Luego de haber tomado una ducha relajante me decidí continuar con una pequeña parte de mi vida cotidiana. Busque en la TV alguna película que me pareciera interesante. Estaba por acomodarme en el suave y calidad sillon cuando de repente alguien llama a la puerta.
¡Joder! Estoy empezando a deducir que el destino me odia. Solo quiero un momento de comodidad ¡por favor!
Que mas da, me levanto y comino como si me pesaran los pies, antes de abrir la puerta preparo mi cara de amargado que diga ''¿que coño quieres?'' a ver como me va. Al abrirla y ver quien estaba parada en frente de mi, mi expresion cambio.
-Seguramente no me esperabas a mi -sip, era Luna con una gran sonrisa.
-Hey...hola -de verdad esto me sorprende- ¿que haces aqui?
-¿Acaso hay algún problema en visitar a mi novio? -rie un poco, me imagino que ha de ser por mi expresión.
-No, para nada -que poco cortes soy- discúlpame...¿quieres pasar?
Me hice a un lado para que pueda pasar, ella se dirigio a la sala principal, y yo atras de ella.
-¿Quieres algo de tomar? -pregunte.
-No te molestes cariño, esta bien.
Ella se sentó en uno de los muebles, y no se porque coño dude en hacerlo yo tambien, pero bueno, ¡lo hice! me sente a su lado lo cual empezo a ser algo incomodo ya que al parecer no decimos ni una sola palabra.
-¿Y como va Joyce? -pregunta rompiendo el silencio.
-¡Oh! que mal novio soy -me tire hacia atras cubriendo mi rostro con mis manos- se me ha olvidado de decirte algo muy importante...
-¡¿Desperto?! -volteo a mirarme lo mas rapido posible, su rostro esperaba una respuesta para desilusionarse o alegrarse.
-Perdóname si esto me hace calificar como un mal novio...si, despertó.
-¡Oh por Dios!...¡tengo que ir a verla!
-Espera -la detuve agarrándole del brazo antes de que se levantara- Hoy le harán varios exámenes, no creo que la puedas ver a gusto.
-Ya veo -se recostó en mi pecho, yo solo lleve mi mano a su cabello para acariciarla- bueno, al menos ya me siento mejor sabiendo que ya despertó.
Hubo un pequeño silencio y empezaba a sentirme cómodo con esto: ella y yo sentados frente al televisor, el volumen era moderado. A primera vista parece como si estuviéramos prestando atención pero en realidad estamos solo allí, sentados, viendo a la nada y pensando mucho.
-Ehm oye ¿puedo preguntarte algo? -pregunta Luna
-Si claro -respondí.
-Tu...-por un momento se mantuvo en silencio mirando al piso, luego volvió la mirada a mi haciéndonos conectar al instante- ¿tu recuerdas el día en que comenzó todo? ya sabes a lo que me refiero, lo de nosotros...nuestra relación, okey.
Por un momento me extraño que preguntara eso, obviamente lo recuerdo pero ¿por que habría la necesidad de preguntarlo? bueno, tal vez este preocupada por nuestra relación, no la culpo.
-Cariño -dije mientras sonreía- no te ofendas pero, ¿en serio solo has venido para preguntarme eso?
-¡No! -de inmediato se dio vuelta sentándose bien con la intención de acomodarse en el sillón hasta quedar su cuerpo frente al mio- Claro que no, simplemente tengo curiosidad si recuerdas esa fecha tan especial. Si alguna vez te has inspirado a escribir algo sobre nosotros, un poema, un pensamiento, ¡lo que sea!. ¿Comprendes?
Me quede en silencio. Siendo sinceros, seria una pena decirle que ''NO'' eso sonaría muy cruel de mi parte, es mi novia y se merece lo mejor de mi. Sonreí, levante la mirada hasta chocar con la de ella. Tome su mano, me levante obligandole a ella también a hacerlo y la lleve a mi habitación. No tenia nada preparado para ella específicamente, pero si hay algo que probablemente le ha de gustar. Abrí mi armario, coloque unas cuantas ropas encima de mi cama hasta que por fin era visible, un cartel hecho por mi mismo, varias fotos en donde estábamos juntos y el centro escrito en letras grande la fecha que es tan especial para nosotros.
<<19/08/2015>>
-Mi amor -dijo con una voz quebradiza aun viendo mi gran obra de arte- de verdad...nose que decir.
Me coloque a sus espaldas, la abrace cubriéndola por completo y a la vez impidiéndole la movilidad de sus brazos, ella solo puso sus manos en la unión de los míos.
-Podría escribir muchas cosas de nosotros -dije- las cosas que me haces sentir y las cosas que me provocas hacer con el único deseo de hacerte feliz. -ella se dio vuelta a mi manteniendo la cercanía de nuestros cuerpos- ¡Hey!...yo te amo. Eres el amor de mi vida. Eres la excusa perfecta para amar eternamente. Aún si nuestro tiempo junto se ha reducido, no importa que día sea, no importa cuánto tiempo pase sin vernos, siempre te voy a amar más que a nada. Una vez escuché a alguien decir que muchas veces la gente no sabe lo que promete cuando lo promete. Pero yo lo sé y estoy seguro de ello. -puso sus manos en mis mejillas, sus ojos se iluminaban, era perfecto el momento- Te amaré más cada día y siempre serás lo más importante para mí. Nuestra historia apenas va a empezando y tendremos un por siempre solo para nosotros. 09... es el día en que nos comprometimos. Me parece que es una fecha bastante especial, porque...joder, son cuatro hermosos meses junto a la chica más hermosa que ha pisado este planeta, verdaderamente eres hermosa, y sabes hay un montón de cosas que me gustan de ti y entre ellas es la forma en la que me miras, joder, no sabes lo que una mirada tuya provoca en mí, me haces poner nervioso, emocionado, me enamoro cada vez más, me haces sentir especial, todo eso en un mismo instante, tienes unos hermosos ojos y quiero que sepas que me gusta perderme en ellos, son perfectos...o el éxtasis en tus labios, Dios dulces labios, que hay veces en las que me muerden, pero tienen esa dulce mordida que para nada me molesta...y joder, tu hermosa sonrisa, esa sonrisa que fue el primer recuerdo que tuve de ti, que he considerado la sonrisa más hermosa que existe..Verdadera belleza es la que hay en ti, sin comparación a nada existente, podría mencionar mas partes que me gustan de ti, pero en si sabes que me gustas tú completamente. Bueno ese no es el punto...Sino, lo es lo que representas tú y todo el tiempo que compartes conmigo, amor mio.
Coloco, delicadamente, sus manos en mi nuca y sonriendo hasta casi derramar una lagrima, acerco mi cabeza a la suya hasta dejar chocar nuestras frentes.
-Solo diré algo -dijo acercando sus labios a los míos- Contigo el mundo sobra, ¿entiendes eso?...Sabes que te amo y por algo me enamore de ti. Eres lo mejor que me ha pasado. Eres importante para mi y te lo dicho muchas veces -ríe un poco- Te amo.
Sonreímos mutuamente por un momento, rozamos nuestro labios hasta caer en la tentación de besarnos, puse mis manos en su cintura. Ella de inmediato, sin dejar mis labios, de un pequeño salto se trepo a mi, sostuve su cuerpo poniendo mis manos en sus muslos hasta casi tocar su trasero.
Delicadamente la recosté en mi cama, cada vez los besos eran mas suaves y apasionados, mi mano acariciaron su cintura mientras ella a intentos desesperados logra quitarme la camiseta. Vuelvo a ella, vuelvo a sus labios, esta vez dispuesto a quitarle la blusa, es lo que estorba en este momento.
Dios, deseo tanto que ella escuche mis pensamientos...
''Tus palabras, tu voz, tus labios, tu cabello, tu cuerpo, la manera en que haces que se sienta...Joder, dulce sensación de éxtasis y lujuria...Nos invade a ambos, ese deseo de hacer esto...Tus labios contra los míos, y mis brazos enlazando los tuyos...Amor, pasión, felicidad, dulce sensación de placer al sentir tu cuerpo.
Los dos deseando que ese instante se haga eterno, no nos importa nada más. Somos nuestros, el momento es nuestro...cometiendo actos que muchos dicen ser prohibidos. No hay nada mas, no hay mejor que disfrutar de esa gran confianza y este gran amor que nos tenemos, no hay nada mas y nada mejor que sentirte mas cerca de mi...''
Acomodados en la suavidad de mi cómoda cama, mi bazo abrazándola, ella arrimada a mi pecho; estamos casi desnudos, joder, esto es perfecto. Continuamos con pequeños besos, no nos hemos extendidos a hacer algo mas que esto, considerando que mama puede llegar en cualquier momento es de reír. El punto es que no quiero que mama conozca de esta manera a mi adorada Luna, quiero que sea algo mas especial.
De una forma tierna y delicada aparto sus labios de los míos, recostó su cabeza en mi pecho, yo acariciaba su hombro mientras que ella mi torso.
-¿Cuanto crees que dure todo esto? -pregunta Luna.
-¿Cuanto quieres que dure?
-Es tan obvia mi respuesta -lentamente se levanta y se coloca a horcajadas encima de mi- pero me aterra la cruda realidad que tal vez se presente en un futuro.
La mire varias veces, ella se mantenía cabizbaja, puse mis manos en sus muslos y en movimientos verticales las acaricie, obviamente se lo que decir para salvar el momento.
-Pequeña y linda dama -inmediatamente ella vuelve su mirada a la mía- ¿Te quedaras conmigo para siempre?
Ella muestra esa dulce sonrisa que tanto me gusta ver en ella.
-Claro que si mi amor -respondió.
-Pequeña y linda dama, aunque estés lejos puedo sentirte a mi lado -continué con mi discurso.
-En estos momentos estoy tan cerca de ti -dice mientras se acercaba su rostro al mio.
-Pequeña y linda dama, tu amor me mantiene fuerte.
-¿Ah si? creo que muy fuerte -estando nuestras narices al roce, ella acuesta su cuerpo encima del mio.
-Pequeña y linda dama, no soy perfecto, pero siempre te daré lo mejor de mi -nuestras voces empiezan a agitarse y a ser mas profundas.
-Eres perfecto para mi -esta vez hace roza sus labios con los míos.
-Pequeña y linda dama, te doy las gracias por haber entrado a mi vida -lleve mis manos a sus mejillas.
-Lo haría otra vez si volviéramos a nacer -ríe un poco.
-Pequeña y linda dama, eres la alegría de mis días -sonrió a la vez que ella también lo hace.
-Tu también lo eres mi amor -hace intentos de besarme pero prefiere que termine.
-Pequeña y linda dama, sabes que Te amo.
Por un momento nos miramos fijamente a los ojos, luego los cerramos y nos dejamos llevar por la tentación de besarnos con mucha pasión, delicadamente y de una manera tierna hago que mis dedos recorran la parte inferior de su espalda.
-Siempre encuentro la manera de volver a tus labios linda -dije separando un poco mis labios.
-Jamas lo dejes de hacer -sonrie y luego vuelve a mis labios.
Sonríes y me haces volar. Eres la razón del latir de mi corazón, esta noche somos tu y yo.