Mama told me not to waste my life
she said spread your wings
my little butterfly
Don't let what they say,
keep you up at night
and if they give you
SSSHH!
Then they can walk on by
Cuando coloqué Wings como tono de alarma en mi celular, tenía en mente despertar de una manera positiva. Ya saben, sonriendo, bostezando, estirando los brazos, queriendo comenzar otro gran día...
Pero lo único que realmente quiero hacer ahora es partir el celular con mis propias manos, lanzar el cadáver por la ventana, y continuar durmiendo.
Lastimosamente, no podía. Así que me levanté de la cama y fui a desayunar (siempre desayuno en pijama, es como mi onceavo mandamiento). Caitlin estaba terminando su desayuno mientras leía apresuradamente unos papeles cuando llegué a la cocina.
̶ Heeey –saludé, caminando hacia el refrigerador.
̶ Heeey –respondió sin dejar de ojear los papeles.
̶ ¿Examen?
̶ A primera hora –resopló, con una mueca.
̶ Ewgh.
Corté un pedazo de pan, lo abrí a la mitad, y coloqué dos rebanadas de queso dentro. Después le coloqué atún. Jamás sería tan bueno como los emparedados de Subway pero, hey, no eran malos.
̶ Ya me voy, saluda a tu novio de mi parte –dice Cait, levantándose.
̶ Lamentablemente no puedo entrar en libros, así que olvida ese saludo –le digo, llevando mi emparedado a la mesa. Caitlin lanzó una revista a la mesa.
̶ Eso parece real –me guiñó un ojo, y salió de la cocina- ¡Te quiero! ¡Nos vemos a la noche!
Frunzo el ceño y veo la revista.
Ah, claro, genial. Los turistas con cámaras sabían muy bien cómo sacar provecho a sus fotos. La portada de la revista éramos Harry y yo, en el suelo de SYCO.
̶ ¡No puedo creer que hayas comprado esto! ¡Estás derrochando el dinero en popo! –le digo, lanzando la revista nuevamente a la mesa- ¡No te crié así!
Escuché la risa de Caitlin, y luego el sonido de la puerta cerrándose.
Cuando terminé de desayunar subí para arreglarme. Eso significa cepillarme los dientes, utilizar el inodoro, y vestirme con jeans ajustados y alguna camiseta. La afortunada esta vez fue mi camiseta negra de Queen. Mi hermosa, preciada, y perfecta camiseta preferida. Sería capaz de ir a unos premios con esta camis- esperen, ya hice eso, jé.
Lo único que hice con mi cabello fue acomodarlo más o menos con mis manos, y después de tomar mi bolso, salí del departamento. No maquillaje, no tacones, no peinados detalladamente elaborados. Puedes pensar lo que quieras, realmente, pero así soy yo.
̶ Buenos días Charles –saludé al guardia del edificio, un señor anto, canoso y flacucho que me recordaba a mi abuelo.
̶ Buenos días, señorita –me respondió amablemente, y le sonreí.
Ese día me fui a SYCO en mi motocicleta. Se supone por gramática que es "una" motocicleta, pero me gusta ignorar eso y decirle "chico".
El camino fue igual de entretenido que siempre. Me gustaba ir en motocicleta por que la sensación era mí parecida a volar: el viento jugaba contigo y en contra, la velocidad esparcía la adrenalina en tu torrente sanguíneo, y el sonido de la motocicleta hacía de banda sonora. Frené en un semáforo. No me gusta detenerme, razón por la que, aun sabiendo que son necesarios, odio a los semáforos.
El sonido de otra motocicleta frenando se hizo a mi lado. Volteé, encontrándome con una figura masculina vestida con jeans y una chaqueta negra. Su rostro oculto con un casco protector y lentes de sol.
Admiré su motocicleta por un segundo. Era... magnífica, brillaba con los reflejos del sol.
̶ ¿Vas a SYCO? –me preguntó el chico. Linda voz.
̶ No lo sé, ¿es un intento de secuestro? –respondí.
̶ Te prometo que no –me dijo, y aunque tenía el rostro escondido tras el casco protector, sentí que sonreía- ¿Carrera?
̶ Hecho.
El semáforo cambio a verde cinco segundos después, y la carrera inició. No era demasiado camino que recorrer de aquí a SYCO, sin embargo, esos pocos kilómetros fueron interesantes. ¡Fue tan genial!
Cuando alcancé a ver el edificio, aceleré. Él también. Lo rebasaba por unos centímetros, pero luego él lo hacía, nos anivelamos, momento de tensión... empate.
Fui bajando la velocidad poco a poco hasta detenerme por completo, aparcando la motocicleta. El chico aparcó a mi lado. Me quité el casco. Luego él se quitó el casco, y pude observarlo mejor.
Su cabello era negro, si piel era tostada, y sus ojos eran marrones. Sus labios eran carnosos y estaba segura de que escondían una sonrisa preciosa. Él era realmente guapo.
̶ Buena carrera –le digo sonriendo levemente. Me sonríe se vuelta. Estaba en lo cierto.
̶ Corres bien, para ser una chica –m e dice. Y mi sonrisa se borra.
̶ ¿Eres machista?
̶ ¿Qué? No, no –niega con la cabeza apresuradamente- Era una broma.
̶ Genial, porque eso habría arruinado todo –le sonrío de nuevo.
̶ Jared May –tiende su mano.
̶ Aria Weather –la estrecho.
̶ Lo sé –asiente- Digamos que hoy es mi primer día como guitarrista de Free Style.
Agrando mis ojos.
̶ ¿Bromeas?
̶ La mayoría del tiempo, pero no ahora –sonríe.
̶ Woah, eso es genial. Es una gran banda –él ríe– Debo irme, se hace algo tarde y tengo una rueda de prensa.
̶ ¿Ahora? -pregunta, ladeando su cabeza. OMAIGASH ES ADORABLE. TENGO QUE FANGIRLEAR DE ESTO CON KATHIE.
̶ Sí, es para aclarar un rollo con Harry –digo. Después recuerdo que él no sabe quién es Harry-, un chico.
̶ ¿Tu novio?
̶ ¡NO! Digo, no.
̶ Eso es lo que circula por todos lados –se encoge de hombros, y ambos comenzamos a caminar.
̶ Para eso es la rueda de prensa. Queremos aclararlo todo de una vez. Pero, definitivamente no somos novios. Ni siquiera nos acercamos a ser amigos –resoplo, rodando los ojos.
̶ ¿Algo me dice que no se llevan bien?
̶ Has acertado –asiento. A varios metros de la entrada de SYCO hay una pequeña tarima con una mesa en centro. Hay dos sillas y dos micrófonos en ella, frente a muchos paparazis- Aquí me quedo yo.
̶ ¿Te veo luego?
̶ Síp –sonrío.
̶ Suerte –me sonríe de vuelta y KATHIE DÓNDE ESTÁS CUANDO TE NECESITO.
Doy la vuelta y camino hacia donde está todo. Me dirijo a la parte trasera de la pequeña tarima, y allí están Paul, Harry y Molly.
Harry y yo agrandamos los ojos al vernos.
Marquemos las diferencias en nuestros vestuarios: su camiseta es de The Rollings Stones, y la mía de Queen. Ya. Esas son todas las diferencias. ¡ESTAMOS VESTIDOS MALDITAMENTE IGUALES!
̶ ¿Qué demonios? –decimos al mismo tiempo.
̶ Asombroso –suspira Molly- ¿No podían buscar otro día para lucir como una pareja coordinada?
̶ Ya no hay tiempo de cambiar sus atuendos –dice Paul- Así que suban al escenario.
Miré a Harry, y él me miró a mí. Intenté omitir el hecho de que lucía guapo y moví mi cabeza hacia la tarima. Él asintió, y caminó junto a mí.
̶ Así que, ¿sabe tu novio que fuiste a mi casa para buscar consejos de moda? –pregunta sin verme.
̶ Obvio, él me acompañó. Tenemos selfies con tu perro -le digo, sin verle tampoco.
̶ No tengo un perro.
̶ No tengo un novio.
̶ Oh, genial, por un momento creí que me engañabas con una mala versión de Danny Zuko.
Abrí mi boca para responder, pero ya habíamos subido al escenario. Él tenía una pequeña sonrisa triunfante en el rostro cuando tomó asiento. Yo rodé los ojos cuando me senté a su lado.
̶ Buenos días –saludó Harry por el micrófono.
̶ Responderemos las preguntas, pero, por favor, no hablen todos a la vez. –dije yo, sonriendo.
̶ ¡¿Están ustedes en una relación?!
̶ No –respondimos ambos.
̶ ¿Les gustaría mantener una? –preguntó una reportera.
̶ Sólo somos amigos.
̶ Eso no contesta la pregunta –dice la misma reportera.
̶ Estamos aquí para aclarar los rumores –dice Harry- Lo que ocurrió con el celular fue un accidente. Dejé mi móvil en SYCO, y Aria lo encontró.
̶ No sabía que era de Harry cuando contesté la llamada –agregué- Y la revista malinterpretó todo.
̶ De todas maneras, la revista no debió llamar a mi celular personal sino a Paul, mánager de la banda, para acordar la entrevista –dijo Harry. Casi digo RT Harry, pero, mejor no. La seriedad.
̶ ¿Puedes explicar qué ocurrió ayer en los pasillos de SYCO, cuando un grupo de turistas los encontró juntos en el suelo? –preguntó otro paparazi. Volteé para ver a Harry, y él hizo lo mismo, al mismo tiempo. Decidí hablar yo.
̶ Veníamos de una reunión con nuestros respectivos mánagers para acordar esta rueda de prensa –dije.
̶ Ambos nos dirigíamos al mismo lugar, así que fuimos juntos. Pero Aria tropezó y me llevó con ella al suelo.
̶ Porque él me entretuvo –aclaré.
̶ Porque ella estaba siendo infantil –dijo él. Abrí mi boca con indignación.
̶ Tú comenzaste con las peleas de manos –le dije.
̶ ¡Tú comenzaste a correr! –dijo él. Iba a decir algo pero entonces una pregunta surgió entre el público:
̶ ¿Entonces en realidad ustedes se desagradan?
Ambos volteamos estilo niña-del-exorcista, y una avalancha de preguntas nos cayó encima.
̶ ¡¿Ustedes se odian?!
̶ ¡¿Es por eso que habían negado tanto una relación?!
̶ ¡¿O es una relación amor-odio?!
Miré hacia Molly, sin saber cómo responder. ¡Esto no estaba en el plan! Ella nos miraba con las manos en la cabeza, luciendo en realidad como maniática. Y Paul parecía intentar conservar la calma. Cuando captó mi mirada y la de Harry, hizo señas con las manos.
"No" movió sus labios y sus manos. Luego, con sus dedos, dibujó un corazón en el aire. Hizo alas con sus brazos. Imitó a un unicornio. Trazó un arcoíris de felicidad. Dio una vuelta de ballet.
̶ Creo que tienes que decir que eres gay –le susurré a Harry, sin dejar de ver a Paul. Le escuché resoplar.
̶ Se refiere al plan B. Debemos decir que somos amigos y nos amamos y vivimos felices y que cuando uno vomita su comida el otro la traga, ese tipo de cosas.
̶ Ah –volteé y acerqué mis labios al micrófono- Somos amigos y nos amamos y vivim-
Harry pasó un brazo por mis hombros y tapó mi boca con su mano.
̶ Ella se refiere a que es imposible que nos odiemos. Somos muy amigos, y nos respetamos como artistas mutuamente. Nos llevamos bien e incluso no descartamos la posibilidad de trabajar juntos en un futuro.
Eso fue como un giro de 586940 grados a la entrevista.
̶ ¡¿Están planeando dejar One Direction?!
̶ ¡¿Vas a de dejar Free Style?!
̶ ¡¿Van a separarse de sus bandas para trabajar en duetos?!
Quité la mano de Harry de mi boca y hablé:
̶ ¡No, no! No voy a dejar Free Style.
̶ Nadie va a dejar nada –se apresuró a decir Harry-. Ya hemos aclarado el asunto del celular, ha sido un malentendido-
̶ Al igual que las fotos en el pasillo de SYCO -interrumpí.
̶ Ha sido un placer, nos retiramos. Que pasen un buen día –dijo él, y se levantó. Aún tenía el brazo sobre mi hombro, y yo aún tenía cogida su mano, no me dio tiempo de deshacer la unión porque comenzó a caminar apresuradamente fuera del escenario, arrastrándome aposta con él.
Bajamos del escenario, y aun así no me soltó. Pasó por al lado de Molly y Paul, y continuó caminando, dirigiéndonos a las puertas del edificio. Solté mi agarre en su mano, pero él no soltó el suyo hasta unos segundos después. Su brazo quedó alrededor de mis hombros, sin embargo, y para cuando iba a rechistar, ya habíamos llegado. Ya me había soltado. Y se sintió extraño.
̶ ¡¿Están locos?! –chilló Molly, cuando ella y Paul también entraron al edificio- ¡¿Cómo se van a poner a pelear en media rueda de prensa?!
̶ No debieron de hacer eso, chicos –dijo Paul.
Ellos siempre me recordaron al típico cliché del policía bueno y el policía malo.
̶ ¿Y eso de los brazos y las manitas? ¡Tenían que fingir ser amigos, no amantes!
̶ Eso fue completamente necesario –intervino Harry-, ella estaba a punto de decir algo que arruinaría todo. Prácticamente nos salvé.
Molly y Paul se vieron, y suspiraron.
̶ Lo de trabajar juntos fue algo brillante, nos dará más publicidad y probablemente les favorezca en la situación –dijo Paul.
̶ Y tener una buena relación profesional-amistosa será un puente para que ambas bandas obtengan más fanáticos. -dijo Molly.
̶ No le dieron demasiada importancia al hecho de que vestían casi iguales –dijo Paul.
̶ En conclusión, no fue tal malo –dijo Molly- Pero no va a acabar por completo con los rumores.
̶ Aproximadamente, nos beneficiará un 65%, y nos fastidiará un 35% por los rumores –dijo Paul.
Son buenos en esto de ser mánagers.
̶ Estuvo bien –opiné, y me volví para ver a Harry- Pero no fue totalmente mi culpa, es decir, ¿qué otra cosa podía imaginar con la dramatización de Paul? -bufé.
̶ Ehm, estoy aquí al lado.
̶ Si no hubieras llegado tarde (acto de total irresponsabilidad, por cierto), ¡te habrías enterado del plan B y Paul no habría actuado tan gay!
̶ Sigo justo aquí.
̶ ¡JÁ! –me mofé- ¡No llegué tarde, llegué justo a la hora!
̶ ¡Exacto, habíamos acordado llegar media hora antes!
̶ ¡Tuve una emergencia!
̶ ¡¿Ah, sí?!
̶ ¡Sí!
̶ ¡¿Y qué fue?!
̶ ¡Mi auto se averió y tardé un poco revisándolo antes de tomar mi moto!
̶ ¡Y entonces decidiste quedarte a conversar en el estacionamiento!
̶ ¡Eso no- eso no viene al caso, estaba siendo amable. Si no lo hacía podía dañar mi imagen o algo.
̶ Eso es cierto -intervino Molly. Harry bufó.
̶ Como sea, ya que el tema está zanjado, tengo cosas más importantes que hacer.
̶ Oh, yo también tengo cosas más importantes para hacer que quedarme a darte explicaciones, como... –dije. Todo se quedó en silencio por un momento. Paul, porque siempre es tranquilo. Harry, esperando a que diga algo más. Molly, observando todo como una película- Eh, Molly, ¿qué tengo que hacer? –le susurré.
̶ Conocer a los instrumentos.
̶ ¡Conocer a los instrumentos! -le digo a Harry, y sonreí.
̶ Ah, qué bien. Yo tengo que ir a grabar un nuevo sencillo –me sonrió.
̶ Suerte -le sonreí falsamente. Cuando se volteó, y comenzó a caminar-: Ojalá desafine –susurré a Molly.
- Sigo aquí... –suspiró Paul- Voy a comprar ese libro de Las Ventajas de ser Invisible.