- Kiot –me llamó algo asustado- hoy llega mi papá de Australia
Con esa frase me había despertado esa mañana en casa de Rub
- que dices? –pregunté soñoliento. Esperaba haber escuchado mal-
- prometiste ayudarme a contarle a mi padre sobre nosotros –me reprimió-
- ya lo sé, solo pregunté para cerciorarme de lo que había oído –suspiré cansado- que hora es? Siento como si no hubiera descansado nada
- las 8.30 –me dijo nervioso- es que no pude volver a dormir, estoy muy nervioso
- rayos –me cubrí completamente con las sábanas- no llevo ni una hora durmiendo
- lo siento
- no te preocupes, no es tu culpa, entiendo tu nerviosismo, es que solo me gustaría haber podido dormir un poco más
- que haremos? Cómo le diremos?
- no lo sé, algo cómo “señor Anderson, su hijo y yo estamos saliendo, llevamos más de 4 meses juntos…” no, no es una buena opción, cierto?
- eres un tonto… no sé qué hacer!
- realmente no sé cómo podríamos hacer, es bastante complicado…
- Kiot… -me llamó asustado- ni siquiera sé por qué le tengo tanto miedo a la opinión de mi papá
- le tienes miedo porque si es algo negativo te dolería mucho, cierto?
Él asintió sin decir más
La madre de Rub nos llamó para almorzar unas horas más tarde. Realmente no tenía hambre, mi estómago estaba revuelto y no quería probar bocado.
- te sientes bien cariño? –me preguntó la Señora Anderson-
- sí, solo que estoy un poco… -suspiré- muy nervioso
- ya verás que todo irá bien, Robert no es tan estricto como parece
Miré a Rub de reojo y pude ver lo absorto que estaba en sus pensamientos. Tenía la mirada perdida y solo revolvía su comida con extrema lentitud
- Rub, hijo, confía en tu padre, verás que todo irá bien
- espero que si… tengo miedo
A pesar de mis nervios y mi poca concentración en lo demás pude notar lo callada que Emily se encontraba… demasiado callada para der ella
- Emily, que te sucede? –la miré seriamente-
- n-nada! No me pasa nada! Debería pasar algo?
- y por qué los nervios? Si no hubieras hecho nada no tendrías por qué estar nerviosa
- no es eso! –se estaba desesperando- cállate Kiot!
- por qué habría de hacerlo? Te molesta el que se descubra que has hecho algo de lo que te arrepientes… el cual seguramente perjudica a alguno de nosotros, cierto?
- cállate!! No me gusta que me leas!
- entonces estaba en lo cierto… y teniendo en cuenta la situación… le dijiste a tu padre de Rub y yo, cierto? –hablaba con calma, pero quería explotar por dentro. Deseaba estar equivocado con toda mi alma-
- NO!... no, claro que no
Suspiré pesadamente y cubrí mi cara con mis manos en señal de cansancio
- no puedo creerlo… -dije sin mirarla-
El enano, quien había estado escuchando atentamente, soltó la cuchara que sostenía con su mano derecha, en muestra de su sorpresa
- E-Emily… t-tú le dijiste a papá?
- no! No lo… sí… sí lo hice…
- por qué? –el pelirrojo no estaba enojado, pero si profundamente decepcionado y dolido-
- porque estaba enojada…
- cuándo lo hiciste? –pregunté con seriedad-
- e-el día siguiente de cuando ustedes nos lo dijeron…
Recordaba haber despertado esa mañana porque el teléfono sonaba. Cuando vi la cama del pelirrojo él no estaba. Luego de un rato oí como la rubia tetona le gritaba
- Cuando papá llamó por teléfono? Tú hablaste después que yo…
- sí…
- Emily… por qué no me dijiste antes?
- porque estaba muy enojada y luego me sentí mal al respecto… quiero que sepas que estoy muy arrepentida
- no pensé que tu fueras capaz de algo así… mamá, lo siento, no tengo hambre .Y acto seguido se levantó de su lugar y se encerró en su habitación-
Emily solo se quedó en su lugar, en shock
- permiso, voy a levantarme –luego de eso corrí en busca de Rub- Pelirrojo… abre la puerta –golpeé suavemente- por favor, solo soy yo
Él abrió la puerta dejándome entrar y la cerró tras de mi
- hola Kiot, no habías prometido el que le harías no sentir miedo? –dijo seriamente al cerrar la puerta con seguro-
- si hubiera podido evitarlo lo hubiera hecho, créeme que lo que menos quiero es que Rub llegue al extremo de refugiarse de la realidad –aclaré mientras me sentaba en el suelo-
- podrías haberlo evitado
- cómo Kurt? Cubriendo sus oídos?
- evitando preguntar sobre Emily
- no pensé que ella hubiera hecho eso hasta que ya fue muy tarde
- Advertí que si salía por tu culpa te partiría tu linda cara
- Kurt, no es un buen momento, en serio. Necesito pensar cómo salir victoriosos de todo esto. Necesito pensar que decirle a Robert para que no se enoje con Rub. Necesito encontrar una manera de que no sufra con esto, si?
- no trates de hacerte el bueno aquí! Ya he tenido suficiente con tu mierda!
- a que demonios te refieres!? No te entiendo Kurt! Eres tú quien quiere hacerse pasar por el bueno cuando solo complicas más las cosas!
- tu las complicaste con tu maldita llegada! Si no lo hubieras besado ese día luego de uno de tus típicos ataques él no se hubiera confundido tanto contigo, y hubiera seguido siendo solo mío! Yo era el único que conocía todo de él hasta que llegaste y lo arruinaste todo!
- de que hablas?
- Rub es mi otra parte, yo lo entiendo mejor que nadie, y él me entiende a mi! Él debía ser solo mío! Logré alejar a las otras personas menos a Hinata y a ti! Los odio!
- si me odias por qué trataste de abusar de mi? –pregunté con total seriedad-
- porque necesitabas un escarmiento
- eso no es cierto, sé que mientes, lo noto en tu voz
- y qué estúpida respuesta imaginas que iba a darte?!
- la verdad
- no te diría la verdad ni porque la merecieras. Ahora vete, vete a visitar a tu loca madre al psiquiátrico y déjanos solos
Estaba atacando mi punto débil a propósito. Debía resistir
- voy a estar con Rub, por más que él ahora esté escondido
- él no te necesita, nadie lo hace. Por qué insistes en levantar tu auto-estima a través de él? NADIE requiere tu jodida ayuda
- solo lo dices para herirme
- por qué habría de hacer eso? Solo te digo la verdad, afróntala niño, si eres tan listo cómo crees o haces parecer deberías entenderlo
- Cállate Kurt, no sabes nada de mi –dije al borde de la desesperación-
- lo sé todo, se lo mucho que esto te está afectando. AFRONTA LA VERDAD!!
Al parecer la madre de Rub había escuchado los gritos por lo que intentó abrir la puerta
- Kiot? Kiot estás bien?!
- él estará bien si no molestas Sasha
- estaré bien, lo prometo señora Anderson –dije con la fuerza restante en mi-
- abre la puerta Kiot!
“vamos, abre la puerta, cociné tu comida favorita, Tom”
Me quedé sentado mirando horrorizado a la nada. Otra vez estaba sucediendo
- qué? Ahora tienes miedo pequeño Kiot? Sabes qué!? El psicólogo que se propone una y otra vez a ayudar a Rub es inútil! Él no podrá matarme! Nadie podrá!
Si, tenía miedo. Un miedo inmenso que no sentía desde que mi madre estaba conmigo. Miré cada rincón de la oscura habitación esperando encontrar una sombra que destacase en cada esquina, un indicio de que mi madre me estaba torturando nuevamente.
Pero no había nada y eso me molestaba. Sabía que eran los fantasmas de mi mente los que me hacían creer que iba a encontrar algo fuera de lo común. Estaban dentro de mi mente.
Tomé mi cabeza entre mis manos intentando acallar las voces, los murmullos.
- que sucede? Acaso te molestó la verdad? Eres débil!
- cállate…
- Kurt! –gritó Sasha desde el otro lado de la habitación- no hagas nada, por favor. Dime que necesitas, te daré lo que quieras, pero no dañes ni a Rub ni a Kiot –se oía desesperada-
Kurt intentó agarrar mi cabello pero me zafé antes de que lo hiciera y me senté en la esquina más lejana a él.
- pareces una rata! Una asquerosa, inmunda y débil rata! Que no te resulte extraño si Rub te deja pronto ¡Ni siquiera puedes defenderte! ¡¿Cómo piensas protegerlo?!
- Déjame… deja que Rub regrese…
- para qué!? Para que lo sigas usando!? Porque eso es lo que haces! Usarlo para contenerte!
Debía mostrarme fuerte, debía liberar a Rub. Tenía que salvarlo
- tú dices todo esto porque te gusto, cierto?... No te molestes en negarlo, Rub ya me lo ha dicho
- JA! Eres idiota acaso?! No me gustas! Te odio con gran fuerza! Te odio como todo el mundo lo hace! Deja de creerte tan especial! NO ERES NADIE!
Si en ese momento hubiera estado más estable, si en ese momento hubiera podido pensar con claridad, me había dado cuenta que Kurt mentía.
Pero no pensaba con claridad. Me había visto envuelto en la oscuridad que habitaba en mi mente. Necesitaba escapar y solo conocía una manera de hacerlo.
Levanté la vista y vi a Kurt sentado en la cama, mirándome
- Que sucede? Estas tan asustado que hasta has olvidado como llorar?
Inmediatamente me puse de pie y corrí hasta el baño instalado en la habitación de Rub y cerré la puerta con seguro
- abre la puerta! O prefieres que te grite?
- vete a la mierda
Rápidamente me quité la camiseta y tomé la navaja de mi bolsillo
- que harás? Te cortarás hasta que no quede sangre en tu cuerpo?
- eso mismo pienso hacer
La seguridad había regresado cuando realicé el primer corte sobre mi abdomen.
Recordé, nuevamente, que Rub me había dicho que Kurt me lastimaría por el hecho de que le gustaba.
- sal de ahí y da la cara, idiota!
Deslicé la navaja por segunda vez cerca del corte anterior y sonreí como maniático. Había olvidado lo bien que se sentía eso
- Qué? Vas a ignorarme!? Eso si que es de cobardes, de débiles!
Un tercer corte fue hecho en mi muñeca izquierda al mismo tiempo que varias lágrimas caían por mis mejillas
No entendía absolutamente nada de lo que estaba sucediendo lloraba con la sonrisa más maniática plasmada en el rostro
Estuve un corto rato en el baño, luego de vendarme el corte de la muñeca, el cual había sido un poco más profundo de lo que esperaba, salí decidido a enfrentarme a Kurt
- ohh la nena se decidió por salir
- no vi que en ningún momento entrases al baño –suspiré- podemos hablar civilizadamente, Kurt?
- que quieres?
- Hablar con Rub
- qué quieres de él?
- todo
Kurt bajó su mirada a mi muñeca, la cual estaba vendada
- no pensé que fueras a cortarte nuevamente –dijo con un leve temblor en la voz-
- te felicito, lograste que lo hiciera
- yo no…
- sí, tu sí. Fue tu culpa. Ahora vete Kurt. Quiero ver a Rub
Y para mi sorpresa Kurt me hizo caso.
El cuerpo inerte del pelirrojo se acercó peligrosamente al suelo pero logré tomarlo en brazos y evitar el golpe
- Sasha –la llamé- Kurt ya se fue, ya está todo bien
- tu estás bien Kiot?
- si, lo estoy –mentí-
- Rub está bien?
- lo está, está durmiendo ahora
- Gracias cariño
- no fue nada
Luego de media hora Rub despertó
- Kiot? –abrió los ojos con cuidado- estás bien?
- ahora que has despertado lo estoy –acaricié su cabello-
- que sucedió?
- Hablé con Kurt
- Kurt estaba enfadado, muy enfadado
- lo se
- en serio estás bien?
- estoy bien, aunque creo que estás formulando la pregunta equivocada –dije con una sonrisa triste-
- estuviste bien?
- no tanto como me hubiera gustado
- quítate la camiseta –me ordenó preocupado-
- tantas ganas tienes que hasta la vergüenza se te va? –reí. Quería desviarlo de su pregunta principal-
- Kiot! No es eso!
- podemos hacerlo algo más lento –hablé mientras me acercaba a sus labios- no lo prefieres así? –susurré contra sus labios-
- K-Kiot… no… es que… yo… mi familia…
- shh tranquilo –me alejé- solo bromeaba enano. Tengo principios
Miró mi brazo izquierdo y vio las vendas
- Kiot –me miró preocupado-
- no pasa nada, se curará y todo volverá a estar bien –a su vez, fui quitándome la venda- ya no sangra, está mejorando, ves?
- Lo siento –dijo en un sollozo- es mi culpa
- no lo es. Es mía. Esta clase de cosas nunca son tu culpa –acaricié su mejilla- ya me siento mejor y no quiero volver a hacerlo.
- en serio lo siento Kiot
- Te culpas por tener una doble personalidad? Valla que si eres idiota –dije con cariño- Rub, en serio, deja de culparte
- Cómo lo hiciste?
- tengo… tengo una pequeña navaja… -sabía lo que vendría a continuación-
- dámela
- solo hago esto porque eres tu –suspiré- ni siquiera se la he dado a Amy… -saqué la Gillette de mi bolsillo y se la tendí-
- Gracias por confiar en mi
- confío en ti más que en nadie
- gracias
Estábamos en el aeropuerto esperando a Robert. Rub no le había dirigido la palabra a Emily, lo cual me sorprendía, ya que los enojos del pelirrojo nunca duraban mucho.
Había colocado una muñequera de tela sobre la cicatriz para que nadie se preocupara
- allí está –dijo una sonriente Sasha- Robert! –gritó agitando la mano-
- hey! –respondió de la misma manera- oh tú…
Sí, yo era ese “oh tú”
- Bienvenido papá –dijo Emily saltando a los brazos de su padre-
- papá! –dijo Rub con emoción y felicidad-
- hola Rub –le contestó fríamente-
- Bienvenido señor Anderson –lo saludé respetuosamente-
Él solo me miró de pies a cabeza y no me respondió
- amor… -lo acusó Sasha-
- Hola, Gray
Sí, él también había acostumbrado a llamarme por el apellido
En el viaje de vuelta fue bastante incómodo. El padre de Rub sol hablaba con Sasha y cuando el pelirrojo intentaba hablarle este le respondía con voz inexpresiva “ahora no, estoy hablando con tu madre”
- papá –lo llamó una vez en su casa-
- qué?
- puedo hablar contigo?
- bueno, lo estamos haciendo –dijo con bastante obviedad- qué quieres? Acaso te carcome la conciencia?
Oh, estaba muy enojado. Por lo que yo sabía, Rub era el centro de adoración de Robert
- algo así… quería que supieras por mis propias palabras… quería decírtelo cara a cara –hablaba en un susurro lo suficientemente audible-
- estamos hablando de lo mismo?
- de mi relación con Kiot…
- entonces si –confirmó resignado-
- juro que quería decírtelo –le confesó atropelladamente-
- no lo parece
Preferí no decir palabra hasta que viera que era sumamente necesario
- tenía tanto miedo de que me rechazaras que no sabía cómo hacerlo…
- oh, pero eso n te impidió el que siguieras saliendo con… -me inspeccionó nuevamente con la mirada- …él
- discúlpame por no habértelo dicho antes
Robert se quedó en silencio mirando seriamente
- por qué con un hombre? Creí haberte educado bien
- no es el hecho de que sea un hombre… y si me educaste bien –lo miró desesperado- me enseñaste que era importante el amor en una relación, que era importante amar a alguien… y yo amo a Kiot –dijo con decisión y seguridad-
- por qué él?
- porque Kiot es una gran persona. Puede parecer alguien arrogante y frío ¡pero no es así! Él es tierno y dulce conmigo, me cuida y se preocupa por mi más que nadie fuera de la familia. Él comprende y me ayuda con Kurt. Es de esas personas que solo se encuentran una sola vez en la vida. Kiot me hace feliz, papá
Entonces me miró, analizándome nuevamente
- Gray… por qué mi hijo? –preguntó con extrema seriedad-
- por qué Rub? Difícil pregunta. –sonreí- porque él me salvó. Supongo que usted sabe lo ocurrido con mi familia –él arqueó una ceja- mi padre murió a mis 6 años y mi madre estuvo realmente mal por ello… Desde que mi padre murió he estado siempre solo, no tuve amigos, nadie se me acercaba más que para insultarme o golpearme. Pero el primer día de clases de este año un chico pelirrojo se acercó a mí y fue amable conmigo. Lo sentí cálido, amigable. Mi vida era bastante mala hasta que él llegó. Poco a poco logró escalar las murallas que había establecido a mi alrededor, se volvió alguien cercano. Se volvió mi amigo. Su hijo es un ángel, sabe? Cuando supe que estaba enamorado de él ni siquiera me atreví a negarlo. Quería verlo feliz a costa de mi propia felicidad. Cuando supe que me correspondía me sentía la persona más dichosa del mundo, no todo era tan malo… Yo amo a Rub –le aseguré con firmeza- y disculpe mi atrevimiento pero no permitiré que lo aleje de mí. Lo necesito más de lo que puede imaginar.
Rub me miró sonriendo tiernamente con los ojos llenos de lágrimas de felicidad y miedo.
- decir eso es bastante egoísta
- desde mi punto de vista, egoísta sería el que le negara la felicidad a dos persona por un capricho
- cuida tu afilada lengua, Gray
- me disculpo si lo he ofendido –hablé con sinceridad- es lo que menos quería, solo le dije la verdad desde mi punto de vista
- Rub… -lo miró inexpresivamente- no me interpondré, pero ten cuidado. Deseo tu felicidad. Admito que me dolió el enterarme de esto a través de tu hermana por teléfono.
- lo siento
- ya no te disculpes, ya no tiene sentido. –y por primera vez me miró sonriendo- cuida muy bien a mi hijo –y con la misma sonrisa dijo- te arrepentirás si no lo haces
- lo haré –sonreí agradecido- no quiero que nada le suceda a Rub, es demasiado importante para mi
Terminada la charla, Robert se levantó y se dirigió a su habitación
Yo miré a Rub, quien me sonreía con extrema felicidad en su cara
- así que soy un ángel? –me dijo con gracia y ternura-
- uno de los más enanos y hermosos ángeles –lo abracé- te amo pelirrojo
- también te amo Kiot
Lo tomé por el mentón y lo besé con suavidad transmitiéndole mi amor por él