Cuando El Otoño Llega

By dreams_19

46.5K 3.5K 614

Después de una amarga y dolorosa ruptura con el que fue su amor de verano, Maddy se ve obligada a continuar c... More

Prólogo
Capitulo 1: Esos ojos...
Capitulo 2: ¿Reencuentro?
Capitulo 3: No es mi día
Capitulo 4: El Diario
Capitulo 5: Bodas y Elfos
Capitulo 6: Mi raro y loco vecino
Capitulo 7: Visitas inesperadas
Capitulo 8: Un plan
Capitulo 9: Te necesito
Capitulo 10: Problemas
Capitulo 11: Lo siento
Capitulo 12: Luces
Capítulo 13: No me gusta la Navidad
Capitulo 14: Grano en el culo
Capitulo 15: Me voy a casar con un gato
Capitulo 16: ¡Feliz Navidad, Travis!
Capitulo 17: Si no sientes, no duele
Capitulo 19: Plan M
Capitulo 20: No soy una princesa
Capitulo 21: Un accidente
Capitulo 22: Despierta
Grupo de Whastapp
Capitulo 23: ¿Imaginación?
Capitulo 24: Mi mejor amiga
Capitulo 25: Quiero recuperar a mi hermana
Capitulo 26: La operación
Capitulo 27: Travis
Capitulo 28: Sentimientos.
Capitulo 29: Desaparecido
Capitulo 30: Café
Capitulo 31: Tierra, trágame.
Capitulo 32: ¿Celosa? ¿Yo?
Capitulo 33: Dividida
Capítulo 34: Incendio
Capítulo 35: Pesadillas
Capitulo 36: Sonrojos
Capítulo 37: ¿Cita?
Capítulo 38: Nos vamos de boda
Capitulo 39: ¿Te casarías conmigo?
Capitulo 40: Un nuevo comienzo
Capitulo 41: Pasará
Nota de la autora
Capítulo 42: Tú
Capítulo 43: El silencio de las estrellas
Capítulo 44: Obra de teatro
Capítulo 45: Se feliz
Capítulo 46: Elecciones
Epílogo
Nota de la autora

Capitulo 18: Borracho

963 86 2
By dreams_19

Unos minutos después, con un chocolate caliente en la mano y una manta alrededor de los hombros, consigo calmarme.

-Lo siento -digo limpiandome la cara y evitando mirar directamente hacia Anna.

-No lo sientas. Está bien, eres mi amiga -dice con una media sonrisa.

Sonrío ligeramente al escuchar sus palabras. Se siente bien, sobretodo después de pensar que nunca más las volvería a oír.

-Ahora, haz el favor de limpiarte esa cara. No te ves bien toda llena de lágrimas y roja como un tomate. -dice con el ceño fruncido.

Hago lo que me ordena, y voy hasta el baño, donde me enjuago la cara con agua fría repetidas veces. Cuando vuelvo al salón, las tazas de chocolate se encuentran acompañada por unas varias galletas.

Mi cara se contrae al verlas. Hace siglos que no las pruebo (vale, tal vez no siglos, pero mucho tiempo). Traen demasiados malos recuerdos.

Me siento al lado de mi amiga, que suspira y me mira.

-¿Y bien? ¿Vas a contarme lo que pasa o me voy a tener que quedar aquí toda la noche?

Por un segundo, me planteo decirle que se quede. Pero no puedo, sería demasiado egoísta por mi parte. Suficiente que esté aquí en vez de estar con su familia, y con sus amigos. Las ganas de llorar vuelven a mi con rápidez al pensar en todo lo mal que la habré hecho pasar, y, sin embargo, ahora está aquí, conmigo. Las retiro rápidamente.

-¿Te vale un resumen? -pregunto, mordiendome el labio y jugando nerviosamente con la taza entre mis manos.

-Supongo que tendré que conformarme con eso.

-Mi hermano me odia, mi familia ya no me quiere, no tengo a nadie excepto a mi vecino, Dean es un idiota -digo de carrerilla.

Se siente raro contandole a alguien las cosas, aunque solo sea por la superficie. Me he acostumbrado a guardarme todo para mi misma en estos ultimos años.

Antes de que a mi.amiga le de tiempo a abrir la boca, un enorme estruendo viene desde fuera del piso. Nos levantamos de golpe y camino hasta la puerta, sin saber exactamente qué me voy a encontrar.

La imagen de un tambaleante Travis intentando abrir la puerta de su piso hace que me extrañe. ¿Qué narices...?

-¿Papá? ¡Deja de tomarme el pelo y abreme! -le grita a la puerta poniendo sus manos en las caderas.

Corro apresuradamente hasta acortar la poca distancia que nos separa, y le toco el brazo. Da un respingo y me mira, primero con el ceño fruncido, y después con una enorme sonrisa.

-¡Vecina! -exclama, y se tira sobre mi en un abrazo.

Arrugo la nariz ante el olor. Destila alcohol.

-Tu le vas a decir a mi papá que me abra la puerta, ¿verdad? -pregunta haciendo un puchero.

-Mm... Si, si. Travis, ¿cuanto has bebido? -le pregunto mientras le sujeto del brazo para evitar que su cara se encuentre con el suelo.

-Perdí la cuenta -dice arrastrando las palabras, con una sonrisa de medio lado.

Miro a Anna alarmada. Mi amiga, observando la escena desde la puerta, suspira, y después se acerca a mi para ayudarme a meter al chico dentro de mi casa.

Tras más de diez minutos (el chico pesa demasiado, y sus tonterías nos hacen perder tiempo), por fin conseguimos sentarle en el sillón. Se deja caer dandose un fuerte golpe en la cabeza, pero solo ríe.

Demonios, está peor de lo que pensaba.

-Voy a por agua -dice Anna desapareciendo por la puerta de la cocina.

-No me gustan los gatos -suelta el chico de repente.

-Vale -digo, mirando a todos lados, nerviosa.

No se como tratar con borrachos. Normalmente suelo ser yo la que está en ese estado.

-¿A ti te gustan?

-No mucho -contesto, optando por seguirle la corriente.

-Pues no vamos a poder tener un gato cuando nos casemos -comenta frunciendo el ceño.

-¿Casarnos?

-El Capitán América está de acuerdo.

Oh Dios. Por favor Ana, aparece.

-¿Mi padre no ha venido todavía?

-No, Travis.

-¿Por qué no?

Mi vecino me mira con una carita de niño pequeño que s eme hace irresistible. Me muerdo el labio, no puedo decirle que su padre no va a venir.

-Él... Está duemiendo.

-¡Vamos a llamarle! -exclama, dandome un susto, y se levanta de golpe. Después, se deja caer de nuevo, dandose otro golpe.

Eso no puede sentarle bien.

Por fin, mi amiga aparece con un vaso de agua fría y una jarra llena de agua.

-Vamos, Travis. Bebete esto -le dice dandole el recipiente de cristal.

El chico niega haciendo un puchero de niño.

-Yo no quiero beber.

-Vamos, bebe -le digo poniendo el vaso en su boca, pero frunce los labios de tal forma que no pasa nada del líquido- No te comportes como un bebé.

Tras muchos intentos, Anna y yo suspiramos. Esto es imposible.

-Maddy, me tengo que ir. Voy a llegar tarde -me dice mi amiga mirandome apenada.

Me limito a asentir con la cabeza y le doy um abrazo de agradecimiento.

-No te preocupes, me las apaño sola con este -digo, señalando a mi vecino, que se encuentra cantando la canción de Doraemon en el sofá.

Acompaño a mi.amiga hasta la puerta. Cuando vuelvo al salón, Travis ha desaparecido. Resoplo, frustrada, ¿dónde demonios está?

La almohada que impacta en la parte posterior de mi cabeza me indica la posición en menos de un segundo. Gruño y me giro con el ceño fruncido.

-¡Fiesta! -grita el chico, que empieza a hacer movimientos extraños, como si estuviera bailando o algo por el estilo.

-Ya has tenido demasiada fiesta por hoy -me acerco gruñendo a él, pero echa a correr antes de que pueda alcanzarle.

-¡Nunca hay fiesta suficiente! -levanta los brazos y sigue haciendo sus raros movimientos.

Suspiro. Va a ser una larga noche.

Media hora después, me estoy dando de cabezazos contra la pared, literalmente. El chico no para quieto. Me ha contado su vida, la del corderito que supuestamente ha secuestrado, y no me para de preguntar por su padre. Aparte de otras muchas más tonterías que ha soltado.

-Te ves borrosa -me dice riendose.

No contesto, una mirada matadora es suficiente. Declaro que nunca más en la vida volveré a cuidar a alguien borracho. Benditos los que aguanten. No estoy dentro del grupo.

-Oh, me mareo -dice, y se inclina.

-¡No! -exclamo, y antes de que pueda vomitar, lo llevo corriendo como puedo hasta el baño.

Una vez inclinado sobre el inodoro, deja salir todo.

Verlo en ese estado, con los ojos llorosos y tan débil, me hace sentir mal. Si fuera yo la que estuviera así, el no me estaría tratando tan mal. Una punzada de culpa me pincha el estómago, obligandome a agacharme a su lado hasta que termina de echar todo.

-Venga, vamos a sentarnos. ¿Estás mejor? -le pregunto agachandome delante suyo.

Él se encuentra sentado encima del retrete, con las manos sujetando su cabeza, y a la vez, sus codos sobre sus rodillas. Me mira a través de sus dedos y asiente.

-Sabe mal -dice haciendo una mueca con la boca.

Abro un nuevo cepillo de dientes y se lo extiendo junto con la pasta. Cuando termina de lavarse los dientes, le vuelvo a sentar, y le ordeno que se quede ahí quieto, mientras voy hasta el salón en busca del vaso de agua.

-Ahora, tienes que tomarte esto, si no quieres tener un martillo taladrándote la cabeza mañana -le digo esbozando una sonrisa.

-Pero no quiero -se queja.

-Por favor, Travis. Hazlo por mi.

Me mira receloso, pero finalmente agarra el vaso y se bebe todo el contenido. Le doy otros tantos más, hadta que considero que es suficiente. El chico parece empezar a recuperarse poco a poco.

-El Capitán América está muy orgulloso de ti -le digo revolviendole el pelo.

-Lo sé. Me dejará acompañarle a salvar el mundo -dice hinchando el pecho, y me echo a reír.

Me quedo un rato más en el baño hasta que el chico empieza a cerrar los ojos lentamente, amenazando con quedarse dormido en cualquier momento.

-Venga, vamos a la cama -digo.

Le tomo de un brazo y le ayudo a levantarse, sin embargo, pierde el equilibrio y cae sobre mi. Con suerte logro mantener el equilibrio y no darme de bruces contra el suelo.

Quedamos muy cerca, y me mira fijamente con sus ojos.

-Tienes los ojos marrones -dice.

-Si. Y tú también.

-Son bonitos.

Por muy estúpido que parezca, siento como mis mejillas se encienden ante su comentario. Vamos, Madison. Está borracho, no sabe lo que dice.

-Necesitas descansar Travis -digo sacudiendo la cabeza repetidas veces, intentando quitar cualquier pensamiento.

-No quiero.

-No me importa.

-Dejame hacer una cosa al menos.

Me encojo de hombros, aparentemente tranquila, aunque por dentro me aterra que vaya a hacer algo estúpido, como ponerse a gritar al gato de la vecina, que está en la ventana. No sería la primera vez esta noche.

Sin embargo, es totalemente diferente lo que hace.

Siento sus labios sobre los míos antes de que me de tiempo a reaccionar. Una cálida sensación se expande a través de mi estómago, apenas un segundo antes de que el chico vuelva a apartarse.

-Llevaba queriendo hacer eso desde hace mucho tiempo -dice en un susurro y con una sonrisa.

Después, posa su cabeza sobre mi hombro.

Se ha quedado dormido.




Hola! Siento tardar tanto en actualizar, pero estoy de examenes y no me da la vida para nada😭😭

Espero que os guste el capitulo y muchisimas gracias por los votos que me estais dando y por las lecturas! De verdad que haceis que sea muy muy muy feliz!

Pasad un bueen fin de semana😘

_Dreams19

Continue Reading

You'll Also Like

111K 505 40
Y aquí vamos de nuevo
84.6K 5.1K 18
LIBRO TRES DE LA SAGA ÁMAME. Summer ha estado enamorada de Nikolai desde que tiene memoria, ella siempre ha estado consciente de que nunca pasaría a...
13.5K 722 41
¿Que pasará cuando se enteré?
35K 5K 58
AUTOR: 五月初 (1 DE MAYO?) NOMBRE ORIGINAL: 漂亮小夫郎 TOTAL DE CAPITULOS: 275 Shen Yuntang es un chico guapo, pero se cayó al río con el hombre perezoso de...