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Para aclarar: Este es un extra que estoy poniendo, tiene que ver con un cruce entre realidades (Por así decirlo) de la otras historia que publiqué, llamada Dreams (Sueños) y esta historia.
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─ ¡AHHHHHHHHHH! – un sonido se queco se escuchó después de aquel grito.
─ ¿Aún no aprendes a caer de pie? ¿Qué tipo de ninja eres, Boruto? – se quejó una chica azabache, quien había caído de manera delicada y precisa en el suelo.
Acompañándolos estaba otro azabache, exactamente el padre de la menor - ¿Qué pasó? Esta no es ... - habló dirigiéndose a una pequeña tortuga que traían consigo y a la vez mirando a su alrededor.
─ Lamento lo sucedido, aquella energía que recibí fue tanta que me vi obligado a hacer una parada para poder acostumbrarme mejor a ella – se escusó aquel transportador.
─ O sea ... ¿Te averiaste por mucha energía? Eso no suena tan normal viniendo de ti – reprochó la chica con un tono dulce que apaciguaba la situación - ¿Cuánto tiempo le llevará componerse? – preguntó amablemente.
─ Un par de horas señorita.
─ ¡GENIAL PODEMOS IR A COMER ALGO! – exclamó el rubio dando un brinco hasta que pudo entender la situación - ¿E-EN QUE ÉPOCA ESTAMOS?
La tortuga pareció pensárselo por un momento, haciendo que todos quedaran a la expectativa – En la misma que hace un rato solo que en una dimensión paralela.
─ Ya veo ... - dijo pareciendo convencido – Yu-yumei-chan tu ... ¿Entendiste? – se encontraba algo avergonzado, puesto que tiempo antes habían tenido un fuerte intercambio de palabras.
La chica por su parte sol suspiró agotada de seguir lidiando con las inmadureces del rubio – Lo que quiso decir es que estamos en otra realidad, genio – terminó con sarcasmo.
─ Yo descansaré un rato – fue lo último que dijo el animal en manos del mayor, quedando profundamente dormido.
─ ¿Entonces ...? ¿Nos quedaremos aquí sin hacer nada? – no habían pasado ni 15 minutos y el Uzumaki ya se encontraba aburrido – ¡Estamos en el bosque, aquí no debe haber nadie! – exclamó para empezar a caminar, alejándose de los otros 2.
─ ¡Boruto! – gritó el azabache intentando que el rubio detenga su paso, pero fue un caso perdido – Será mejor ir con él, no sabemos cómo sea esta aldea.
La menor solo asintió a lo mencionado por su padre y juntos partieron por aquel bosque, sin saber lo que les esperaría.
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Una chica con hermosos ojos rojos se encontraba practicando algo más alejada de su amigo rubio y el Sanin, con la excusa de no salpicarlos.
Se encontraban a tan solo 15 día para que se llevara a cabo la 3ra prueba de los exámenes chunin.
─ ¡Yo puedo! – se animaba mientras levantaba aquel dragón de agua lo más alto que podía. Pero su intento de jutsu se vio afectado por la aparición de una voz a sus espaldas.
─ ¡GENIAL UN DRAGÓN DE AG...! – sus palabras quedaron en el vacío cuando aquel gigante dragón se echara a perder, terminando en una gran cantidad de agua derramada en él y golpeándolo con fuerza, Ikari también quedó empapada, pero Boruto se llevó la peor parte al ser estampado contra un árbol - ¡E-ESTÁ FRÍA, DATTEBASA!
─ ¿Da...ttebasa? – aquello le sonó muy familiar a su amigo de equipo, por lo que volteó de inmediato.
Ojos azules y rojos chocaron, el muchacho por su parte quedó sorprendido de la chica quien a sus ojos era muy linda.
Ella no pudo evitar notar el gran parecido que había en ese joven de aparentemente su edad y su amigo Uzumaki – Lo lamento tanto, no me percaté de tu presencia – se acercó de inmediato tratando de curar rápidamente el daño que le causó - ¿Te encuentras bien?
─ ¡Boruto! – la voz de otra mujer hizo que se pusiera alerta en su dirección, notando que no solo era ella, sino también un hombre mayor quien era ligeramente parecido a su amigo Uchiha -¿Qué te pa ...? – cuando estuvo más cerca pudo notar la presencia de la Hatake, cosa que la puso alerta.
─ ¿Boruto? ... - su nombre incluso coincidía con su amigo ... Algo no está bien ... pensó e inmediatamente se separó en modo de defensa - ¿Quiénes son?
─ So-somos artistas itinerantes – la mentira era demasiado evidente en Boruto por lo que Ikari miró a la muchacha que parecía más seria.
Yumei por su parte se limitó a soltar un suspiro agotado de seguir con esa escusa – No tenemos las intenciones de pelear señorita ...
─ Ikari, solo Ikari – Sasuke se extrañó de escuchar aquel nombre, era la primera vez que conocía a alguien llamada así, además que la muchacha tenía la banda genin de Konoha – Pero yo pregunté quienes son, no que quieren hacerme o no – dijo mientras tomaba asiento en una roca, desde ahí dirigió la mirada al adulto.
─ Tenemos que irnos – ordenó él a los niños quienes rápidamente se le acercaron y justo cuando Sasuke activó su Sharingan para borrar la mente de Ikari, esta involuntariamente lo activó también - ¡¿Qu-qué?! – se encontraba asombrado por aquella demostración ... Ella también lo tiene.
─ ¡LO SABÍA! – rápidamente se paró con una sonrisa de victoria al darse cuenta que su corazonada no le estaba fallando - ¡JIRAIYA-SAN! ¡NARUTO! – al decir aquello los 3 "desconocidos" se pusieron nerviosos y no tardaron en querer alejarse, pero al ver el rostro despreocupado de la Hatake y su movimiento de manos, se quedaron - ¡EN UN RATO VUELVO, IRÉ POR COMIDA!
La voz del rubio y el peliblanco no tardaron en escucharse - ¡IKA-CHAN TRAE RAMEN POR FAVOR! – su pedido sacó una leve risa de la chica quien hasta ahora no se había presentado, Yumei.
─ ¡Voy contigo! – aquello puso nerviosa también a Ikari, pero rápidamente Naruto intervino para su suerte.
─ ¡NI SE LE OCURRA VIEJO PERVERTIDO! USTED TIENE QUE QUEDARSE HASTA QUE ME SALGA EL SAPO.
─ ¿Sapo? - preguntó el que hasta ahora era conocido como Boruto, recibiendo un asentimiento de cabeza por parte de la Hatake.
─ Es un jutsu que está perfeccionando antes de los exámenes chunin – soltó como si nada, pero en los otros menores la cara de sorpresa y entusiasmo no se hicieron esperar- Bien ¿Qué esperan? Vámonos antes que alguien más los perciba.
Ellos parecieron pensárselo por un momento, pero el Uchiha no iba a negarlo, tenía curiosidad de saber si en esa realidad quizás su clan ... aún seguía completo y fue por eso que asintió para ir junto a Ikari.
Los 4 ya se encontraban algo alejados de la aldea, no lo suficiente como para correr peligro, pero si para que nadie los escuchara.
─ ¿Entonces? ¿Quiénes son? – preguntó la oji rojo mirando tanto a los chicos sentados en un tronco y al mayor, quien estaba parado a lado de ellos.
La otra azabache amiga de Boruto fue la que se armó de valor y contestó – Mi nombre es Yumei ... Uchiha Yumei – en el rostro de Ikari no se vio tanta sorpresa - ¿Ya lo sabías? – preguntó extrañada al ver esa reacción tan tranquila.
─ No hay que ser un genio para darse cuenta que el rubio ... tiene relación con mi amigo y que ustedes – señaló a los 2 Uchiha – son idénticos al Sasuke que conozco, aunque podría decir que tu ya estás demacrado – se burló del mayor sacándole un gruñido.
─ ¡Wow! – el Uzumaki no se molestó en disimular su asombro y aquel leve sonrojo en sus mejillas – Ella ... es genial – susurró lo suficientemente alto para que las 2 chicas pudieron escucharlo.
Ikari pudo notar la mirada que le dedicó Yumei al rubio, una mirada de anhelo y a la vez tristeza con enfado.
─ Entonces ... ¿Cómo llegaron aquí?
Sasuke fue el que habló ahora, pues si se los dejaba a los niños probablemente terminen soltando más de lo que deberían – Por un error llegamos aquí, no hay más que explicar.
─ Siempre tan molesto – rodó los ojos, Yumei no tardó en darse cuenta que la azabache hablaba de Sasuke con tanta confianza, como si se conocieran o tuvieran algo más – Está bien, imagino que no me pueden contar por que alteraría algunas cosas ¿Verdad?
─ ¡ES GRANDIOSA SASUKE-SAN! – chilló el rubió con una cara "tierna" que en realidad resultaba perturbadora para la Hatake.
Inmediatamente Yumei se paró y se alejó de ellos – Ya vengo, tengo una urgencia – aquella voz dulce podía contener muchos sentimientos pesados, dedujo Ikari.
Después de un rato, la llegada de Yumei preocupó al Uchiha – Iré a buscarla.
─ ¡NO! – gritó la azabache parándose de inmediato y recibiendo una mirada confusa del mayor.
─Es mi hija, no puedes decirme que hacer o no – refutó a la defensiva.
Ikari solo soltó una risa tras aquel comentario negando con la cabeza ... Entonces si es su hija y su actitud conmigo es aun peor que ahora ... por su mente pasaron varias ideas, sobre todo que en el futuro quizás solo sean un par de desconocidos – Será tu hija, pero es una mujer, también hay cosas privadas ¿Sabes?
EL Uchiha lo pensó y dedujo que ella tenía razón, aunque no lo admitiría. Tanto él como Boruto vieron como ella se alejaba, perdiéndose entre los árboles.
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─ Oye ... ¿Qué pasó? – preguntó de manera suave al ver la silueta de Yumei sentada en una roca.
─ Oh, Ikari-san – aquello hizo que la nombrada se avergonzara y pidió que solo la llamara por su nombre – Simplemente tantos viajes me dejaron algo agotada.
Era obvio que la Hatake no se creería tal cuento y se puso a recordar lo que pudo haber sido causante de su cambio de ánimo - Es Boruto, ¿Cierto? – vio como su contraria giró levemente su cabeza como si así evitara hablar del tema – No puedes negar algo que tus ojos delatan.
─ Él tiene razón ... eres grandiosa deduciendo cosas – soltó con una risa apenada.
─ ¿Cómo es el futuro? ¿Cuál es su historia Yumei-chan? – aquel apodo de cariño lo soltó tan natural que le extrañó incluso a ella misma.
─ No tenemos historia ... o si la tuvimos ya quedó en el pasado
─ Vaya, tu generación parece muy distinta a la mía – dijo divertida soltando una leve risa – Aquí solo nos preocupamos por entrenar ... al menos yo quiero dejar el tema del corazón a un lado.
Yumei sabía que no podía soltar mucha información del futuro, aunque no sea su realidad podría ocasionar algún cambio negativo, por lo que trató de ser cuidadosa con lo que decía – En el futuro ... las cosas no son tan complicadas, al menos para algunos ...
─ ¿Y para ti?
Aquella pregunta le había caído como agua helada ... ¿Por qué?, se preguntaba al sentirse tan débil y con la compañía de Ikari, como si ambas comprendieran el dolor de cada una – Para mi ... - soltó una risa cansada – Es raro que esté hablando de esto con alguien que apenas conozco - ¿A penas conoce? ... entonces en el futuro ¿Yo no estoy en su generación? Eran las ideas que rondaban en Ikari – Pero ... mi historia no es como la de cualquiera, estuve un gran tiempo rechazada por mi madre y mi hermana y creo que ahora él ... llegué a sentir algo por él, pero no para de decepcionarme y aunque intento mostrar siempre que soy fuerte
─ Por dentro te siente débil – Ikari terminó la oración de la otra, sorprendiéndola – Creo que te comprendo a la perfección – le dedicó una sonrisa triste y resistiendo el impulso de abrazarla – Pero, no vas a sanar si continúas fingiendo que todo está bien ... que no estás herida. Dime ¿Todo este tiempo estuviste sola?
─ Yo ... - Yumei fue la primera en derramar una lágrima sin darse cuenta – siempre tuve la compañía de un amigo y su familia, ellos me trataron como parte de ellos.
─ Ya ves ... no intentes volver a donde diste todo y no te valoraron, simplemente no perteneces ahí y eso no está mal, solo que el corazón a veces necesita más tiempo para aceptar algo que tu cabeza ya sabe.
─ Tengo miedo ... de no poder superar y dejar todo eso atrás
Ikari pasó a tomar la mano de Yumei brindándole un ligero apretón – Sanar siempre dependerá de ti Yumei, aunque la culpa no sea tuya debes ser valiente por aquellos que te quieren de verdad.
La Uchiha tras oírla e intercambiar esas cortas pero profundas palabras, sintió como tenía un peso menos en ella, pero no iba a dejar pasar la oportunidad de preguntar sobre la azabache - ¿Y qué hay de ti? ¿Cómo puedes entender todo esto?
─ Porque yo también lo pasé y aun sigo pasando – soltó como si nada – Pero comparada a la niña de antes y contigo, yo si logré cambiar de pensamiento ... aunque no se si sea bueno o malo.
─ A veces no volver a ser la misma persona es lo mejor que te puede pasar ¿No crees?
Tras esas palabras la voz de Sasuke interrumpió a ambas - ¡Yumei ya debemos irnos!
─ Oh ... creo que el tiempo pasa volando cuando menos lo esperas – dijo mientras se iba parando – Ikari – la Hatake volteó a mirarla, sin tener intenciones de pararse – Tu no existes en mi mundo – aquello sorprendió a la azabache, ahora todo podía tener sentido – pude ver como miras a mi padre, quizás en este mundo yo no llegue a existir, pero espero que tu seas feliz.
Antes de que se alejara más, la voz de la oji rojo hizo detener a la Uchiha – Recuerda que ... nadie puede elegir si van a hacerle daño en este o en otro mundo, pero siempre podrás elegir quien te lo hace – Solo recibió un "Gracias" de la chica para escuchar como sus pasos se iban alejando – Yumei, significa "sueño" ... que bonito nombre – habló mirando al cielo.
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