-Al fin en casa... -Uno estiró sus brazos- De nuevo... Gracias chicos por el viaje y en concierto. –Nos rodeó por encima de los hombros- Ya veré una manera de pagarles el favor.
-Sólo usa un traje y te espero en el altar.- Dije, con una sonrisa de lado.
-Una guitarra no me caería nada mal... -JJ ajustó su gorro de lana- Y quiero ser tu padrino.-
-Maldición chicos, no pensé que fueran tan exigentes, y apuesten porque me veré sensacional en traje.-
-Puedo apostarlo... -peiné mi cabello ahora rojo-
Tomamos un taxi desde el aeropuerto hasta mi casa, Rapha estaba muy ocupado como para pasar por nosotros al igual que Cameron; eso no me molestó para nada, serían nuestros últimos minutos juntos antes de volver a la comodidad de mi cama por no sé cuánto tiempo.
-¡CASA! –literalmente me tiré al suelo- te extrañé tanto.-
-Andando enana, muero por un sillón cómodo bajo mi trasero todo el día. –Uno tomó una de mis piernas y comenzó a tirar de ella-
-Todo está muy calmado el día de hoy, ¿es día festivo?, ¿ya son vacaciones?.- Preguntó JJ.
-Las vacaciones inician la semana que viene y no, no es día festivo. –Me puse de pie- está muy calmado... Esto no me gusta para nada.-
Caminamos a la entrada un poco dudosos... Siempre que había tanta tranquilidad era porque alguien planeaba algo, ya se estaba volviendo una costumbre desde que Cameron volvió... Abrí la puerta lentamente, no tenía seguro... Otra cosa rara, mi madre jamás dejaba la puerta abierta... Ahí estaban "todos", con globos, un pastel mediano de chocolate y un letrero que decía "Bienvenidos... De nuevo", era la letra de Cameron.
-¡SABÍA QUE PLANEABAN ALGO! –Grité y corrí a Cameron-
-¡Bienvenidos chicos!, sé que no es una bienvenida a lo grande, pero supongo que lo merecen después de Alemania.-El chico anaranjado rápidamente correspondió a mi abrazo.
-Es suficiente, supongo que será gran momento para contarles todo lo que sucedió.- Uno levantó sus hombros.
-Ya vimos las fotos, así que supongo que no será muy difícil explicarlo.- Candy cruzaba sus brazos sobre su pecho mientras tenía una sonrisa difícil de explicar en su rostro, ¿morbo?, ¿felicidad?, ¿ambas?.
-Para nada, por cierto –JJbuscó en su mochila una bolsa de plástico- Traemos regalos para todos.-
-Idea mía –Uno erguió su cuerpo, poniendo sus hombros para atrás y sacando el pecho.
-La verdad que fue mi idea y él me lo ha copiado.-Admití-
-Pues veamos esos regalos, cortaré un poco de pastel.- Dijo Cameron mientras se acercaba al pastel con un cuchillo.
-Iré por los platos hijo, espera.-Le siguió su madre.
-Así que... Conocieron a Alex... el cantante –Rapha cruzó sus brazos sobre su pecho- Imagino que te reconoció Uno...-
-Así es, no sé cómo, cambié mucho desde la primera vez que los vi.-
-Eso... ¡ES GENIAL!, ¡NO PUEDO CREER QUE LE HABLASTE!, ¡QUE SE TOMARON UNA FOTO CON ÉL! –Ahí estaba mi hermano el fanboy-
Contamos nuestra experiencia desde que bajamos del avión, cómo eran los lugares, les enseñé más fotos que había tomado con mi cámara, sacamos los regalos, a Rapha le había traído una jarra de cerveza, obviamente sin cerveza incluida; a mis padres un reloj cuco, a los padres de Candy chocolates y a ella un dirndl, a Cameron y a su madre bombones y licor de Mozart, al padre de los Heim una agua de colonia y a su madre un collar con forma de edelweiss. Todos estaban muy emocionados con sus regalos, sobre todo Candy, ahora tenía su próximo traje para Halloween. Obviamente yo tenía más regalos escondidos en mi maleta para mi familia y Cameron, sólo que los Heim no lo sabían. Al llegar la noche, todos estaban de regreso en sus casas... Menos Cameron. Estábamos en mi habitación viendo películas, y como siempre, él acostado en el suelo, con un montón de cobijas y almohadas... Y con su nueva baqueta de Winterstorm.
-Deberías de aprender a tocar un instrumento...-Dijo sin despegar su vista de la baqueta.
-Toco la guitarra de aire, ¿no cuenta? –bromeé y me apoyé en mis codos sobre mi estómago para poder verlo- Tú tocas guitarra... Podrías enseñarme un poco.-
-Tal vez lo haga, así le darías uso a tu colección de plumillas.-
-Sí... Posiblemente... -Miré al techo unos segundos, recordando sus mensajes- ¿Por qué siempre enviabas "Te extraño"?... Digo, yo también te extrañaba, pero sabía que iba a volver pronto.-
-¿No puedo extrañarte Al?. –se apoyó en sus codos sobre su espalda- ¿No puedo?, eres mi amiga y, no hemos convivido mucho como queríamos.-
-¿"Te extraño" al inicio y al final de cada mensaje?, tú no eres así Cam, no eres tan sentimental.-
-Quiero recuperar los años de nuestra amistad... Me fui, me hice famoso, no te busqué... Me siento mal por eso, y sé que a ti no te importa... Pero te extrañé, ¿de acuerdo? –Pasó sus brazos sobre sus rodillas.
-...¿Estás molesto porque te lo pregunté? –miré a mis cobijas con pena- Perdona.-
-No... No me molesté. Sólo quiero que entiendas eso. –Miró por la ventana- Rayos... No puedo creer que me gustaras cuando teníamos 4 años. –susurró.
-¿Qué?, ¿disculpa?...-
-Nada –se puso de pie y acomodó su pantalón- Tengo que irme ya.-
Simplemente salió de mi cuarto sin decir una palabra más... No estaba segura si él estaba bromeando, si yo había escuchado bien... Ese comentario a medias no me dejó dormir, y claro, tampoco el hecho de que tenía aún el horario de Alemania en mi sistema. A la mañana siguiente debía de prepararme para ir a la escuela, sí, no se preocupen, había pedido permiso con algunos maestros para faltar una semana al menos, ya que había terminado con mis otras materias y mi promedio era casi perfecto... Me levanté, hice la rutina de limpieza personal y bajé a la cocina ya con mi ropa bien puesta... El rojo de mi cabello se estaba volviendo naranja... Así que podría teñirlo de nuevo pronto, sabía que no había elegido un buen tinte en Alemania, por eso se estaba desvaneciendo tan pronto.
-Al fin despiertas... Mamá y papá se fueron antes al trabajo, yo te llevaré a la escuela.- Rapha dijo mientras le daba un trago a su café.
-Me urge sacar mi licencia para conducir.-
-¿No te gusta que yo te lleve?, siempre pasamos buenos momentos.-
-Me encanta... Pero es abrumador siempre porque hay una o dos chicas que me preguntar por ti... Es difícil decirles que estás apartado para Candace, aunque sé que terminará con JJ.-
-Hablando de eso... Candace no dejó de venir mientras ustedes estaban fuera... Creo que ella y Cameron se turnaron para venir y vigilar tu habitación... Él no dejaba de hablar de ti y Candy de JJ, supuestamente "enojada", pero se nota que está loca por él.- Miró a su taza, tratando de quitarle importancia a sus palabras, sabiendo que lo que había dicho segundos atrás atraería mi atención.
-Sí bueno... -Miré el reloj de mi celular- ¡MALDICIÓN!, ¡voy a llegar tarde!, ¡SUBE AL AUTO!, ¡ANDANDO RAPHAEL!-
Cuando llegué a la Universidad, realmente me importó poco si la gente me veía, claramente mi cabello había sido castaño por 19 años y ahora era rojo; podía esperar cualquier comentario en este momento... Candace me iba a preguntar por él de nuevo y querrá hacer lo mismo. Corrí a mi salón de clases para llegar primero y ocupar mi asiento favorito, el último.
-¡OYE TEÑIDA!, deja de ser una antisocial de una vez por todas y vuelve a tu lugar de siempre – Candace entró meneando sus caderas-
-No... Dejó de ser mi clase favorita desde el despido de Nash.-
-Sólo era un profesor, en un par de semanas te olvidarás de ésta clase y de algunos compañeros que no pasarán la materia.-
-Dime que si lograrás salvarla, para no dejarme sola y hundida.-Me hundí en mi asiento, rogándole con mis palabras.
-Un 60 y listo, soy libre éste verano. –Dejó sus cosas en el banco a mi lado- Te queda muy bien ese tono de rojo, ¿lo retocarás pronto?.-
-Es raro que no me preguntes nada sobre Alemania, Cameron o Rapha...-Cambié de tema dudosa.
-Porque sé que te fue muy bien y quiero que recuerdes eso sólo para ti, que te siga haciendo feliz... En cuestión de los chicos, los vi todo el tiempo que te fuiste de viaje... No te preocupes... Contesta mi pregunta.-
-Posiblemente en las vacaciones lo cambie a magenta o morado, me gustaría seguir con los tonos cálidos.-
El timbre de entrada sonó, todos entraron y la clase comenzó... Al igual que mi distracción, sí, los mensajes de Cameron volvían, pero no sólo los de él, también los de JJ...
**Mensajes de Cameron**
"Harás algo ésta tarde?!?!??!!, tengo entradas para el cine, y con eso me refiero a que renté toda la sala para nuestro uso, así no nos acosan mis fans."
"Contesta lo antes posible pequeña demonia..."
"Olvidé que hoy volvías a clases"
"Por cierto... Lamento lo de anoche, no debí irme así, ¿crees que podamos hablar de eso?"
**Mensaje de JJ**
"Creo que en el concierto me quebré una costilla y hasta ahora siento el dolor... ¿Candy ha dicho algo de mi?"
"No quiero sonar molesto ni mucho menos urgido"
"No le digas que pregunté"
"Uno se hará un nuevo tatuaje... Y le acaban de asignar una misión secreta, nadie lo sabe, lo escuché al teléfono ésta mañana... No se supone que se había retirado??"
Bieeeeen, no sabía por dónde empezar, 1.- ¿ir al cine sola con Cameron?, 2.- Había olvidado lo que había dicho ayer y ahora mis mejillas estaban rojas... 3.- JJ realmente urgido por la atención de Candy y 4.- Uno tal vez se iba de nuevo... Me perdí completamente en mis pensamientos, no recuerdo nada más, sólo recuerdo que el viejo de mi profesor golpeó mi banco y todos comenzaron a reír.
-¿Soñando despierta, princesa? –Se burló Isabella- Debiste quedarte en casa.-
-Le arruinas la clase a los demás que sí estamos prestando atención, Allen.- Sarah dijo mi nombre con desprecio.
-De seguro recibió una muy mala noticia y ahora deba retirarse –Candace me defendió, mirándome para mentir.
-Sí, yo...-Pensé- Debo salir, es mi madre, dijo... Mi abuelo... -simplemente tomé mis cosas y salí, no tenía que darle explicaciones a nadie, mucho menos falsas, mucho menos a ellas. Me disculpé con mi profesor miles de veces y caminé por el pasillo hasta el baño- Dios... Pésima manera de iniciar el día...-
Miré mi celular nuevamente y contesté los mensajes, y ¡QUE SEA LO QUE DIOS QUIERA!, me miré al espejo unos minutos hasta que me calmé, tenía que mentir bien si iba a hacerlo o sería descubierta. Al volver al aula estaban leyendo un artículo, tomé mi lugar y le pasé un papel a Candy.
"Si alguien trata de atraparme, diles que mi abuelo se puso enfermo de último momento y que mi madre solamente me avisó. No dejaré que Isabella y Sarah se salgan con la suya, no de nuevo... NO CAMBIES NADA DE LA HISTORIA PORQUE SABRÁN QUE ES FALSA!, tampoco la memorices, así es como descubren a los asesinos que cubren sus pasos"
Las horas pasaron, al igual que la tortura, Candy me preguntaba a cada momento sobre los mensajes reales que había recibido, no pude callarme más y me vi en la necesidad de decirle ABOSLUTAMENTE TODO... Trató de aconsejarme sobre lo de Cameron, porque sí, le dije lo que ocurrió ayer por la noche y no, NO MENCIONÉ LOS MENSAJES DE JJ porque bueno, no lo vi necesario, sólo sobre la supuesta misión secreta de Uno. Al estar ya en casa, en mi habitación frente a mi laptop, recordé una página y una clave exacta de mi hermano para ver archivos públicos sobre su pelotón. No sé porqué lo estaba haciendo, mis dedos se movían en automático y no podía evitarlo.
-Caracoles –susurré- No puedo creer que esto sea supuestamente público. -miré una foto de Uno en su uniforme y después una de una habitación con armas.
-Porque no lo es –Rapha apareció detrás de mí, sacándome un susto- Nuestros archivos fueron hackeados y publicados anónimamente, ¿cuál crees que sea la verdadera razón por la que terminamos todo?, esto atrae enemigos niña, pueden cazarnos en cualquier momento-
-¡¿QUÉ?!, ¿Cómo es posible que digas eso de la manera más calmada posible?, ¿mis padres lo saben?.-
-He visto cosas peores que mi propia muerte, -suspiró- No puedo decirle a nadie hasta que nuestra guerra acabe, así que tú tampoco abrirás la boca.-
-Imagino que...- Fui interrumpida olímpicamente.
-No, a mi no me reclutaron hoy, sólo a Uno.-
-¿Cómo sabes que te iba a preguntar sobre eso?, ¿cómo es que sólo reclutan a uno de los mejores tiradores, además de ti?-
-Estoy dado de baja por motivos médicos, Uno es el único francotirador que quedó vivo, claro, además de mi, de nuestro pelotón. De seguro la base sabe quién fue el responsable de filtrar nuestra información y ahora van tras él. Uno lo haría con gusto.-
Agité mi cabeza a los lados tratando de borrar todo de mi mente antes de decir alguna estupidez o confesarle a alguien- Cambiemos de tema... Cameron me invitó a "salir"... Al cine...-
-¿Qué tiene eso? –se sentó en mi cama- Está genial, tienen tiempo sin salir.-
-Rentó una sala sólo para nosotros para... "Para que sus fans no nos molesten" –traté de citar- ¿No lo ves algo raro?-
-Sólo evita que te meta mano, tengo gas pimienta por si lo necesitas.-
-¡RAPHA!, por dios...Me refiero a... ¿Desde cuándo él hace algo así?, digo, sí salimos, pero, a tomar café, al centro comercial, viene y se queda hasta muy noche... La ida al cine solos es raro, pero no raro "acosador", ¿me entiendes?-
-No, las mujeres son difíciles y confusas –se puso de pie y salió de mi habitación.
La noche se llegó, Cameron y yo estábamos ya en el cine, por alguna tonta razón las entradas eran para "El Conjuro" y a mi me pareció genial.
-Bien, podemos sentarnos en cualquier lugar... tú eliges.-Cam me miró con una radiante sonrisa que cubría casi todo su rostro.
-Mmmm –Eché un vistazo- Rapha y yo tenemos la costumbre o tradición de sentarnos en la fila de en medio, en los asientos de en medio, es genial.-
-Bien pues... Que así sea.-
Me siguió en todo momento y me ayudó a pasar por entre las filas para evitar que mis torpes pies me hicieran caer, como siempre. A mitad de la película subí mis pies al asiento y puse ambos brazos en los reposabrazos, no sé si por el miedo, es suspenso o la emoción, era algo que siempre hacía el mejor momento de la película.
-¿Estás bien?, ¿tienes miedo?-
-No, para nada, la película es genial, pero le hacen falta cosas.-
¿Segura que no te asustase?- Preguntó insistente.
-No soy una cobarde Riley, amo las películas de terror.-
Al finalizar la película, nos quedamos unos momentos más ahí, al ser una zona "VIP", pidió cena para ambos, dijo que quería privacidad y un momento para nosotros solos, como los viejos tiempos.
-Así que, ¿cómo te fue en la escuela?...-
-Mejor hablemos de lo que realmente querías aclarar y no me cambies de tema, Monaghan.-
-¿En serio?, realmente no sé si deba hacerlo.-
Mi mejor cara de seriedad apareció- Dijiste que querías hablar de eso, ahora, abre la boca o salgo por esa puerta; sabes bien que no me gusta preguntar 2 veces y tampoco esperar.-
-Perdón, -agachó su cabeza- No debí hacer ese comentario sin dar una explicación, sí, te extrañé, me sentí "solo", me gustaste cuando tenías 4 años, pero... Ya sabes, no sabíamos nada de lo que era ese "sentimiento" realmente. –Tomó aire- Ahora veo que tienes más amigos y no puedo evitar sentir una pequeña chispa de celos, digo... Yo fui tu primer amigo y ahora... Ahora que quiero arreglar las cosas simplemente tú tienes una salida, un viaje o lo que sea. Pensé que yo sería el que te dejaría de lado de nuevo por mi vida, pero...-
-No te estoy dejando de lado Riley, lo sabes; sólo te estoy dando tu tiempo, entre tu fama, tus amigos, ¿dónde quedas tú?, tu tiempo, tu vida... Admito que me he separado de ti estas últimas semanas, no me siento orgullosa de eso y... También me siento sola y te extraño, pero... Ya no somos unos niños, tengo mi vida aquí, estudio... Tú tienes que viajar cada cierto tiempo y las video llamadas no son para nada suficientes.-
-Esto es como tener una relación a distancia... ¿Así se siente? –Preguntó, mirándome de nuevo.
-Cuando tenga una te doy la respuesta, porque simplemente he vivido sin mi hermano y mi mejor amigo la mitad de mi vida...-
-¿Sirvió de algo... -respiró profundamente- todo esto?, digo, no fue nada, extrañaba estar contigo, pero... ¿Valió la pena realmente?-
-Digamos que sí... Y sí, Te extrañé, ¿de acuerdo?-
-Me ha quedado más que claro, pequeña.-