Llegamos al estacionamiento de un edificio y caminamos hasta el recibidor, la fachada se veía sencilla pero bien, no sé qué hacemos aquí, el edificio donde estamos no esta tan mal, era lindo lo único que le faltaba era remodelaciones en algunos muebles y algo de pintura.
-vamos. – me dice Andrés mientras me toma por la mano y va caminando delante de mi guiándome.
-adonde. – le pregunto.
-a mostrarte la sorpresa.
Caminamos desde el recibidor hasta el elevador, al entrar a este el marca el piso 17 cuando estamos subiendo volteo a verlo y me guiña un ojo de esa sensual manera que el solo sabe hacerlo, el elevador se detiene y Andrés dice.
-cierra los ojos.
-para que si al final voy a ver la sorpresa. – él pone la cara seria y responde.
-ash, preciosa deja de ser tan aburrida – su rostro me dio mucha risa así que solté una sonora carcajada, me tomo de la mano y salimos del elevador y nos quedamos parados en el pasillo y me dice. – vas a cerrar los ojos sí o no.
-bueno, está bien –lo señalo y le advierto. – si me caigo tú me la vas a pagar.
El suelta una pequeña risita y levanta su mano derecha en forma de juramento luego cierro los ojos y me comienza a guiar por el pasillo donde estamos, nos detenemos y yo continuo con los ojos cerrados escucho que se abre una puerta y tengo una pequeña idea de cuál pueda ser la sorpresa.
Vuelve y me toma de la mano y continua guiándome, avanzamos 4 pasos más y me dice.
-listo hermosa, ya puedes abrir los ojos.
-está bien. – abro los ojos y pues sí, era lo que me imaginaba, está lindo el lugar aunque el color de las paredes es algo deprimente, hay unas cajas vacías regadas por la sala.
Un sofá color caqui, en muy mal estado por cierto, la sala está unida lo único que las divide es una media pared con un mesón y el suelo tiene una alfombra color claro aunque no se distingue muy bien debido a las manchas que tiene.
-te gusta. - me mira en espera de una respuesta.
-está lindo, solo le faltan algunos detalles – le digo, aunque en realidad le faltan muchos.
-en eso estoy de acuerdo contigo, pienso pintarlo y comprarle muebles a mi gusto, también voy a cambiar las cerámicas de los baños.
-me parece muy bien. – sigo mirando a mi alrededor, Andrés me toma de la mano y dice.
-te mostrare el resto. - me guía por el pasillo y observo que le falta algo de iluminación, abre una de las tres puertas que había, la puerta se encuentra a la derecha a mitad del pasillo.
Era una habitación, de tamaño mediano una ventana con mucha iluminación natural un closet de madera de dos puertas, las paredes y el piso tenían la misma decoración de la sala paredes desgastadas de un color gris y el suelo con una alfombra sucia.
Salimos de esta habitación y abre una puerta que se encuentra justo al frente de la primera que abrió, esta es un baño todo descuidado y sucio necesitaba con urgencia una remodelación, después de que vi las dos primeras puertas Andrés dice.
-ahora falta lo mejor. – dice muy entusiasmado, el a veces es tan tierno y tan rudo e intimidador Andrés puede ser tantas cosas y lo que más me gusta es la manera en que me hace sentir, así que decido compartir su felicidad con él.
-muéstrame – y le brindo una gran sonrisa.
-vamos – me lleva hasta la última puerta que se encontraba al final del pasillo, nos detenemos al frente de esta y me dice. – ábrela.
Abro la puerta y veo una habitación mucho más amplia que la anterior con un gran balcón y este tiene una hermosa vista de la ciudad, un closet como el de la primera habitación pero de cuatro puertas y justo al lado de este se encuentra otra puerta, camino hasta ella y al entrar me encuentro con un baño.
Este tenía la ducha y una tina blanca con mucho moho al igual que el inodoro, el departamento está lindo y es espacioso lo que le falta es una remodelación y cambio de suelos y pinturas, cambiar las cerámicas de los baños y quedaría perfecto.
Está en muy mal estado, y en casi todas las habitaciones hay algunas cajas vacías regadas, Andrés me habla.
-entonces hermosa, te gusta.
-es lindo pero hay que decorarlo y remodelarlo – me acerco a él y paso mis manos por sobre su cuello y él me toma por la cintura. – si quieres yo puedo ayudarte con eso.
-solo en eso.
-en que más quieres que te ayude. – le digo picara.
-en muchas cosas, mi traviesa ash.
Nos comenzamos a besar, el beso desde el inicio venia cargado de ansias y deseo del uno por el otro, el beso aumento más y Andrés me levanta y yo enredo mis piernas, sus manos están en mi trasero apretándome a su creciente erección, el deseo aumento, al darnos de cuenta en donde nos encontrábamos y de que no había lugar para lo que teníamos en mente, se detuvo.
-vamos a otro lugar, te parece. – propone Andrés.
-a dónde vamos. – le pregunto.
-a terminar esto, pero en otro lugar cuando esté listo haremos lo que quieras.
-no es mala idea, - le doy un fugaz beso. – vámonos.
Caminamos hasta lo que se supone que es la sala tomo los cascos y salimos del departamento y nos dirigimos al elevador presiona el botón y comenzamos a bajar en el momento que el elevador está bajando me aprieta el trasero.
Cuando volteo a verlo se ríe y le golpeo el hombro y él dice.
-tengo que aguantarme.
-si tienes que hacerlo, no tendré sexo en un elevador.
-ahora que lo pones así, sería muy divertido. – se muerde los labios, y si sería divertido y excitante pero no.
-Andrés no.
-está bien hermosa, tu mandas – el elevador se detiene y las puertas se abren, Andrés me carga y sale del elevador conmigo colgada a su hombro y camina hasta llegar al estacionamiento y se detiene de repente y dice. – en el estacionamiento se puede.
-Andrés no. – yo aún sigo colgando a su espalda.
-está bien, aburrida – dice en susurro y yo aprovecho y le palmeo el trasero. – aquí no ash.
-tonto. – y comenzamos a reír, me baja y le paso su casco para que se lo coloque y yo hago lo mismo con el mío.
Al ya tener los cascos puestos el sube primero a la moto y la enciende luego yo me subo y cuando comienza a conducir, cuando llegamos a su casa y nos bajamos de la moto mi estómago ruge pero Andrés no escucha así que antes de entrar a la casa le digo.
-tengo hambre. – y le hago puchero.
-que quieres para comer.
-quiero hamburguesa y helado.
-está bien – se sube a la moto y la enciende. – espérame en mi habitación ya vuelvo.
-oki. – él se va y yo entro a la casa, comienzo a caminar en silencio y subo para llegar a su habitación y a mitad de pasillo esta su hermano saliendo de su habitación.
-hey, hola cuñadita. – me dice Julián.
-hola, Julián. – no sabía que el supiera de que Andrés y yo estamos juntos.
-buscas a Andrés.
-ehh, en realidad no – le digo. – yo llegue con el pero salió y me dijo que lo esperara.
-oh ya está bien, - se me acerca y me da un beso en la mejilla. – yo voy de salida, una hermosa chica me está esperando. – dijo mientras se acomodó el cuello de la camisa.
-está bien, después nos vemos. – él se dirige hacia las escaleras y yo hacia la habitación de Andrés.
Entro a la habitación de Andrés y me recuesto en la cama, voy a aprovechar y le escribiré a mi mama para avisarle que me quedare hoy con Andrés, aunque no se lo he dicho a Andrés pero no creo que se moleste.
-mama, me quedare en casa de Andrés.
-está bien cielo, de todos modos voy a ver si salgo con Sara.
-ujumm, está bien mami te cuidas te quiero mucho.
-y yo a ti cielo. –bloqueo el celular, soy yo o está haciendo mucha calor.
Me levanto de la cama y cierro la puerta de la habitación de Andrés y me quito la ropa y la doblo, la dejo doblada sobre la silla del escritorio de Andrés y sobre ella mi bolso donde está mi libreta y cosas de la universidad.
Entro al baño que está en el cuarto de Andrés abro la regadera y comienzo a mojar mis pies, me gusta el agua fría para refrescarme, después de mis pies siguen mis piernas y después de estas me entró de lleno en la ducha mojando mi cabello.
Agarro el jabón de baño de Andrés y huele a él, ese aroma suave y tan varonil que desprende su piel, termino de bañarme y me envuelvo en la toalla que está aquí en el baño.
Salgo del baño y Andrés se encuentra en su habitación sin camisa.