-Qué, qué significa...
La cara de Im Hae Won se volvió blanca.
-Oí que el negocio de tu padre quebró y que sus deudas excedieron los 2 mil millones de won. Si atrapas bien a Kang Jin Wook, te pagaré la deuda. ¿Qué piensas?
La razón por la que Kang Jin Tae no comenzó a mover sus cartas, incluso con una tarjeta llamada Im Hae Won en su mano, fue porque tenía la información necesaria.
Y finalmente consiguió lo que más quería. La información era que Im Hae Won tenía una gran deuda de la que no podía escapar.
Im Hae Won, que había estado mordiendo su labio por un tiempo, finalmente levantó la cabeza con una cara determinada.
-Muy bien, vamos a hacerlo, es un trato.
* * *
Sun Woo, que salió a dar un paseo por el jardín y se encontró a Kang Jin Wook y sin pensarlo mucho, se detuvo.
-¿Por qué me miras así?
La mirada de Sun Woo se detuvo en la mano de Kang Jin Wook sosteniendo algo. Kang Jin Wook sostenía una bolsa de compras como si hubiera estado en una tienda de frutas.
Tan pronto como se dio cuenta del olor, la boca de Sun Woo se hizo agua.
-Oh, esto.
Kang Jin Wook, que notó lo que Sun Woo estaba mirando, levantó el brazo. Al acercarse a la bolsa de la compra, el aroma de la fruta en el interior se esparció más intensamente.
-Parece que quieres comerlo. ¿Por qué no actúas con respeto a la persona que lo trajo?
Kang Jin Wook le dijo a Sun Woo, que miró la bolsa de la compra sin saludar. Solo entonces Sun Woo se dio cuenta de que estaba demasiado absorto.
-Sí. Perdón. Has llegado.
No es como si estuviera dándole la bienvenida. Todavía mirando la bolsa de la compra, saludando sin sinceridad.
Kang Jin Wook le dio una bolsa de compras al ama de llaves Baek, quien estaba observando a los dos desde la distancia hasta hace un momento.
- Pélalas de inmediato.
-Muy bien, director.
El ama de llaves Baek tomó rápidamente la bolsa de la compra y sonrió mientras miraba a Sun Woo.
-Sun Woo, por favor espera en la sala de estar. Te lo traeré de inmediato.
-Ah... sí.
Sun Woo hizo contacto visual con la señora Baek y sonrió torpemente. Se rascó la mejilla con el dedo índice avergonzado.
No había querido comer nada correctamente debido a las náuseas matutinas, pero no podía entender lo que estaba pasando.
Cuando el aroma de la fruta salió de la bolsa de compras en la mano de Kang Jin Wook, sus ojos no se nublaron como si estuviera borracho.
-Vamos.
Kang Jin Wook agarró la mano de Sun Woo, que todavía parecía un poco aturdido, y entraron a la casa. Kang Jin Wook, que se dirigió a la sala de estar, desapareció, después de sentar a Sun Woo en el sofá, se fue a cambiar de ropa.
Cuando Kang Jin Wook se cambió a ropa más cómoda y regresó a la sala de estar, Sun Woo estaba comiendo las naranjas dulces con el plato en su regazo.
-No habías comido nada de frutas en estos días, pero me alegra que estés comiendo bien las naranjas.
La señora Baek, que estaba de pie junto a Sun Woo, miró a Kang Jin Wook y habló primero. En esos días, como estaba casi exclusivamente a cargo de Sun Woo, el ama de llaves Baek a menudo hablaba con Kang Jin Wook primero de esta manera.
Era porque Kang Jin Wook estaba tan interesado en la rutina de Choi Sun Woo que se dio cuenta de que quería que Sun Woo le informara por su cuenta.
Mirando a Kang Jin Wook que compró las naranjas, la señora Baek sonrió suavemente. Esos días, el ambiente dentro de la casa se sentía más armonioso gracias a las dos personas.
Kang Jin Wook no asintió y fue directo junto a Sun Woo y se sentó. Justo antes de poner la naranja en su boca por tercera vez, Sun Woo vio a Kang Jin Wook y se detuvo.
-Lo compré para que lo comas. Cómetelo todo.
-Uh... No. Tú debes comer un poco, también. Estoy avergonzado. No suelo comer frutas agrias. Pero últimamente lo hago, tal vez por qué mis gustos han cambiado debido al embarazo.
Cuando vio la bolsa de la compra, Sun Woo se sonrojó. 'No podía quitar los ojos de ella en absoluto, y me daba vergüenza comer sin importarme si alguien estaba a lado o no'.
Al mismo tiempo, al ver que seguía moviendo sus labios, las naranjas parecían satisfacer su gusto. Kang Jin Wook no mostró ninguna reacción de nuevo esta vez.
Más bien, fue porque sabía que eso avergonzaba más a Sun Woo.
-¿Qué hay de la comida?
Preguntó Kang Jin Wook mientras miraba al ama de llaves Baek.
-Comí hace poco.
-¿Tu estómago está bien?
Sun Woo solo asintió diciendo que sí. En realidad, comió unas galletas y agua. Aun así, fue a dar un paseo porque sentía que estaba satisfecho.
-Come más si no te has llenado.
Kang Jin Wook rápidamente se levantó de su asiento diciendo eso a Sun Woo, quien vació un plato lleno de naranjas. Los ojos de Sun Woo siguieron naturalmente a Kang Jin Wook.
-Voy al estudio porque tengo algo que hacer.
-Oh, sí.
Kang Jin Wook respondió sin que Sun Woo le preguntara. Justo a tiempo, el celular en su mano comenzó a sonar. En el pasado, pensó que el sonido de llamada no quedaba bien con el obsesivo, pero en esos días, a menudo cuando le llamaban solo se escuchaba la vibración...
De hecho, Kang Jin Wook lo cambió a vibración, no a otro tipo de sonido de llamada, debido a la reacción de Sun Woo, que parecía sorprenderse cada vez que sonaba, pero la persona que recibió tal consideración no lo sabía. Kang Jin Wook tampoco quería decirlo.
Kang Jin Wook tampoco hizo obvio que iba al estudio con el pretexto de trabajar para dejar que Sun Woo coma cómodamente las naranjas y que así ya no seguir preocupándose por él.
Kang Jin Wook, que vio a Sun Woo asintiendo de nuevo, sacó su teléfono celular y revisó la llamada. Era el secretario Kwak, quien le ordenó dejar el trabajo antes de volver a casa.
Tenía tres mensajes seguidos.
[Kang Jin Tae y Im Hae Won se reunieron]
Se adjuntaron dos fotos bajo el texto. Tan pronto como Kang Jin Wook entró en el estudio, inmediatamente apretó el botón de llamada.
-¿De qué se trató la conversación?
- Esto es lo que pude descubrir. Dijo que apoyaría activamente la relación con el director ejecutivo.
Era obvio que era idea de Kang Jin Tae. Pero era realmente la forma en la que pensaba.'Te mueves exactamente como piensas'.
- Qué más.
- Im Hae Won también parecía estar de acuerdo.
-Eso es inesperado.
- Se dice que Kang Jin Tae ofreció como condición pagar todas las deudas de Im Hae Won.
'Sí, esa era la razón'. En ese momento, Kang Jin Wook recordó a Im Hae Won, que estaba esperando en el estacionamiento subterráneo. Parecía que tienes algo que decir, 'No me digas...'
-¿Qué movimientos ha hecho Im Hae Won?
- Hasta ahora, no ha hecho nada.
-Mantén un ojo en él.
Kang Jin Wook, que inmediatamente colgó y encendió su portátil, estaba más serio que nunca. Poco después, su teléfono celular volvió a sonar y llegaron varios mensajes.
Los ojos de Kang Jin Wook brillaron fuertemente después de confirmar el contenido.
* * *
-¿Quieres un poco más?
-No, estoy bien.
Sun Woo bajó lentamente el plato que todavía tenía en la mano sobre la mesa de la sala como si tuviera sentimientos persistentes.
-Te traeré más.
-Está bien así.
-Ni siquiera has tenido una cena adecuada, así que es bueno comer una más.
Sun Woo fingió estar reacio cuando la señora Baek se fue con el plato. De hecho, estaba un poco avergonzado porque ya había comido más antes de que llegara Kang Jin Wook.
Sin embargo, no podía rendirse por el sabor de la naranja en su boca.
-Supongo que a Frijolito le gustan las frutas agrias.
La señora Baek sonrió mientras le entregaba el plato a Sun Woo. Sun Woo, que inventó una excusa linda con el bebé.
Kang Jin Wook solo le informó a la señora Baek del embarazo de Sun Woo. Pensó que todos los empleados de la casa eran confiables, pero no era algo bueno que mucha gente supiera.
-Supongo que sí.
Por lo tanto, la señora Baek estaba poniendo su alma y corazón en cuidar de Sun Woo. Ni Kang Jin Wook o Sun Woo dijeron quien era el otro padre del feto, pero no había nada que preguntar.
Sun Woo, que se quedó solo después de que la señora Baek desapareciera en la cocina, se frotó suavemente el estómago, que parecía estar ligeramente hinchado.
-Debes estar deseando más frutas de Jeju porque ha pasado una semana desde que nos fuimos. ¿No es cierto?
Sabía que no respondería, pero aun así preguntó. Por un tiempo, los melocotones eran tan tentadores, pero ahora eran las naranjas dulces.
Sun Woo se limpió la mano ligeramente pegajosa con un pañuelo mojado y presionó el botón de la TV. Las noticias de la noche se estaban transmitiendo.
"Recientemente, se han levantado sospechas de que una gran empresa hizo un despido injusto a una empleada omega. Con respecto a la líder de equipo que tomó licencia parental".
"La mujer afirmó que había sido despedida de su puesto de líder de equipo mientras se encontraba en licencia parental y que había sido asignada a un centro logístico en la provincia tan pronto como fue reincorporada".
"Sin embargo, entre ellos, se reveló que un alto ejecutivo de la dirección intervino directamente en los asuntos de personal. En la empresa..."
Sun Woo frunció el ceño por la noticia sobre la licencia parental de la omega que se aplicó como una desventaja para trabajar.
-Eso es cruel.
-Lo sé. Trabajó muy duro en esa compañía y es injusto para la omega, que incluso dio a luz a un niño. Un desperdicio para la sociedad, ella tiene mucho talento para su trabajo.
La cabeza de Sun Woo se giró ante la repentina voz. Kang Jin Wook estaba de pie con los brazos cruzados cuando apareció.
Sus ojos estaban fijos en las noticias que Sun Woo estaba viendo.
-¿Qué?
Cuando Sun Woo miró fijamente, los ojos de Kang Jin Wook se movieron hacia allí.
-No, bueno, solo...
Le sorprendió que haya dicho eso. Sun Woo se calló bruscamente porque no podía decir tal cosa. Kang Jin Wook también sonrió como si se hubiera dado cuenta de lo que Sun Woo estaba pensando.
-Puedes volver al trabajo cuando quieras. Porque eres bienvenido.
Incluso le dijo a Sun Woo que volviera a la compañía. Sun Woo agitó la cabeza de inmediato sin tener que pensarlo dos veces.
-No.
-¿Por qué? ¿No es demasiado rápido negarse?
-Mi sueño es vivir en un lugar tranquilo con Frijolito.
Las cejas de Kang Jin Wook subieron. Sun Woo lo miró y fingió no saberlo. Estaba preocupado por si Kang Jin Wook diría: "Ni siquiera pienses en ello", pero afortunadamente, no fue así.
Y justo a tiempo, la señora Baek apareció de nuevo con un plato de naranjas dulces.
-Siéntate, tú también come.
Sun Woo inmediatamente puso el plato sobre la mesa de la sala y llamó a Kang Jin Wook. Este se movió tranquilamente al lugar donde Sun Woo estaba sentado.
La noticia pasó a otro tema después de una avalancha de conversaciones sobre la injusta despedida por la licencia de maternidad del omega. Sun Woo, que no estaba interesado en las noticias, rápidamente prestó atención.
-¿Cómo te has sentido?
Kang Jin Wook miró hacia la TV por un rato y se giró hacia Sun Woo de nuevo y le preguntó.
-Bueno, como siempre. Me siento bien, ya no siento náuseas. Pero hoy estoy comiendo mucho gracias a ti que me compraste naranjas dulces. Gracias.
Sun Woo dio una respuesta positiva y ofreció un trozo de naranja a Kang Jin Wook. Este miró a la fruta en la mano de Sun Woo por un momento. No pasó mucho tiempo antes de que se moviera.
-¡¡...!!
No fue la mano de Kang Jin Wook sino sus suaves labios los que tocaron las yemas de los dedos de Sun Woo.
Traducción y Corrección: Kathy
Lectura Final: GinebraConTequila