—Vaya, esto si que sabe bien.— dijo masticando.
—Me alegra que te guste. Y eso que aún no llegamos al postre~...— ella sonrió y se acercó a él, dejando sus rostros cerca.
—¿Y que es?
—Ranas de chocolate.
Debio suponerlo. Rió siempre se refería a la comida.
—Oh, claro... si...— se volvió a sentar bien.
—¿Qué sucede? Creí que me ibas a besar... ¿no querías ranas? ¿Preferias otra cosa?— soltó una risa y se acercó a besarlo, antes de continuar comiendo.
—No, están perfectas las ranas... aunque... bueno, no importa.— rió.
Podría parecer algo poco creíble, pero a ella le fascinaba la comida de Rio. Aún así Samatoki y Jyuto huyeran de ella, ______ con todo el gusto del mundo se quedaba con Rio a comer siempre.
Su platillo favorito, su sopa de escarabajo longicornio.
Aunque hoy, estaban comiendo una especie de carne asada de iguana. Claro, estaba deliciosa.
—¿Sabes Rió?— él la miró mientras seguía comiendo —Me gustaría que me enseñaras a preparar esto algún día.
La sonrisa de Rió no podía ser más grande.
—¡C-claro que si! ¿Cuando quieres que te muestre? ¿Mañana? ______, no sabes cuanto tiempo he deseado que este momento llegue, me... me siento muy feliz— dijo a penas y mostrando alegría en su tono de voz.
Bueno, así era él.
Luego de aquella cena fueron a dormir, y a primera hora de la mañana, Rio la levanto para ir a cazar su desayuno, porque claro, si le iba a enseñar a preparar su comida de supervivencia, le enseñaría todo el proceso que está conlleva.
Y claro que no contento con un solo platillo, estuvo mostrandole cientos de recetas que el había creado e incluso adaptado por alrededor de dos semanas.
—______, ¿que trajiste hoy para desayunar? Algo normal o...— no pudo evitar reír.
Jyuto era su amigo, trabajaban juntos y por su gran cercanía, el procuraba robarle un poco de comida, aunque al ver los platillos tan exóticos que comenzó a llevar, dejó su comida en paz.
—Es una lástima por ti, muere de hambre su quieres.
Él hizo un sonido de asco y se sentó frente a ella.
—Ya, en serio. Quería hablar contigo.
—¿Sobre qué?— preguntó metiendo un poco de comida a su boca, obligando así a Jyuto a apartar la mirada con asco.
—Él cumpleaños de Rio. Samatoki y yo estábamos planeando comprarle un pastel para celebrarlo.— ella rió.
—Claro, yo lo compro. Ya tenia planeado hacerlo de todos modos. Y prepárarle un par de platillos por su cumpleaños.
—Por fin comida normal y con tu sazón— celebró.
—Si, claro...
Lo que Jyuto no sabía, era que lo que ella tenía planeado, era cocinarle uno de sus peculiares platillos, pues lo que hizo Rio, realmente ha ia sido enseñarle, más ella nunca preparó nada, y pensaba que sería un lindo detalle de su parte regalarle un festin.
Ambos policías acordaron lo que harían aquel día y ahora solo era cuestión de que llegara el día.
Samatoki sería el encargado de sacar a Río del campamento; Jyuto adornaria un poco y ______, se encargaría de la comida.
Rio se llevó la sorpresa de su campamento y ambos de sus amigos lo felicitaron. Pero no había señales de su novia.
Espero.
Espero más.
Nada.
La llamo incluso, pero no contestó.
Algo decaído, entró a su tienda, dándole las gracias a sus amigos por tomarse las molestias y se encerró.
Un rato después, ella llegó corriendo. Se le ha ia hecho tarde.
—¿Y Rio?
—Bien hecho, ______. Hiciste que se encerrara porque no llegabas.— se quejó Samatoki. Jyuto soltó un suspiró y acomodó sus lentes.
—¿¡_______?!— preguntó Rio con desesperación saliendo rápidamente de la tienda y acercándose a ella.
—Perdón Rio, es que...— fue interrumpida por un gran y necesitado beso de Rio, quien tomó su rostro con delicadeza.
—No importa... estas aquí... eso era lo que queria— le sonrió y la abrazo. Ella dejo la gran bolsa que traía y correspondió.
—Feliz cumpleaños, Rio.
—Bien, ahora podemos entregar los regalos. Rio— lo llamó Samatoki. —Te traje este... nuevo paquete de ollas. Para... ya sabes, cocinar.
—Y yo... uno de los mejores vinos que tenían tenían la tienda. Espero podamos brindar dar juntos durante la cena.
—Y yo... te hice un festin.— dije apresurandome a llevar la bolsa a aquella mesa para sacar todos los refractarios.
—¡Qué bien! ¡Muero de hambre!
—Morimos de hambre, a decir verdad— agregó Jyuto a lo que ella rió.
—Bueno, dejen presento mi regalo y pueden servirse tanto como quieran.— sacó primero el pastel y comenzó. —Temos por aquí... Estofado de ardilla.— miró a los dos presentes quienes enseguida hicieron una mueca y rió para sus adentros —Rata de campo rellena, con el toque especial de... ______, porque Rio no la hizo. Y finalmente... pudin de caracol. Adelante, sirvanse— dijo mirando al policía y al Yakuza.
—¡______! Hiciste... esto para mi...— la besó repitiendo muchos "gracias" y procedió a servirse con emoción.
Ella se acercó al otro par y los abrazo.
—No le harán el feo a Rio, ¿o si?— se burló
—Me las vas a pagar— dijo entre dientes Jyuto, acercándose a Rio, quien no dudó en servirle una porción muy grande.
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Gracias a ClareCaza por su ayuda para que yo escribiera este Shot 🥰
Debo decir que quedo muy bien, y sin duda me gusto 🥺
☆FANARTS DEL CUMPLEAÑERO☆