dije que no estoy huyendo, tengo que resolver unas cosas en Hong Kong -suspiró Shaoran, estaba un poco cansado que su amigo no lo comprendiera-
-Tú y yo sabemos que lo que tengas que hacer en Hong Kong, lo puedes hacer aquí -se encogió de hombros- que te vaya bien con Sakura -comentó el chico al tiempo que entraba a casa de Tomoyo-
Shaoran vio a su amigo irse, si era verdad que lo que tuviese que hacer en Hong Kong podría ver la forma de resolverlo allí, sin embargo, necesitaba asegurarse que su mamá no se interpondría en sus decisiones, y ya tenía un plan para eso.
-Lo siento, no quería hacerte esperar aquí -se disculpó el chico al subir al auto-
-No te preocupes, entiendo que se acerca la inauguración de la empresa -sonrió Sakura- ¿a dónde iremos? -quiso saber-
-Al acuario, me comentaron que hicieron unas reformas, ¿ya has ido? -Shaoran veía de reojo a Sakura mientras él conducía-
-No, la próxima semana iremos ahí de excursión con los chicos -recordó Sakura-
-Pues lo irás a ver antes que ellos -sonrió el chico-
En el camino, comenzó a reinar el silencio, ninguno de los dos decía nada, Shaoran estaba un poco nervioso, pensando en todo lo que pasará llegando al acuario, Sakura, por su parte, estaba sumergida en sus pensamientos, había imaginado el regreso de Shaoran, pero después del segundo año de su partida, había desistido en esperarlo, aun así, sus sentimientos hacía él, no habían cambiado para nada.
Al llegar al acuario, Shaoran ayudó a bajar a la chica, y se dirigieron adentro del establecimiento, Sakura se quedó maravillada de ver todas las reformas que había habido, el acuario había sido cerrado hace un año, luego en la reapertura quería asistir, de hecho, Kaito la había invitado, sin embargo, el día que habían quedado, cayó un diluvio, impidiendo que la chica llegara a la cita.
Shaoran, tomó de la mano a su acompañante, y la llevó hacia el lugar en donde estaba uno de los tanques enormes del lugar, en donde se podían apreciar cientos de especies de peces y animales marinos, al llegar ahí, Shaoran se puso frente a ella y la tomó de ambas manos.
-Sakura... -comenzó el chico, ella solo lo miraba un poco sonrojada, no esperó esa manera de actuar del chico-
-Shaoran... -silenció al chico poniendo uno de sus dedos en sus labios- hace años tú me confesaste algo en el parque pingüino... -continúo la chica- yo actué mal, para cuando quise hablar contigo, tú te habías ido a Hong Kong -suspiró la chica, Shaoran la miró anonadado, no esperaba que la chica le dijera lo que le estaba diciendo, sin embargo, dejó que continuara- Sabes, cuando te fuiste, me di cuenta de cosas que pasaban desapercibidas, al menos yo no me daba cuenta, pero recordando los momentos que pasábamos, me di cuenta que tú siempre me apoyabas en todo, las veces que me protegías, igual o más que mi hermano, también, que siempre me decías que los chicos que se me acercaban no me convenían, estábamos chicos, aún así tú siempre estabas para mí y lo entendí después de que te fuiste -Sakura miró a Shaoran a los ojos- tal vez sea demasiado tarde, aún así, quisiera decirte que tú me gustabas mucho Shaoran... En realidad, ahora que te veo, sé que aún me gustas y...
Al escuchar esas palabras, Shaoran silenció a Sakura, de la manera menos pensada para la chica, en cuestión de segundos la sujetó de la cintura y la silencio con un beso, al principio, Sakura se sorprendió, pero después de un instante, correspondió al beso, ambos chicos ansiaban ese momento, así que se dejaron llevar por unos instantes, al separarse, Shaoran acarició las mejillas de la chica.
-Tú también me gustas, solo que no sabía cómo actuar después de lo mal que te traté el día que nos volvimos a ver, estuve esperando tu respuesta por mucho tiempo, entonces, ¿crees que aún podamos recuperar el tiempo? ¿me darías una oportunidad? -el chico contuvo la respiración en espera de la respuesta de la chica-