Liu Ziyu permaneció dos meses en el hospital y otro mes y medio de recuperación en casa, hasta que finalmente pudo volver a la escuela.
Pero el día que volvió a la escuela, tuvo que enfrentarse a la crisis de ser golpeado de nuevo y regresar nuevamente al hospital.
Al ver la expresión sombría de Chu Yang, quien apretaba fuertemente su muñeca, Liu Ziyu se quedó boquiabierto.
Sus piernas estaban demasiado débiles para levantarse, así que sólo pudo tambalearse e intentar retroceder, pero lastimosamente miró a Jiang Gu en busca de ayuda.
Quién iba a pensar que, al darle una mirada, vería a Jiang Gu mirándolo con indiferencia, con las comisuras de los ojos aún húmedas y ligeramente enrojecidas.
En verdad parecía como si le hubieran acosado de una forma muy miserable.
¡¿Dónde está el Jiang Gu que le rompió el brazo sin pestañear?!
Esto es falso, ¿verdad?
Liu Ziyu estaba a punto de llorar y dio un paso hacia atrás mientras se lamentaba: —Hermano Jiang, no te metas conmigo, estas equivocado, ¿sí?
Tan pronto dijo estas palabras, Chu Yang lo levantó por el cuello. Aunque Chu Yang no era alto y se ve delgado, su fuerza realmente no era pequeña.
—¿Estás loco? —Chu Yang había estado buscando a Jiang Gu en todas partes, el sudor en su rostro y su ansiedad aún no habían desaparecido. Jaló la cara de Liu Ziyu para que viera bien el aspecto de Jiang Gu—. ¡Mira como intimidaste a Jiang Gu!
Jiang Gu se tapó los labios y lanzó una mirada tímida hacia su dirección.
Liu Ziyu: ?
—Yo no lo hice... —Estaba tan asustado de las personas que tenían un gran poder.
Chu Yang apretó fuertemente su barbilla con su mano, incluso su voz era muy fría como si estuviera endurecida con veneno: —¿No lo hiciste? ¿Acaso no miras como esta Jiang Gu?
Los ojos de Liu Ziyu se encontraban apagados, él también quería saber por qué Jiang Gu estaba así, ¿de acuerdo?
La escuela es muy aterradora, mamá, quiero ir a casa, woo wooo.
Cuando Liu Ziyu casi fue golpeado violentamente, Jiang Gu finalmente tomó conciencia de la situación. Primero le hizo una seña para que se detuviera la persona que estaba escondida a un lado que había estado tomando fotos y videos, luego caminó hacia Chu Yang y lo tomó del brazo.
—Yang Yang, estoy bien.
Agarró la muñeca de Chu Yang, y con un poco de fuerza dejó escapar a Liu Ziyu de la mano de Chu Yang.
Chu Yang frunció los labios y no se enojó al ver escapar a Liu Ziyu. Simplemente le devolvió la mirada a Jiang Gu con una expresión feroz, pero su voz se suavizó cuando dijo: —¿Dónde parece que estás bien?
—Solo me arrastró y me empujó un poco, Yu Han debe haberle pedido que lo haga.
Jiang Gu le lanzó una mirada a Liu Ziyu, quien estaba intentando abrocharse el botón roto del cuello de su camisa, pero sin conseguirlo. Liu Ziyu siguió jugueteando torpemente con el botón, y levantó su lastimosa cara para pedir ayuda a Chu Yang.
—¿Empujarte?
Ante estas palabras, la expresión de Chu Yang se volvió cada vez más sombría. Apretó involuntariamente su puño, mirando fijamente a Liu Ziyu que se encogía en posición fetal y empezaba a temblar, al ver esto perdió el deseo de hacer un movimiento.
Pero de ninguna manera podía dejar que este tipo se fuera así.
Caminó hacia adelante y se puso en cuclillas frente a Liu Ziyu. Apretó la mandíbula de Liu Ziyu lo suficientemente fuerte como para hacer que el hombre levantara la cabeza, sus ojos oscuros y silenciosos miraban fijamente al otro hombre, incluso su voz suave y quebradiza sonaba sombría.
—¡Si te atreves a tocarle al menos un pelo a Jiang Gu, con la mano que lo tocaste, te la cortaré, recuérdalo!
El último sonido fue casi un rugido.
Liu Ziyu sintió que Chu Yang, que lo miraba fijamente, era realmente aterrador, especialmente sus ojos negros, que se veían tan sombríos como un espíritu resentido.
Ya estaba asustado y le volvieron a gritar, así que no se contuvo y soltó lágrimas de miedo.
No entendía porque tenía que enemistarse con Jiang Gu y Chu Yang, a estos dos monstruos ni siquiera podría ganarles, ¿vale?
—Piérdete.
Chu Yang se enderezó, y cuando Liu Ziyu escuchó esto, rápidamente huyó avergonzado junto con otras personas que tenían miedo de moverse. Algunas personas estaban tan conmocionadas que al correr perdieron sus zapatos, y tuvieron que regresar a recogerlos.
Después de sermonear a los demás, Chu Yang se dio la vuelta y arregló el cuello de Jiang Gu. Al mismo tiempo, no estaba muy feliz y dijo: —¿Por qué viniste aquí tu solo?
Al ver que los dos botones superiores de Jiang Gu habían sido arrancados, se enojó aún más. Afortunadamente llegó a tiempo, de lo contrario Jiang Gu habría sido intimidado por Liu Ziyu y los demás.
—¿Estás enojado? —Jiang Gu ocultó la alegría bajo sus ojos y preguntó cautelosamente con la mirada baja.
—¡¿No debería estar enojado?! —Chu Yang se mordió las mejillas, y con las cejas fruncidas llenas de ira, agarró con fuerza el uniforme escolar de Jiang Gu—. Apenas terminaron las clases y desapareciste sin decir una palabra, ¿sabes lo ansioso que estaba?
—Lo siento. —Jiang Gu agachó la cabeza.
—Entonces dime, ¿por qué demonios has venido aquí? —Chu Yang levantó la cabeza y preguntó.
Jiang Gu siguió con la cabeza agachada y no hizo ningún sonido, parecía que no podía responder.
Al ver esto, Chu Yang se enojó mucho.
Sentía que a Jiang Gu no le importaba su propia seguridad.
Ni siquiera podía pensar en que Jiang Gu estuviera en peligro, ¡pero al parecer a Jiang Gu no le importaba!
Estaba tan enojado que no quería escuchar las disculpas de Jiang Gu, giró la cabeza y se marchó.
Después de dar dos pasos y quedarse parado en el sitio durante unos segundos con los puños cerrados, volteó con un gruñido de rabia y arrastró a Jiang Gu con él.
Incluso cuando llegaron a casa, Chu Yang no se calmó.
Jiang Zi Ao estaba en una videollamada con Jiang Guo, y tan pronto escuchó la voz del cachorro en la entrada, inmediatamente gritó que quería verlo.
Inesperadamente, el siempre obediente Chu Yang corrió hacia las escaleras, cerró la puerta y desapareció.
Jiang Gu lo siguió, se dio la vuelta hacia Jiang Zi Ao y levantó la mano en señal de saludo.
Después se dirigió a las escaleras.
Al ver esta situación, Jiang Gu se encontraba perdido, pero los ojos de Jiang Zi Ao se iluminaron.
Mirando esta escena, ¡su sobrinito debe haber hecho algo para enojar al cachorro!
Sobrinito, ¡tú también tienes tus malos días!
Con una sonrisa, Jiang Zi Ao se dirigió con orgullo hacia él y dijo: —Sobrinito, te dije que no fingieras, ¿no?
Al oír esta voz insoportable, Jiang Gu no se detuvo y tampoco contestó, sólo empujó la puerta y entró a la habitación.
Vio que Chu Yang estaba sentado frente a su escritorio, apoyando la barbilla con una mano y leyendo un libro, parecía que no quería prestarle atención.
—Yang Yang. —La voz de Jiang Gu sonó un poco apagada, como si hubiera estado llorando.
Chu Yang se congeló, pero aun así se contuvo y no miró hacia atrás.
Tenía que hacer que Jiang Gu recuerde esto y hacerle saber lo importante que era su seguridad.
Al ver que Chu Yang no se daba la vuelta, Jiang Gu dejó de hacer ruido y se limitó a dejar su mochila y entró descalzo al baño, diciendo: —Primero voy a ducharme.
En cuanto oyó que iba a ducharse, Chu Yang no pudo contenerse, se dio la vuelta un segundo antes de que se cerrara la puerta del baño, y abrió la boca, pero no tuvo tiempo de emitir ningún sonido.
Jiang Gu tenía miedo de ducharse solo.
¿Debería dejarlo pasar por esta vez?
Sus pensamientos estaban divididos.
Mientras se debatía si entrar o no, escuchó de repente el ruido de algo que se caía en el baño, y el corazón de Chu Yang se congeló. Corrió al baño y vio un bote de champú derramado delante de Jiang Gu, quien se encontraba sentado bajo la ducha sujetándose la cabeza y temblando.
—Jiang Gu, ¿cómo estás?
A Chu Yang le dio un vuelco en el corazón del susto y se apresuró a cerrar el grifo y a abrazar al mojado Jiang Gu.
Al mismo tiempo, vio los moretones en el brazo de Jiang Gu y de repente recordó que Jiang Gu había sido golpeado por Yu Han esta mañana.
¡Ni siquiera se había dado cuenta!
Chu Yang cerró los ojos con disgusto, sintiéndose instantáneamente abrumado por la culpa.
Jiang Gu todavía seguía encogido, apretándose con fuerza sus brazos, y con el cuerpo tembloroso, incapaz siquiera de emitir un sonido.
Chu Yang levantó apresuradamente a Jiang Gu y lo sacó fuera, lo puso primero en la cama, luego buscó una toalla seca para limpiarle el agua de su cuerpo y se apresuró a buscar medicinas para sus heridas.
Durante ese tiempo, Jiang Gu permaneció sentado en el borde de la cama con la cabeza baja, sin decir una palabra.
Cuando Chu Yang lo abrazó y lo consoló con una voz cálida, pareció que finalmente su voz regresó, sus ojos estaban húmedos cuando abrió la boca.
—Fui a la parte de atrás de la escuela —Tartamudeo sin levantar la cabeza—. Para obtener pruebas.
—¿Pruebas? —Chu Yang se quedó helado.
Jiang Gu levantó la mirada y se secó los ojos heridos.
—Si solo es una grabación de voz, puede hacer olas dentro de la escuela porque todo el mundo ha escuchado la voz de la persona en la grabación y sabe quién es, pero fuera de la escuela no tendrá mucho efecto. —Hizo una pausa y continuó—. Para las personas fuera de la escuela necesitamos una evidencia visual como un video para mostrarles las atrocidades que Yu Han y los demás han cometido, por eso... estaba dispuesto a ir cuando Liu Ziyu me llamó.
Después de decir esto, Jiang Gu levantó la cabeza y miró al sorprendido Chu Yang.
Frotándose los ojos, con una expresión lastimaba, tuvo que contenerse: —No quería que te preocuparas, por eso no dije nada, pero aun así hice que te preocuparas, lo siento mucho.
Sólo entonces Chu Yang se dio cuenta de que Jiang Gu no estaba descuidando su propia seguridad en absoluto, lo estaba haciendo para obtener pruebas y sabía que no era seguro ir de todos modos.
Sorprendentemente seguía enojado porque Jiang Gu era muy bueno.
Chu Yang se sentía tan culpable que ni siquiera sabía qué decir, se arrojó a los brazos de Jiang Gu y le secó las lágrimas con sus manos.
—Tienes razón, es culpa mía, te prometo que no volveré a enojarme contigo, no más lágrimas, ¿está bien?
Jiang Gu negó con la cabeza, su voz expresaba lo agraviado que estaba: —Me dejaste y te fuiste por tu cuenta.
Las posiciones han cambiado y fue el turno de Chu Yang de bajar la cabeza y arrodillarse frente a la cama, admitiendo su error con el dolor de su corazón y culpa.
—Me equivoqué.
—Entonces, ¿puedo tocarte ahora? —Jiang Gu levantó la mirada y dijo.
Chu Yang se apresuró a asentir, abriendo sus brazos y dejando que Jiang Gu lo abrazara.
Jiang Gu se frotó el cabello y volvió a preguntar: —Tu ropa está mojada, ¿puedo quitártela?
En ese momento, cualquier cosa que dijera Jiang Gu lo haría, así que Chu Yang asintió enseguida y obedientemente le pidió a Jiang Gu que le quitara su ropa.
Quitando la última pieza de ropa del cuerpo de Chu Yang, la mano de Jiang Gu tocó familiarmente la zona sensible del cuerpo de Chu Yang. Su fuerte cuerpo presionó fácilmente a Chu Yang contra la cama, haciéndolo incapaz de moverse: —Yang Yang, quiero tocarte, ¿puedo?
Al oír esto, Chu Yang supo inmediatamente lo que Jiang Gu iba hacer.
Dudó, pero aun así asintió con la cabeza obedientemente.
Las comisuras de la boca de Jiang Gu se levantaron ligeramente y sus dedos se movieron, deslizándose a lo largo de las nalgas de Chu Yang por primera vez.
Sin esperar que Jiang Gu lo tocara allí, Chu Yang se tensó y enderezó su cuerpo, y su tono de voz cambió: —¡Jiang Gu!
—¿No puedo entrar? —Jiang Gu bajó los ojos y dijo en voz baja—. Son sólo dos dedos.
—No, no puedes... —La extraña sensación para Chu Yang en ese lugar era muy incómoda, le ardía todo el cuerpo, mordió la sábana y sacudió la cabeza.
—¿Ni siquiera los dedos? —Volvió a preguntar Jiang Gu, tirando de la comisura de sus labios ligeramente—. ¿Sigues enojado conmigo?
Chu Yang sacudió la cabeza avergonzado, los músculos de todo su cuerpo se tensaron y temblaron.
El tono de voz de Jiang Gu cambió, retiró la mano y dijo: —Sabía que seguías enojado.
Al segundo siguiente, Chu Yang agarró su mano, y sus lágrimas empezaron a caer. Estaba tan avergonzado que no quería ser tocado por detrás, pero aun así dijo con dificultad: —No estoy enojado... Puedes hacerlo, solo, solo puedes usar tus manos.
Después de hablar, lo primero que hizo fue morderse los labios y enterrar su cara en las sábanas de la cama.
Se salió con la suya...
Jiang Gu sonrió, se lamió los labios, y sus ojos traicioneros se curvaron enfermizamente.
Todo esto fue planificado por él.
Si solo Yang Yang se hubiera sentido un poco culpable, esto no habría tenido éxito, ¿comprendes?