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By Lee_MoniMoni

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Christopher Bang con 21 años de edad ya estaba acostumbrado a su vida con los sueños extraños que siempre tuv... More

Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16 - Final
Epílogo

Capítulo 5

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By Lee_MoniMoni

El lunes estaba de vuelta y Chris tuvo sueños el fin de semana, pero pudo dormir bien. De alguna manera estaba agradecido con eso. Sus ojeras aún no desaparecían y su cansancio aún estaba notable, pero definitivamente se encontraba mucho mejor. Sentía que todo había sido debido al museo así que estaba aún más agradecido con la exposición que pudo llevarse a cabo. Es cierto que los sueños continuaban y aún no estaba seguro de qué era lo que sucedía, pero al menos ahora podía pensar de manera correcta gracias a las horas de sueño normales que llevaba teniendo desde esa visita.

Ese día no compartía clase con Felix, pero si con Woojin así que no se sorprendió de verlo ya en el salón cuando entró. Woojin era una persona muy responsable y siempre llegaba antes, o al menos eso trataba. Todo dependía del horario de la clase y las distancias de los edificios de cada una. Por esa razón a Woojin le gustaba tomar clases que fueran en un mismo lugar, pero claro que siendo universitario eso a veces era algo imposible. Todo era suerte.

En fin, Chris se sentó a su lado y le sonrió. Woojin le devolvió la sonrisa, pero rápidamente regresó su vista a su libreta. Chris se asomó un poco y pudo ver que estaba adelantado tarea, de seguro de su clase anterior. Chris definitivamente no entendía como Woojin podía tomar una clase a las siete de la mañana. Al menos esta clase que tomaban juntos era la última del mayor así que luego siempre se iba a descansar un rato para así después ir al trabajo. Woojin tenía una vida demasiado perfecta, aunque tal vez era por todo lo que le ayudaron sus padres antes de poder ser independiente por completo.

Chris lo envidiaba un poco. Solo era un año mayor, pero Woojin tenía su vida completamente perfecta. Incluso tenía un puesto de trabajo estable y de seguro tan pronto terminara su bachillerato en Historia de Corea lo iban a ascender de puesto. Pero en fin, era envidia de la buena. Woojin seguía siendo su mejor amigo siempre escuchando sus relatos extraños sobre sus sueños.

-¿Cómo te ha ido estos días? Te ves reluciente. -le dice Woojin luego de cerrar su libreta.

-La verdad es que me siento reluciente. Estoy teniendo horas de sueño normales y eso me alivia en grande.

-¿Y los sueños?

-Como te dije la última vez, son nuevos. Digo, solo te había contado algo del primero que tuve normal en mucho tiempo, pero entiendes el punto.

-Y que yo recuerde no fue muy normal. -dice y alza las cejas de forma sugerente.

-Idiota. -dice Chris y luego ríe. Cuando mira a la puerta los demás estudiantes ya se encontraban entrando. La clase estaba por comenzar. 

-¿Entonces todo bien? -pregunta Woojin algo preocupado aún, pero Chris asiente con una gran sonrisa.

-Es como cuando era más joven, pero ahora parecen no tener un orden cronológico como cuando iba creciendo. Lo veo de diferente edad a Jeongin, y en realidad ayer vi a Hyunjin una vez más por un espejo.

-Debes contarme ese sueño. -dice Woojin emocionado, pero la charla de ambos se ve interrumpida por la llegada del profesor.

La charla debía esperar al medio día porque luego de esa clase Chris tenía una más, pero claro que Woojin esperaría con tal de ayudar a su amigo a resolver todo el asunto.

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Chris estaba saliendo de su clase cuando pudo ver a Woojin esperándolo en la entrada. Si Woojin estaba ahí eso significaba que no había ido a su casa a descansar como hace de costumbre y todo por escuchar su sueño. De verdad que era un excelente amigo.

Chris le sonrió y ambos tomaron rumbo a alguna cafetería cercana. Debían almorzar algo porque luego ambos irían a sus respectivos trabajo. Podrían hablar mientras comían.

Cuando ambos tuvieron sus almuerzos en su poder, ramen con huevo, se sentaron en una mesa algo apartada y comenzaron a comer. Cuando sus ojos se encontraron Chris supo que Woojin ya estaba listo para escuchar el sueño.

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Jeongin entró a la habitación de Hyunjin en completo silencio para tratar de no despertarlo en caso que este se encontrara dormido, pero casi grita y muere del susto cuando siente unas manos tomar sus hombros tan pronto cierra la puerta tras de si. Cuando gira solo era Hyunjin así que le golpea en el pecho para reprimir los gritos de susto que quería soltar.

-¿Cómo se te ocurre hacer eso? Si grito nos descubrirán. -se queja y ve a Hyunjin con el ceño fruncido.

Hyunjin estaba riendo bajito mientras se acariciaba el pecho por el golpe de Jeongin. El menor enojado era para miedo y golpeaba más fuerte de lo esperado.

-Ya ya ya. Lo siento. -dice bajito y lo abraza haciendo un puchero con su labios. -¿Me perdonas? -se queja como niño pequeño y Jeongin se ríe por el comportamiento del mayor.

-Ya, pero no vuelvas a hacer eso. -lo separa y entonces le besa la mejilla. -Por cierto... ¿Cómo sabías que vendría?

-Esa pregunta me ofende grandemente. -dice Hyunjin de manera dramática y Jeongin ríe. -Cumples los 17 años hoy porque ya es media noche. Estás hecho todo un hombre. -dice sonriendo y Jeongin se pone tímido de repente.

-¿Entonces solo lo supusiste por eso? ¿Y qué tal si yo decidía pasar mi cumpleaños de otra manera? -dice tratando de hacerse el fuerte, pero entonces Hyunjin solo le revuelve el cabello para luego reír. -Yah...

-¿Si sabes que te amo? -dice de la nada y Jeongin sonríe enternecido.

-También te amo, Hyunjin.

-Ven. -Hyunjin toma la mano de Jeongin y lo hala hasta que ambos quedan frente al espejo. -No puedo regalarte algo ahora ya que debo hacerlo mañana en la mañana en tu ceremonia de cumpleaños, pero espero que te guste esto. -seguidamente lo abraza por la espalda. Ambos estaban mirando en dirección al espejo. -Graba en tu memoria esta imagen porque siempre estaré a tu lado. Tú siempre estarás entre mis brazos y yo estaré entre los tuyos.

-¿Lo prometes?

-Lo prometo. -dice y luego ambos cierran los ojos para disfrutar del cálido momento.

No hacía falta grabar tanto la imagen en sus memorias cuando podían sentirlo con su propia piel. Los abrazos más cálidos que podían existir.

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-Hwang Hyunjin era un romántico de primera. Eso es súper cursi, pero al mismo tiempo siento que es algo que harías tú. -dice Woojin luego de escuchar la historia y Chris se ríe.

-¿Algo que haría yo? Ni siquiera he tenido pareja. ¿Cómo eso puede ser algo que haría yo?

-No lo sé. Simplemente creo que eres un sentimental de primera. Pega contigo. Tal vez por eso el destino decidió que tuvieras sueños con una persona así. Son parecidos. -dice y se encoge de hombros para luego beber de su agua.

Ahora que Woojin decía eso de hecho tenía mucho sentido. Antes de saber que veía los sueños desde la perspectiva de Hyunjin siempre creyó que era el mismo solo por el simple hecho de soñarlo, pero también por la razón de que todo era parecido a su personalidad. ¿Entonces el destino decidió darle ese don solo porque era parecido a Hyunjin?

-Bueno, si quiero llegar a tiempo a mi trabajo será mejor que me vaya. -dice Woojin luego de mirar la hora.

-Cierto. -dice Chris al ver que faltaban cincuenta minutos más o menos para la una de la tarde. -Y lamento que te hayas quedado hasta esta hora por mi.

-Hey, no tienes que disculparte por eso. Eres mi mejor amigo. Nunca te dejaría. -dice sonriendo y se levanta. -Te veré luego. -se despide con la mano y Chris hace lo mismo.

Chris se queda varios minutos más en la cafetería terminando de beber su jugo y cuando unos minutos más pasaron decidió salir del lugar. Iba caminando con calma hacia el departamento en el que trabajaba cuando a varios pasos pudo ver a cierto fotógrafo tomando algunas fotos de un árbol. Se acercó sonriendo y se colocó a su lado esperando a que terminara.

Minho estaba tan entretenido tomando la fotografía que si sintió que alguien estaba a su lado, pero no tenía el tiempo de mirar si quería que la fotografía quedara bien. De seguro solo era una persona admirando su trabajo, quien sabe. Cuando se giró solo se sorprendió un poco y luego sonrió en grande.

-¡Hey! ¡Chris! -dice sin dejar de sonreír y Chris le devuelve la sonrisa.

-Es bueno ver que no estás enfermo.

-Lo mismo digo. -dice y entonces comienza a apagar su cámara. -¿Qué haces por aquí?

-Mi Universidad queda justo al frente. -dice y señala. -De hecho yo debería preguntar qué haces tú por aquí.

-Cierto. -dice Minho al recordar. -Y bueno, tomando algunas fotos antes de entrar al trabajo. Entro a la una.

-Qué casualidad. También entro a la una. -dice eso y ambos ríen. -¿Y en dónde trabajas?

-Dos calles más abajo en una oficina de óptica. Soy secretario ahí.

-Interesante. Un artista en una oficina. -dice en forma de broma y Minho ríe.

-Bueno, por algo debo empezar. ¿No es así?

-Créeme que lo entiendo. -con esas simples palabras Minho vuelve a sonreír.

-Bueno, te dejo. Debo llegar ya al trabajo. Te llamaré en algún momento. -dice sonriendo y entonces comienza a caminar hacia su trabajo.

-¡No si yo lo hago primero! -le grita y Minho ríe.

-¡Ya veremos! -le grita de vuelta y entonces se voltea para seguir caminando.

Que buen comienzo de turno para ambos.

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Chris llegó a su hogar luego del trabajo y se tiró al sillón dejando su mochila a un lado. Estaba mirando a la nada cuando su teléfono comenzó a sonar. Al ver quién era la persona que llamaba no pudo más que sonreír y contestó sin más.

-Te dije que ya veremos. -es lo primero que escucha del otro lado y Chris ríe.

-Bueno, pues si fuiste el primero en llamar. ¿A qué debo tu gran llamada?

-Nada en especial. Solo quería ser el primero en llamar. -ambos ríen luego de eso. -Pero hablando en serio. El fin de semana iré a una exposición pequeña de fotografía. Felix no quiso acompañarme.

-¿Es eso una invitación? -pregunta Chris luego de un par de segundo de silencio.

-Me caes bien. Si no tienes nada que hacer me gustaría que me pudieras acompañar.

-¿Cuándo sería exactamente?

-El sábado en la noche. Es un evento algo formal aunque sea pequeño. ¿No te molesta esa parte?

-Para nada. Ahora tengo una excusa para vestir bien. -Minho se ríe del otro lado y Chris sonríe.

-Bueno, te llamaré luego para planificar bien. Ahora debo ir a casa de Felix a tomarle unas fotografías. Es mi fiel modelo para la clase.

-Bueno, con tu destreza y la belleza de Felix creo que todo saldrá bien.

-Nunca has visto mis fotografías. ¿Cómo sabes de mi destreza? -pregunta interesado.

-No lo sé. Solo presiento que debe ser excelente.

-¿Y entonces mi primo es bonito?

-No te pongas celoso. Creo que eres más bonito. -Chris dice eso último sin pensar, pero ya no podía arrepentirse.

Estaba comenzando a sentirse nervioso al no escuchar ninguna contestación de parte de Minho, pero es que el menor estaba buscando la manera de hablar de nuevo sin tartamudear y también estaba rojo hasta las orejas. Cuando Minho pudo calmarse luego de darse un pellizco en el brazo le habló de nuevo a Chris.

-Lo sé. Soy perfecto. -dice y Chris ríe. -Te llamo luego.

-Claro. Cuídate. -le dice y entonces escucha que Minho cuelga el teléfono.

Chris aleja el celular de su oreja y entonces sonríe amplio luego de asegurarse que la llamada estaba colgada, como si Minho pudiera verlo a través de la pantalla. Luego de eso decidió tomar una ducha para comenzar con una tarea que le habían dejado. Una vez todo listo decidió ver alguna película ya que era temprano y estaba durmiendo de manera normal. Cuando dieron cerca de las diez de la noche decidió ir a la cama y dormir. Está bien que ya estaba durmiendo normal, pero debía seguir durmiendo temprano si no quería parecer más muerto que vivo siendo universitario.

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Jeongin se encontraba haciendo una danza de espadas junto a su hermano mayor para entretener en un pequeña fiesta que se llevaba a cabo en el palacio Yang por el cumpleaños de la reina. Hyunjin veía todo sonriendo de manera amplia sin poder apartar la mirada de su novio. Cuando la danza acabó comenzó a aplaudir solo porque todos lo hicieron. Ni siquiera se había dado cuenta que la danza había acabado por estar tan embobado observando a Jeongin.

Luego de los agradecimientos ambos príncipes Yang fueron a sentarse al lado de sus padres y la ceremonia continuó de manera amena. Cuando todo hubo acabado Jeongin fue al jardín trasero y le dio una mirada a Hyunjin. Sabía que quería que lo siguiera así que luego de unos segundos fue a verlo. Se sentó al lado de Jeongin en el césped. El menor miraba al cielo. Hyunjin confundido miró en la dirección que observaba su novio, pero no veía nada especial.

-¿Qué observas?

-La estrellas.

-Salen todas las noches.

-Pero no siempre salen igual. Hoy es especial.

-Creo que por ser el cumpleaños de tu madre debe ser especial. -Jeongin niega divertido, pero no deja de mirar las estrellas.

-No sabría explicarlo. Solo siento algo en mi corazón cuando veo las estrellas en la noche. Es como si me hablaran y todas las noches es diferente. Hoy siento que es especial.

-No termino de entender lo especial. -dice Hyunjin rendido y observa a Jeongin.

-Tal vez solo hace falta observas las estrellas a tu lado para hacerlo especial. ¿No es así? -Jeongin por fin aparta la mirada del cielo y observa a Hyunjin sonriendo amplio haciendo así que sus ojos sean dos adorables líneas.

-Tal vez sea así porque tu eres la estrella más brillante en este universo.

Jeongin se rió bajito y Hyunjin sonrió al ver a su novio siendo tan adorable. Quería besarlo, pero no podían arriesgarse a hacerlo en pleno jardín del palacio. Por esa razón solo revolvió su cabello, pero sabía que Jeongin había entendido su acto cuando su sonrisa se amplió un poco más y de esa manera provocó que la sonrisa de Hyunjin se ampliara igualmente.

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